¿Y si fuera cierto? (Jinx)

Capítulo 9

—¡Bienvenido Dan! — serpentinas y confetis saltaron por su cara, los fanáticos locos le obligaron a sonreír para un reel que después se compartirían en el grupo de WhatsApp e intercambió número con todos para unirse al mismo. Se apartaron de la cámara y él se vio con el modelito de camiseta que le habían mandado a diseñar. Ahora lucía como uno más de ellos y si alguien los viera juntos, no podría negar que a sus 28 años se reunía con unos universitarios a pasar el rato hablando de Joo Jaekyung. Increíble.

—Es tu bienvenida oficial— comenzó a explicarle Nam Dongyun y los otros se organizaban para dar inicio a la sesión, revisando las conexiones del proyector—. No aceptamos a cualquiera, pero eres un recomendado de Yoon Gu y el hecho de que seas el fisioterapeuta de Jaekyung le da un giro a la situación, creo que puedes sumar muchas anécdotas ¿No lo crees?

—Sí... claro— que incómodo era tener que fingir que le emocionaba la idea de hablar de Joo Jaekyung cuando ya tenía suficiente de ver su mala cara.

—Bien chicos, damos inicio a la sesión número 57. Hoy con la compañía de nuestro nuevo integrante les doy la bienvenida— Nam Dongyun era un chico optimista, parecido a Yoon Gu y con tan poco de conocerlos ya podía concluir que esos dos eran los más obsesionados.

Baek Nakyum parecía el más dulce, Hyesung parecía ser un admirador de moda y analizaba hasta el más mínimo detalle en la apariencia de Jaekyung, desde las marcas de su ropa hasta el estilo de sus tatuajes. Park Dojin parecía ser el más reservado, asentía a lo que se decía y debatía muy poco, pero no dejaba de mostrar su admiración por Jaekyung escribiéndole canciones que, según él, algún día le dedicaría en televisión.

—Antes de dar inicio con mi teoría, tengo una petición— todos parecían impacientes, pero Dan sentía que Park Dojin le miraba—. Me gustaría escuchar al fisioterapeuta, es más viejo que nosotros y pasa mucho tiempo cerca de Jaekyung.

—Vamos Dan, pase al frente— le animó Yoon Gu con un codazo y no tuvo más alternativas que hacerlo.

—¿Qué quieren saber?

—Lo que sea Dan— Nakyum le animó con una sonrisa.

—Sólo habla y date prisa, hagamos que esto terminé antes de las diez por favor— Ahn Jiwon siempre parecía molesto, Dan todavía no entendía si en verdad era un fanático, o estaba ahí por mera complacencia para su querido novio.

—Bueno Jaekyung es un atleta impresionante. Tiene la mejor condición física que he visto hasta ahora y su mentalidad le lleva a plantearse nuevos objetivos cada mañana. Incluso mientras descansa y debería enfocarse en recuperar la energía, no deja de pensar en el ring y sus oponentes. Ayuda a los demás cuando están en apuros, es inteligente y atractivo. Todavía no he aprendido a distinguir entre su sonrisa sarcástica y la verdadera, pero supongo que cuando sonríe lo hace para sentirse parte de los demás. Es tan alto y huele tan bien que cuando le tienes cerca hace que...

Paró. Tuvo que hacerlo, estaba diciendo tonterías. Se dejó llevar por el hecho de estar atrapado con los fanáticos de Jaekyung, así de poderosa podía ser la influencia de un grupo.

Se sentía desarmado y asustado por lo fácil que era perderle la antipatía a quien se tiene por enemigo en cuanto deja de comportarse como tal.

Jaekyung no había hecho más que cosas buenas en últimos días; le facilitó el adelanto de su sueldo, le dejó dormir en su habitación, volvió a buscarlo cada mañana para ir a correr juntos y se comportó de buena manera al momento de recibir el tratamiento respetando sus silencios.

Todas las miradas se posaron en él, ni siquiera Yoon Gu pareció tener algo que decirle.

—Hay que seguir con la teoría. Se hace tarde— advirtió Jiwon y él regreso a su asiento junto a Yoon Gu que le miraba de reojo; tenso e impaciente por preguntarle sobre el trasfondo de ese discurso irrelevante y sin sentido.