Renjun

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¿Cuando mi visión del mundo se volvió tan retorcida? ¿Tal vez desde la adolescencia? ¿Mi niñez?

No sé si todo empezó por un trauma sin resolver o simplemente fue algo que se fue dando con el tiempo, si fue algo que debía pasar o podía evitar, cualquiera sea el caso, no tenia mucho sentido seguir indagando en la causa si las consecuencias ya me persiguieron durante toda la vida. Si ya me castigué tanto por cosas que no me pasaban a mí, pero que me importaban incluso más que a las personas que si le pasaban, ¿Por qué estoy ahora, en la madrugada, cuestionandome una vez más todo esto?

Correcto, estoy dando vueltas en mí cama desde hace unas horas, sin ninguna razón en particular porque en realidad toda la vida me costó conciliar el sueño...Ruidos nocturnos, la luz que se cuela por mí ventana, el sonido del reloj de la cocina, y muchos más que sí me los pongo a contar no acabaré nunca. Siempre puedo lidiar con ellos, aunque también están estas noches especiales en las que no encuentro consuelo que me haga dormir, y lo único que me queda es seguir bajando en la espiral de mis pensamientos hasta que mi cerebro se canse lo suficiente y por fin me deje descansar.

En estos momentos y siempre que me sucede, me gusta reflexionar; sobre mi vida, mí familia, la sociedad y yo.

El problema es que por lo general nunca llego tan profundo como hoy, repasando por las cosas que hice en el día, no hay nada que particularmente me pudiera quitar el sueño de esta manera tan brutal. Ya estoy harto, cansado y también mareado. Quiero dormir.

Volviendo al hilo por el que empecé este laberinto mental, ¿Sucedió algo específicamente?

¿Acoso callejero? Nunca algo demasiado traumático (exceptuando a esa loca beta de cuando apenas me presenté). Tal vez recuerdo haber visto a alfas mirando de manera lasciva a omegas en la calle, pero nada más.

¿Abuso? No, mi hogar es tranquilo, aunque obvio tenía quejas sobre actitudes de mis padres frente a algunas situaciones. Y no recuerdo a ningún mayor acosandome u obligándome a hacer algo.

Me dí vuelta sobre mí espalda, para quedar mirando a la izquierda, el lado contrario de la ventana.

¿Bullying? Sí lo pensaba un poco, incluso yo mismo podría considerarme bully. Con estos cambios en mí vida y el elefante Omega en la habitación, viéndolo en retrospectiva, fui muy malo con los omegas a mí alrededor. Me arrepiento muchísimo de ese pasado mío y de esos delirios de superioridad. Soy tonto.

Y por mí bien, decido cortar esta sub espiral en la que me estoy metiendo, y sigo con el tema principal.

No logro encontrar nada en específico, y mí hipótesis que salió de otras noches de desvelo se hace cada vez más fuerte: Solo estoy hastiado con el mundo.

Bueno, "mundo", en realidad las cosas por su nombre, estoy hastiado con los omegas y sobre todo con los alfas.

Con los omegas por ser débiles, y con los alfas por aprovecharse de su fuerza para mal.

Por eso anhelaba tanto ser ese alfa fuera de línea: no demasiado alto, ni musculoso, ni siquiera tan intimidante pero amable, servicial y atento.

Me dí vuelta de nuevo para quedar mirando a la derecha, de cara a mí ventana. Por muy molesta que fuera, también era el lado de la pared y me gustaba porque era refrescante y viva la ironía, por lo general terminaba amaneciendo de ese lado.

Pensé que era una señal inconsciente de que por fin iba a caer en mis sueños, noto que estoy respirando más lento, mis músculos no están tensos (aunque ni siquiera había notado que se habian tensado en primer lugar), el mareo ahora se hace placentero, y...

Lee Gyuram.

¿Lee Gyuram? ¿Quién es Lee Gyuram?

La respiración se me cortó. Giro una vez más y ahora conflictuado miro al techo pálido de mí habitación.

𝘿𝙤𝙣'𝙩 𝙇𝙞𝙠𝙚 𝙏𝙝𝙞𝙨 | 𝙉𝙤𝙍𝙚𝙣𝙈𝙞𝙣Donde viven las historias. Descúbrelo ahora