The king's heart (l.s) #2

Extra San Valentín

Primero que nada, feliz día de san Valentín!!!
Recuerden que no pasa nada si no están en una relación, el amor no solo es de parejas, sino de familia, amistad e incluso de hermanos. Espero que todos hayan tenido un gran día, tranquilo y lleno de amor. Mi regalo para ustedes es este extra, el cual espero disfruten mucho y consiga alegrarles el día.

❤️❤️

Harry no tenía por qué estar nervioso, pero aun así el estómago se le contraía mientras se miraba al espejo. Había escogido usar algo simple pero que expresara que había pensado en arreglarse, que quería impresionar, que expresara que recordaba qué día era exactamente hoy.

Era el primer aniversario de bodas con Louis.

El corazón le latía descontrolado en el pecho, golpeaba con fuerza sus costillas, pero bajo todos los nervios, una sonrisa amenazaba con aparecer en su rostro a cada momento. Harry insertó el último pendientes en su oreja y dio un paso atrás para mirarse. Usaba una camisa color crema con perlas y cadenas de oro colgando en las mangas largas y holgadas, pantalones ajustados, los cuáles combinó con unas botas largas. Era verano, pero las noches, por alguna razón, se tornaban frías por el viento proveniente del mar.

Las sirvientas arreglaron lo último de la habitación, justo a tiempo cuando golpeaban la puerta. Harry se giró, dejando de respirar ante la idea de que Louis hubiera ido y lo encontrase así, a pocos segundos de terminar para darle la sorpresa que preparó a sus espaldas para celebrar ese día. Las cosas en palacio habían marchado bien, con algunos contratiempos y personas que, sin duda, amaban darle dolores de cabeza, pero Harry las manejaba bien, sobre todo con Iain. El hombre aún no había dejado de molestar con lo mismo. Esperaba esa noche... poder callarle la boca de una buena vez.

Había hablado con Louis.

Habían estado planeando integrar a uno más a sus vidas. Aunque la maldición de Denébola seguía acechándolo de vez en cuando al pensar en tener un bebé, sabía que si no daba el paso, ese temor persistiría, igual que con el temor al agua.

Asintió a la sirvienta que esperaba su permiso para abrir la puerta. Cuando lo hizo al otro lado estaba Calian, ladeando una sonrisa que prometía esconder cosas.

—Buenas tardes, majestad —habló el comandante —, Louis lo espera en las escaleras.

—¿Todo está en orden? —preguntó, refiriéndose a la sorpresa que instaló en el jardín trasero. Donde los riachuelos con peces nadaban de un lado a otro.

Lord Calian dio un asentimiento de cabeza.

—Dos guardias custodian la mesa. Los sirvientes llevarán la comida una vez ustedes lleguen.

—Perfecto —Harry inhaló hondo y se volvió a mirar. Habría sido mejor que Ivory estuviera aquí, pero su descarado amigo le pidió permiso para salir con Zimo a la playa. Según él, en todo el tiempo que ha estado en Nymeria, no ha tenido tiempo de ir a tocar el agua.

Era un vil mentiroso.

Harry sabía bien a qué había ido.

Escondió ese pensamiento en lo profundo de su ser, simplemente porque no le correspondía estar pensando en Ivory y su intimidad y se volteó. Fue a la puerta, diciéndole a las sirvientas que salieran de la habitación y encajó el brazo en el de Calian cuando el comandante se lo ofreció.

—Con todo respeto, majestad. Luce brillante.

—Gracias ¿Crees que a Louis le guste? —consultó, avanzando por el pasillo. Al ya estar cayendo el ocaso, las antorchas fueron encendidas. Los guardias dando las rondas inclinaron la cabeza cuando pasaron por sus lados.