[Capítulo 14]

60 16 18
                                    


Dareen

¿Qué mierdas estaba haciendo? No tenía una jodida idea. ¿Cómo se habría enterado de mi estúpido compromiso arreglado con Victoria?

— ¡¿Dónde estás?! ¿Dónde está ese imbécil, Fabián?

Salí al salón cuando escuché a Mara gritar como loca. Nada más poner un pie en el salón corrió hacia mi dirección y voló una cachetada en mi dirección. Fabián soltó una maldición al aire y corrió hacia su novia, apartándola de mí y sosteniéndola con fuerza.

— ¿Quién coño te crees? ¿Quién coño te crees para hacer lo que te de la gana con los sentimientos de los demás?— gritaba histérica sostenida por su novio, el pobre estaba sufriendo arañazos en sus brazos y patadas — ¡Eres una puta mierda!

— ¿Qué coño te pasa, Mara? ¿Por qué llegas como una loca y me pegas? — eso pareció enfurecerla más, se agitó con más fuerzas mientras intentaba alcanzarme con sus uñas.

— ¿Loca? ¡Pero serás imbécil! — volvió a gritar — ¡Volviste a herirla, mierda! Volviste a romper su corazón y no te basta con eso, ¡te casas mierda! ¿Te vas a casar y solo estabas pasando el tiempo con Camila? ¿O por un puto segundo pasó por tu insensible mente compartirle a ella lo que ibas hacer? ¿Eh?

Negaba con la cabeza colorada de la rabia. Estaba histérica y tenía lágrimas cayendo por su rostro.

Escuchar sus palabras me hicieron pensar en mi conversación con Camila esta mañana en la universidad. Si Mara lo sabía...

— ¿Cómo lo sabe? ¿Quién se lo dijo? — pregunté, apretando los puños.

— Eres un puto insensible. ¿Ella está hecha una mierda y tú solo preguntas por quién se lo dijo? Vaya Dareen Hart, me impresionas con tu hombría. — aplaudió estruendosamente — ¿Quieres saber quién mierda se lo dijo?

— Dime de una vez, Mara.

— Lo vimos todo, Hart. Desde el desfile hasta el momento en que esa rubia estirada subió a esa plataforma y dijo que estaba comprometido. Vimos como la agarrabas por la cintura y luego posaban con sus familias como si fuera lo mejor del mundo.

Tragué saliva. Joder, era un imbécil. Era un imbécil. Había estado allí todo ese tiempo y yo no me había dado cuenta. Pero no entendieron nada, no vieron la verdad.

Yo no la sostuve por la cintura ni posé para una mierda de nada.

— No es lo que crees, Mara. — Fabián intento hablar pero su novia lo empujó lejos y se volvió hacia él.

— ¿Sabías de esto, Fabián? — el moreno tragó saliva encogiéndose en su lugar.

Vale, hay que aceptar que esa pelirroja molesta daba demasiado miedo cuando apuntaba con su dedo y te acusaba con esa mirada asesina que poseía.

— Yo solo... No podía decir nada, amor.

Mara negó mirándonos a ambos. Estaba sorprendida, eso se le leía claramente en la cara.

— No me lo puedo creer, ¿cómo pudieron ocultarnos a las dos esto? Fabián, tenías que haberlo dicho, soy tu novia y nunca nos guardamos ningún secreto. — dijo dirigida a su novio, se volteó hacia mi — Y tú — me miró de arriba a bajo despectivamente —, sabes lo que la destrozó lo de Daria y ¿te atreves a volver a hacerle esto otra vez?

Cuando te tenga (II) [Borrador]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora