Narrador omnisciente
El chico leía un libro en su cuarto (por llamarlo de alguna manera) La chica estaba en su despacho viendo como podía tomar esta situación. Alguien llamó a su puerta, a lo que ella abrió.
- Hola Kayla- Allie estaba en la puerta con una bandeja en la mano- No has comido estos días, así que te he hecho algo para comer...
- Muchas gracias Allie- dijo ella cansada- Déjalo ahí, luego comeré
- Come algo- dijo en un tono preocupado- Todos nos preocupamos por ti Kayla, si no fuera por Drake no me habría enterado de que no has comido en cinco días.
- Tranquila- Kayla le puso la mano en el hombro- No hace falta que te preocupes por mi
Dicho eso se desmayó, Allie la tomó en brazos y salió del Instituto.
- Está lloviendo- dijo en bajito, alguien que estaba ahí escuchó
- Yo la llevo- Calisto en su forma de Lavender- Tu tranquila, la llevaré a la enfermería del colegio.
- Vale- Allie le pasó a una desmayada Kayla a Calisto, con cierta desconfianza
El chico salió del centro con un paraguas, para no causar desconfianza de todos. Caminó poco, ya que el colegio y el instituto estaban pegados el uno al otro
- Oh, general Lavender- Abby saludó en la puerta alegremente- ¿Qué la trae por...?- Cayó en cuenta de que alguien estaba herida, Kayla, y abrió las puertas rápidamente- la enfermería esta en el pabellón dos, general Lavender.
- Muchas gracias Abby- Calisto le dio una sonrisa a la chica, la cual pareció estar feliz por eso.
Entró en la el pabellón, había varias camillas que habían encontrado en el almacén con gente en ellas. Llamó la atención de una chica
- ¿Podrías ayudarla?- La enfermera asintió y tumbó a Kayla en la camilla- se ha desmayado...
- Tranquila Lavender- la chica empezó a revisar a Kayla- Ha sido solo un bajón de azúcar.
- ¿Cómo lo has deducido tan rápido?- Preguntó asombrado Calisto, la chica era muy joven, de 6º de primaria
- Soy de los pocos alumnos que han investigado algo desde la lluvia- La chica se quitó la mascarilla que llevaba puesta- he descubierto que le ha dado un bajón debido a sus temblores, sudores y latidos rápidos. No debe de haber comido azúcar en mucho tiempo...
- Espera...- Calisto la reconoció- ¿Tu no estabas en la cafetería?
- Así es- La chica cogió algo con azúcar para Kayla- Pero descubrí que podía ayudar mas con esto que cocinando.
-Muchas gracias igualmente- Calisto se despidió de la chica y fue a pasear por el colegio.
Se sentó en el pequeño patio mientras que aún llovía, las gotas de agua chocaban contra la cara del chico, su disfraz, fue desvaneciéndose poco a poco. Su disfraz era perfecto, salvo porque no resistía esa lluvia ácida.
Lluvia acida, esos niños solo sabían que era una lluvia ácida, pensarán que es solo eso. Pero había niños aún mas listos en este instituto.
- Mira por donde- Una voz sonó en el patio- Cal, ¿Qué haces aquí?
El chico se giró a ver a la persona de la que provenían esas frases, Anabeth Crown
Pero mira que eres irresponsable- Le puso un paraguas al chico encima- Ya se que el ácido no te afecta, pero ¿Y si hubiera salido alguien y te hubiera visto sin el disfraz?
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Diario de un apocalipsis
Научная фантастикаKayla es una chica de 13 años, un día tranquilo en su instituto empieza a llover fuera, pero no es lo que parece.