⎯⎯ᴅɪᴇᴄɪᴏᴄʜᴏ

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Siguió su camino con la bandeja que llevaba una taza de té y una de café, desde la barra solo eran cuatro pasos hacia la que parece ser la mesa predilecta para ellos, pero quería que fueran más, comenzó a enervarse nuevamente como lo había hecho hace tan solo unos segundos cuando consulto a su superior si podía llevar ese pedido, no podía ser tan patético.

Así que avanzó, tanto que, los cuatro pasos se transformaron en tres, y en un abrir y cerrar de ojos estaba frente a las causas de su desgracia.

- Hola Jeno... - y cómo no, era Jaemin tomando la iniciativa siempre.

Renjun solo se limitó a voltearse a verlo, pareciendo un tanto abatido.

- Hola, yo- casi decía que los extrañó, pero eso no era así. Extrañaba sus olores nada más.

Jaemin sintió un dèja vu y sonrió levemente: Yo también...

De alguna manera siente que el otro alfa con tan solo mirarlo podía descifrarlo completamente. Lo agradecía, así no tendría que rebajarse a pronunciar sus sentimientos en voz alta, tal como siempre se le ha enseñado. Pero tambien le aterraba, si sin siquiera decir mucho ya entendía lo quería decir, nunca sabria cuando el alfa podría usar esa misma habilidad para poner sus debilidades en su contra. Jaemin no parecía ser ese tipo de persona, pero no lo conocía realmente.

En silencio, dejo el café frente a Jaemin quien pronunció un "Gracias" bajo y volteó a dejar el té cuando Renjun habló: Hola... - ambos alfas voltearon a verlo rápidamente por lo que Renjun se sonrojó fuertemente e intercaló su mirada entre Jaemin y Jeno rápidamente antes de bajarla y volver a ver sus manos entrelazadas con dureza encima de su regazo.

Jaemin encontró su reacción tierna (como todo lo que hacía), y Jeno creía que tal vez sus propias mejillas tambien se pusieron un poco rosas.

Toda la situacion parecía como si estuvieran repitiendo el dia en el que se conocieron, misma mesa, misma hora, mismas bebidas...Y tambien mismos sentimientos, pero más intensos y con otros tintes. Igual pero diferente. 

Se enderezó nuevamente colocando la bandeja bajo su brazo, mirando como perdido al omega, mientras Jaemin parecía que estaba viviendo el mejor momento de su vida con una sonrisa cariñosa y mirada enternecida hacia el menor.

- Ya saben a qué hora termina mi turno...Tal vez podríamos ir a caminar por ahí luego - dijo Jeno mirando hacia otro lado, dudoso y haciéndose el desinteresado.

Jaemin volteó a verlo con el mismo cariño con el que estaba mirando a Renjun, lo único que provocaban las palabras de Jeno en él era ilusión, primero invitándolos al café y ahora queriendo estar más tiempo juntos, pero rápidamente se acordaba de sus duras palabras (y el hecho de que casi se pelean), y ahí tenía la dosis de realidad. Jeno no lo quería, Renjun tampoco y él, aunque no quiera aceptarlo, solo está muy solo.

Su sonrisa decayó, pero no dejo que desapareciera.

- Sí, eso estaría bien... - respondió y volteó nuevamente hacia el omega que había elevado un poco la mirada al escuchar la propuesta del alfa. - ¿Que dices Renjun?

El omega parecía nunca estar preparado para la atención que le daba, hacia que se cohiba muy rápido. Lo cual le daba dudas pues Renjun, a simple vista, era un chico que no se guarda las cosas, que le hace frente a todo, pero con ellos, con él, parece hacerse chiquito, sin contar cuando lo rechazó brutalmente, luego toda la situación con su "amigo" el alfa, y después de la cena con sus padres. Por lo visto Renjun no sabía reaccionar, o recién estaba viviendo una situación así y estaba aprendiendo sobre él mismo. Cierto, lo olvida, no tiene ni un año de que se entera de que es omega.

𝘿𝙤𝙣'𝙩 𝙇𝙞𝙠𝙚 𝙏𝙝𝙞𝙨 | 𝙉𝙤𝙍𝙚𝙣𝙈𝙞𝙣Donde viven las historias. Descúbrelo ahora