¡Mi hermano! (Fred y George Weasley)

Capítulo 8

Narra Fred.

Todo es una completa mierda.

Anoche Harry tuvo un sueño en donde veía cómo atacaban a nuestro padre, ahora estamos en San Mungo afuera de la habitación sentado al lado de Ron esperando que salga mamá para saber cómo está.

Solo pienso en si Harry nunca hubiera tenido el sueño, nunca hubiéramos sabido lo de papá y entonces no sé qué hubiera pasado.

Estuvimos unos minutos en silencio hasta que Ron habló:

- Oye Fred, ¿desde cuándo están saliendo tú y George? -preguntó en un susurro apenas audible.

- Desde que empezó el verano -respondí, creo que quiere volver el ambiente menos tenso.

- Okey, siento no haber hablado con ustedes, es que es muy confuso y hasta un poco incómodo saber que mis hermanos son pareja...

- Está bien, -interrumpí- creo que tuviste una reacción bastante normal

Ron asiente y mira al suelo.

- ¿Cuántas personas lo saben?

- Draco, Harry y tú. -Ron asintió y luego pareció recordar algo

- ¿Sabes que Draco y Harry son novios? -asentí y él también lo hizo- ehh... ¿qué harán si todos se llegan a enterar?

- Pues eso no lo sé, pero estamos reparando una tienda abandonada que también es una casa en la parte de arriba, y George y yo estuvimos hablando y haremos nuestra tienda ahí pero también nuestra casa propia, por si se llegan a enterar, ya tenemos un lugar dónde vivir. -bromeé y él rió un poco. No era mentira cuando dije eso, mamá no está muy alegre con que hiciéramos una tienda de bromas pero creo que lo aceptará con el tiempo, lo estuvimos arreglando antes de volver a Hogwarts y cuando podamos seguiremos re-construyendo aquel lugar.

Después de varios minutos mamá volvió diciendo que papá estaba bien y que podemos volver, en el camino Ron volvió a hablar.

- Los apoyo, en su relación y en su sueño de empezar con la tienda de sortilegios. Y si se llegan a enterar, de mi parte no será.

- ¿Por qué estás de nuestro lado? -pregunté. Era mi mayor duda en ese momento.

- Porque veo que él te ama, y tú también, se les nota en los ojos, al menos para los que prestan atención si es obvio.

Me sentía feliz, al menos uno de la familia nos apoya.

Fuimos al Grimmauld Place y subimos directamente a nuestra habitación, George y yo la compartiremos con Ron, así que estábamos los tres preparándonos para ir a dormir. Entonces recordé la charla que tuve con Ron.

- Hey Ron, ¿podrías decirle a George lo que me dijiste a mí? -pregunté y él asintió y miró a George.

- Lo que había dicho es, que lo apoyo chicos -dijo y George sonrió- si te soy sincero a veces es un poco incómodo pero ahora me doy cuenta de lo enamorados que están y ¿quién soy yo para arruinar eso? Su hermano por supuesto, pero no pienso arruinar esta relación que tienen.

George se veía feliz, sonrió en grande y Ron le devolvió la sonrisa. Nos preparamos para dormir aunque lo que menos queríamos en ese momento era dormir, lo que le pasó a papá fue un poco aterrador. Él se quedará unos días en el hospital pero al menos estará aquí para navidad.

Estaba un poco inquieto, noté que Ron estaba durmiendo por sus ronquidos y fui lentamente dónde estaba George y me acosté sin decir nada, él estaba durmiendo pero se despertó, él siempre tuvo el sueño liviano, apenas me vió notó lo que quería hacer y se hizo a un lado para darme espacio. Lo abracé por la espalda y le dí un beso en la mejilla, escuché un pequeño buenas noches de parte de George y le respondí también, no tardé mucho en quedarme dormido.

Mañana será otro día, esperemos que uno mejor.