Tenemos un pacto / Lando Norris

Capítulo 23

- Hola Charles - dijo Lando y este lo saludó.

- Chicos, ¿os estáis peleando a ver a quién tiene mano más grande? - dije al notar que las dos manos estaban en mi espalda y nunca la quitaba de ella.

- Lo siento - dijeron ambos a la vez.

- Pensaba que al final al no venías - dijo Charles a Lando cuando nos metimos dentro de la sala.

- Cambio de planes a última hora - dijo Lando y yo sonreí.

- Bueno, pero por lo menos has podido - dijo Charles.

- Perdón Bella, Charles también corre en la fórmula 1 - dijo Lando añadiendo a la conversación.

- Ah vale, ¿en tu equipo? - pregunté sabiendo claramente la respuesta.

- No, él está en otro equipo - dijo Lando y volvió a apoyar su mano en la espaldas y yo arqueé nuevamente la espalda.

- Ah vale, genial. Oye, pues ya que estamos así. Tengo una amiga que va a inaugurar un hotel estos días. Le haré llegar con Lando la invitación, y traerte a un invitado.

- Perfecto, espero la invitación. Tengo que irme - dijo Charles.

- Nos vemos - dijo Lando.

- Un placer - dije y se acercó a darme dos besos, y no dudó en poner su mano nuevamente en mi espalda.

Charles se fue y nos quedamos Lando y yo completamente solos.

- ¿Podrías quitar tu mano de mi espalda? - dije y seguí con la mirada a Charles que  iba desapareciendo entre la multitud.

- ¿Por? - preguntó Lando -. ¿Te pasa algo? - dijo preguntándome al oído.

- Para Lando - dije y mordí inconscientemente el labio inferior.

- Vale - dije y quitó la mano.

Estuvimos un poco más dentro de allí pero empezó cada vez más fuerte la tormenta y decidimos irnos.

- Está horrible - dije mientras que salíamos.

- No te preocupes, vas a llegar sana al hotel - dijo Lando.

- Más te vale - dije.

Subimos al coche y Lando fue muy despacio hasta el hotel, la verdad es que a medida que iban pasando lo mimutos la tormenta cada vez era peor y no quería que Lando tuviera que conducir hasta casa.

- Quédate en el hotel - dije cuando llegamos a la puerta principal y estábamos dentro del coche.

- ¿Por? - preguntó Land.

- Hace muy mal tiempo y no es cuestión de que te pase nada en la carretera, y no me vale lo de es que soy piloto porque a mi me da igual - dije y lo miré.

- Vale, pues me quedo. Lo que no tengo ropa, ni nada - dijo Lando.

- ¿Ya habéis vuelto? - preguntó mi madre acercándose al coche.

- Le estaba diciendo a Lando que se quedara que hace muy mal tiempo - dije y miré  a mi madre.

- Justamente venía a eso, porque cada vez es peor y las noticias dicen que la noche será muy complicada y bueno no se cuanto tardarás pero es mejor que te quedes - dijo mi madre.

- Vale, sin problema - dijo Lando.

- Y no te preocupes por la ropa Lando, por aquí hemos creado unas cositas para el hotel y entre ello es un pijama así que vas a dormir genial - dijo mi madre.

- Gracias - dijo Lando y sonrió.

- Nos bajamos del coche y abracé  a mi madre.

- Lo malo es que no hay habitación disponibles porque bueno, con el tema de la inauguración estamos completos - dijo mi madre y yo en ese momento solo pensaba que mi madre no dijese lo que estaba pensando.

- No te preocupes, si Bella me deja, me acomodo en el sofá o no sé si tenéis - dijo Lando.

- Claro que sí, avisaré para que te lo preparen - dijo mi madre.

Entramos al hotel y aprovechó mi madre para enseñarnos un poco el hotel. Todos los empleados estaban terminando de recoger algunas cosas.

- Se prevé que viene una gran tormentas esta noche - dijo mi madre mientras que mirábamos el tiempo.

- Bueno, estamos a salvo - dije y la miré.

- Justo te iba a llamar para ver como os iba - dijo mi madre.

- Nos ha ido muy bien, primeras fotos que nos hacen juntos - dijo Lando.

- Bueno, muy bien - dijo mi madre.