Era viernes, estaba por terminar la carrera de Derecho, mis exámenes finales eran lo más complicado del fin del semestre, había salido de mi penúltimo examen y tenía clase de procesal Penal con el Profesor Rinaldi, era el hombre más inteligente, guapo y cachondo que había visto y a decir verdad ya había tenido dos o tres sueños bastante calientes en los que terminamos follando
- Bien clase como ya lo había mencionado, se hará un examen práctico y por el día de hoy solo analizaré a cinco de ustedes, el resto puede retirarse... Los que se quedan son... - esperaba no rendir el examen hoy, quería más tiempo para estudiar - William, Henry, James, Olivia y... -
Estaba a nada de salvarme, todos estabamos deseando que no fuera nuestro nombre el último, si me salvaba podría irme junto con Theo que era mi mejor amiga pues saldríamos de fiesta el fin de semana
- Lorena - lo ví sonreír en cuanto dijo mi nombre - los quiero todos afuera y pasarán en el orden en el que los mencioné - perfecto, ahora aparte de rendirlo lo haría hasta el ultimo
Theo se despidio de mi pues no planeaba quedarse si no le tocaba hacer examen, ví como uno a uno fueron pasando, Olivia que era una de las chicas más inteligentes del salón salió en cuarenta minutos y los chicos salieron en menos pero maldiciendo al profesor, era mi turno, llevaba aquí casi tres horas esperando y tratando de recordar todo lo que había aprendido en el semestre
- adelante señorita Ferrer - menciono abriendo la puerta, camine dentro del salón
Mi examen fueron preguntas sobre un caso y como es que los manejaría, parecían gustarle mis respuestas o al menos no dijo nada negativo
No sabía cuánto tiempo estuve en el examen pero me refutaba cada respuesta con un nuevo argumento, aún así trataba de darle respuesta a todo
- impresionante Señorita Ferrer - dijo cerrando la carpeta que tenía para leer el caso - ha Sido la mejor prueba - me sentí orgullosa de que alguien como el profesor Rinaldi elogiará mi prueba
- gracias profesor - mencione
- ya tiene dónde realizar sus prácticas? - preguntó guardando sus cosas en su maletín, hasta entonces comencé a verlo más detenidamente, era bastante guapo, tendría unos veintiséis máximo veintiocho, cabello castaño oscuro, barba perfectamente recortada, alto, musculoso y no muy delgado pero tampoco gordo
- que le pasa señorita Ferrer? - Pregunto sonriéndome, hasta entonces entendí que seguramente me quedé demasiado tiempo viéndolo - es que acaso no le enseñaron que es de mala educación mirar tanto a la gente - El profesor Rinaldi me intimidaba y a la vez me gustaba bastante, había algo en el que me impedía hablar tranquila y normalmente terminaba tartamudeando
- yo no... solo me... lo lamento -
- y por lo que veo, aparte de ser buena en mi materia, no sabe hablar o si señorita Ferrer? - me observo un rato hasta que aparte la mirada de su rostro y me encogi un poco
- aún no decido en dónde hacer mis prácticas profesor - respondí a su pregunta después de la interrupción
- señorita Ferrer que dice de hacer las prácticas en mi despacho? - menciono el profesor sin siquiera levantar la vista - tome asiento -
- profesor Rinaldi yo... - no sabía que decir, jamás había pensado en realizar prácticas con algún profesor y menos con el
- Llámame Darius - menciono levantando la vista, podía notar como me leía
- yo... yo no... después de todo es mi profesor y... -
- técnicamente ya no lo soy señorita Ferrer - menciono mirando su reloj - así que por que no deja ese nerviosismo y acepta salir de aquí e ir a comer conmigo, así podemos hablar sobre el que trabaje en mi despacho, necesito a alguien como usted y puede liberar sus practicas- mi profesor me estaba invitando a salir de aquí junto con el, estaba nerviosa pero acepte
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DULCE SUMISION - RELATOS DE UNA SUMISA
AléatoireEste relato sigue las historias entrelazadas de varias parejas, cada una con su propio universo de deseos y fantasías, explorando sus límites. Cada encuentro es una exploración de la dominación y la sumisión, donde las parejas descubren que, en el j...