⎯⎯ᴏɴᴄᴇ

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¿Como empezaría la conversación? La tan extraña e incómoda conversación que iba a tener con los alfas, gracias al entrometido y dramático Donghyuck, y la orden de su madre.

Debería comenzar diciendo algo como: "Ese alfa dramático no es mi novio, ni siquiera tuve pareja alguna vez así que ni se molesten, moriré virgen. No debería darles explicaciones, ni siquiera somos amigos, pero bueno. Ah, y mi mamá, ejem, alfa quiere que vayan a cenar hoy a casa, porque quiere saber que clase de estúpidos son".

Paró abruptamente de manejar el pincel sobre el lienzo.

Suspiró dejando su pincel y godete en su escritorio.

Agarro el tabique de su nariz con mucha frustración y estrés.

Algo que a Renjun le salía muy pero muy bien, además de dibujar moomin's, era el hecho de que sobre pensaba todo, algo que era estresante, pero que por alguna razón no podía dejar de hacer. Desde las palabras que diría al entrar a la universidad, hasta las reacciones que podrían conllevar las mismas, por consiguiente, trataba de armar oraciones para no trabarse en plena conversación (Aunque siempre tartamudeaba una o dos veces, en especial cuando se trata de socializar, con cualquiera) y se esmeraba más si se estaba preparando para un debate o posible discusión, a veces se quedaba más tiempo en la ducha solo para armar argumentos válidos y entendibles, o a veces le gustaba ser malo con su contrario usando palabras extravagantes y elegantes, solo para molestar un poco, y eso era en parte por el pequeño complejo de superioridad que tiene respecto a las personas de su edad, algo de lo que va a divagar luego.

Sacudió su cabeza, muchos pensamientos se cruzaban sobre la idea principal.

Aclarar su relación con Donghycuk, e invitarlos a cenar, simple.

No.

Sabia la respuesta, así que volvió a su cuadro, después de todo lo tendría que entregar hoy, justo en una clase que tenía antes de ir a la bendita cafetería.

Sin más agarró su pincel y reanudó sus trazos sobre el lienzo.



Luego de su, incómodo, almuerzo con Jeno, volvió al campus, todavía tenía algunas clases, así que estaba yendo hacia su edificio cuando se cruzó con su buen amigo, Mark Lee, un beta muy simpático.

- ¡Hey Mark! - Llegó saludandolo con un abrazo fraternal, algo tan propio de Jaemin.

- Hola Jaem. - Respondió el extranjero correspondiendo el abrazo.

Se separaron y el alfa le preguntó con entusiasmo:

- ¿Como estas?

- Muy bien, gracias, y tú ¿en qué andas? - Pregunto Mark de vuelta.

La verdad es que hace unas semanas que no se ven, son muy buenos amigos, pues se conocieron en segundo de preparatoria. Y le tiene un gran aprecio, pues es uno de los pocos que se quedó con él después de que se presentara su segundo género, tal vez era por su condición de beta, pero le gustaba pensar que era por su verdadero cariño hacia el.

- Pues... - Desvió un poco la mirada, no le había contado sobre su gran noticia, y se sentía un poco incómodo pues siempre se contaban todo. - ¿Que? - Mark frunció el ceño.

- Mmmh, no te enojes, pero puede ser o no que encontré a mi destinado... - Se siguió haciendo el tonto, y Mark abrió mucho los ojos, eso le sorprendió mucho. - Y puede ser o no que sea solo uno, sino dos...Je je...

Y Mark solo abrió mucho más los ojos, si es que eso era posible.

- ¿CÓMO? - Preguntó sorprendido.

𝘿𝙤𝙣'𝙩 𝙇𝙞𝙠𝙚 𝙏𝙝𝙞𝙨 | 𝙉𝙤𝙍𝙚𝙣𝙈𝙞𝙣Donde viven las historias. Descúbrelo ahora