Tenemos un pacto / Lando Norris

Capítulo 49

- Cariño, te voy a ayudar en todo y tienes la suerte de contar con Zak y con muchas personas más. ¿Te gustaría?

- ¿Y qué pasaría con Lando?

- ¿A qué te refieres? - preguntó mi padre.

- Al lo del contrato - dije.

- Claramente se acabaría - dijo mi padre.

- Sí, eso está claro.

- Hay que tener en cuenta que ahora ya trabajas en la empresa y eso se vería bastante mal.

- ¿Ya trabajo? - pregunté  y reí.

- Perdón, me he adelantado a los hechos - dijo mi padre.

- Papá, me va a encantar coger el puesto de Jake, no quiero decir sustituir a Jake porque eso es algo imposible.

- ¿Enserio? - preguntó mi padre parándose en seco.

-  Sí, nunca te voy a dejar solo con la empresa - dije y lo abracé.

- Pues...aparte de terminar el máster, hay que ponerte a tope con todo lo que llevaba Jake antes de empezar la temporada - dijo mi padre.

- Madre mía, voy a ver menos el sol que cuando estaba en la universidad - dije.

- Lo que claro, lo de tener esos sentimientos que tienes hacia Lando... aunque sea complicado, tienes que cortar la relación porque no podéis tener nada - dijo mi padre.

- ¿Qué sentimientos? - pregunté a mi padre.

- A mi no me mientas, te conozco - dijo mi padre.

- No sé a que te refieres - dije.

- Cariño, tu madre y yo nos mirábamos así cuando estábamos empezando a enamorarnos, vale que al principio era un juego, pero creo que ya habéis pasado al momento de empezar a gustaros y sentir algo.

- No siento nada por Lando.

- Bueno, yo no me voy a meter en los sentimientos que tengas o no tengas hacia una persona porque eso ya eres tú y lo que  quieras aceptar  con respecto a ello.

- Vale papá, todo muy claro - dije intentando para el tema.

Realmente no sabía los sentimientos que tenía hacia Lando, llevaba muchísimo tiempo intentar pensar en todo lo del tema que tenía con él pero es que en realidad...no tenía muy claro lo que pasaba en mi y tampoco lo que pensaba él.

Regresamos a la casa donde mi madre nos había preparado una pequeña merienda antes de  empezar a preparar la cena donde venía la familia.  Me puse a ayudar a mi madre con algunos preparativos de la cena, y aunque hacía muy poco tiempo que Jake nos había dejado hace poco, no queríamos dejar de celebrar con la familia unas fiestas como estas.

Mi padre se había encargado de hacer un postre que siempre ele había quedado increíble, que era brownie que era espectacular.

- Anda, vayan a cambiarse que ya en nada viene tu hermana y la familia - dijo mi madre terminando de colocar las cosas en la mesa.

- De lo que hablábamos antes sobre el trabajo... nada - dije cuando nos dimos la vuelta mi padre y yo.

- Tranquila cariño, es un secreto.

Entré a mi habitación, me cambié de ropa mientras que miraba como iba llegando mi hermana Val con Harry, se les veía tan bien juntos que me encantaban verlos. Salí de la habitación de camino al hall pero me paré a ver la habitación de Jake, que parecía que estaba allí porque su olor se hizo más fuerte.

- Está todo como lo dejó - dijo apareciendo Val y me apoyé en ella.

- Muy ordenado como siempre, bueno, menos la cama que está un poco destrozada  y algunas cosas en el escritorio - dije.

- Parecía que lo sabía - dijo Val.

- Sí - dije.

- Anda, vamos - dijo Val.

Fuimos hasta la cocina donde estaban todos y donde mi madre estaba colocando en unas bandejas los dulces que habían traído Val y Harry.

- Tenemos algo que contar - dijo Val.

- ¿Qué pasa? - preguntó mi padre.

- Estoy embarazada - dijo Val emocionada y nos quedamos mis padres y yo sin saber que decir.

Mi madre comenzó a gritar mientras que abrazaba a Val y mi padre abrazaba a Harry. Estaba muy ilusionados, harto cuando me dio el abrazo, se me acercó al oído.

- Si es niño, lo llamaremos Jake - dijo antes de abrazarme y yo no pude evitar que se me saliera alguna que otra lágrima.

- Madre mía, te me haces mayor - dije abrazando a mi hermana.

- Y tu serás la mejor tía, solo falta un buen tío.

Seguimos hablando emocionados de como se enteraron, cuando tocaron la puerta. Salí de la cocina y fui directa a la puerta, se empezab a notar un poco el frío.

- Hola - dijeron al abrir la puerta.