Hubo un silencio abrumador, los pasos se habían detenido pero simplemente no aparecía, era como si se tratara de algún tipo de espejismo o algo así, estaba alerta ante cualquier sonido, olor o movimiento que pudiera decirme donde se oculta aquel individuo que nos acecha — No te confíes Moroha — Decía en mi mente — Ese desgraciado puede estar en cualquier parte.
No sé cuanto tiempo ha pasado pero, vuelvo a escuchar unos pasos, lo que me resulta extraño es que el olor es diferente, este se puede decir que lo conozco. Mis manos se aferran al brazo derecho de Hisui, siento como mi corazón acelera su ritmo cada vez más, mis manos y piernas tiemblan debido al temor que sentía, estoy intentando controlarme ya que este no es el momento para nerviosismos, ahora más que nunca debo demostrar lo valiente que soy y lo mucho que he dejado atrás a aquella Moroha miedosa y sumisa que se dejaba maltratar por los demás. Una figura familiar a invadido mi campo de visión, siento una gran decepción porque esperaba ver a ese tal Ryusei y terminé viendo a:
— Hiroshi — Dice Hisui con la voz enronquecida, se nota que está muy molesto por la presencia de ese individuo nuevamente en nuestro palacio — LARGATE.
— Oh, por supuesto que me iré — Dijo sonriendo de forma macabra — Pero con ella.
Posa su mirada en mí y siento como mis manos de enfrían casi al instante, me atrevo a asegurar que están como un bloque de hielo, pero no dejo que eso me domine, Hisui tronó sus dedos y dando dos pasos delante de mí... Le dijo sin temor alguno: — Primero tienes que matarme.
Hiroshi se veía muy decidido a arrancarme de los brazos de Hisui, así que haciendo un movimiento con su mano derecha, sostuvo con fuerza el mango de la daga que traía consigo; me preocupa el hecho de que El Chico de la Cicatriz no haya siguiera desenvainado su espada, quizás el piensa que no es necesario usarla. El punto es que debe tener cuidado ya que es muy peligroso estar así desarmado en medio de una pelea.
— Yo no necesito de un arma para vencerte — Se ríe de forma arrogante — ¡VAMOS HIROSHI! Actúas como si no me conocieras.
— ¡ES QUE YA NO TE CONOZCO! — Espeta — Has cambiado mucho, y por ende el jefe nos ordenó acabar contigo lo más pronto posible.
— No me sorprende, Ryusei nunca vendrá a acabar conmigo directamente — Se burla — Siempre manda al más IDIOTA a hacer el trabajo para después inculparlo.
— Cuida tus palabras Hisui — Le amenaza — Si sigues insultándonos así, voy a tener que cortarte la lengua. Aunque, mejor sería acabar contigo de una buena vez.
Hisui extiende sus brazos hacia los lados, casi a la altura de su pecho mientras que dejaba ver en su rostro una sonrisa maniática — ¡ADELANTE! Veamos si tienes las agallas suficientes para apuñalarme.
Con solo escuchar la palabra "apuñalar" mi estómago se retorció a tal grado que me hacía querer vomitar... Con el solo hecho de pensar que ese idiota pudiese clavar la daga en el cuerpo de mi chico, me hace temblar de miedo, no quiero que lo toque, no quiero que le haga daño... ¡NO QUIERO QUE SE LE ACERQUE SIQUIERA! Pero, aunque quiero intervenir, Riku no me lo permitiría ya que este es un pleito entre Hisui y Hiroshi.
— ¡VAMOS! — Gritaba — ¡APUÑALAME!
— Pues eso haré — Dice y empieza a correr en dirección a Hisui quien se encontraba aún con los brazos abiertos. Yo sentía que mi corazón se iba a paralizar en cualquier momento, y justo cuando creí que le enterraría en el pecho aquella daga... El Chico de la Cicatriz tomó su brazo con rapidez y lo torció de una forma antinatural; un grito se construye en la garganta de Hiroshi mientras que Hisui lo golpeaba con mucha fuerza y le decía: — ¿No que ibas a vencerme? — Le da otro golpe — ¡NO TE LA VAS A LLEVAR IMBÉCIL!
ESTÁS LEYENDO
EL CHICO DE LA CICATRÍZ
Fanfic(NO ACEPTO COPIAS NI ADAPTACIONES DE NINGÚN TIPO DONDE LO VEA SERA DEMANDADO) ADVERTENCIA: ** ESTA HISTORIA CONTIENE TEMÁS FUERTES Y TRAUMANTES, ESCENAS DE VIOLENCIA Y SEXO EXPLÍCITO, ASÍ QUE SE RECOMIENDA DISCRECIÓN** Moroha es una muchacha de 16...