Narrador omnisciente
Kayla notaba como su cuerpo era cubierto por esa piel de plumas, no reaccionó hasta que oyó a su compañero hablar.
- K-Kayla- Jake se puso nervioso- ¿Qué te ha pasado?
La apariencia de Kayla había cambiado por completo:
Sus ojos ahora eran negros, no notaba ni una nariz ni una boca; tenía un pico. Su cuerpo estaba completamente lleno de plumas y tenía unas alas: Era un cuervo, solo que a diferencia de los cuervos normales que no superaban los sesenta centímetros, Kayla medía dos metros. Era un cuervo de dos metros, pero ella no estaba pensando nada mas que en venganza.
Se acercó a Maia, ella estaba de pie lista para recibirla. Kayla empezó a volar e impactó contra Maia, empezó a atacar a la chica repetidas veces, dejó una herida abierta en su abdomen y se fue a ver el cuerpo de su madre aún con la forma de cuervo: Jake estaba intentando mantener a su madre viva, pero no podía ya que no tenían la capacidad suficiente. El brillo de los ojos de la madre de Kayla se desvaneció, no sin antes decir unas últimas palabras:
- Debes ser fuerte Kayla, debes ser como una fortaleza...- dijo en un suspiro, siendo audible para la chica cuervo. Se volvió a dar la vuelta para atacar una vez mas a Maia, pero un zorrito se puso delante.
"No vas a conseguir nada con eso, lo sé" Dijo telepáticamente Calisto
Kayla hizo caso omiso y apartó al zorro, Abby atrapó en el aire a Calisto y le miró a los ojos.
Iba a darle un picotazo en el pecho a Maia, pero ella se protegió con unos ¿Cuernos?
Un ciervo apareció ante la vista de Kayla y salió corriendo, ella alzó el vuelo pero en medio del aire empezó a detenerse su transformación, quedando solo las alas, las cuales no controlaba...
Cayó en picado desde unos veinte metros de altura, abajo nadie llegó a tiempo para que no la doliera la caída, pero no murió ya que gracias a tener habilidades el daño se reducía.
- Menos mal que estas bien- dijo Jake acercándose a donde había caído- ¿Puedes levantarte?
Kayla estaba tumbada hecha una bola intentando contener su ira e tristeza. Las alas seguían ahí a pesar de que ya no era un cuervo.
- Debemos irnos- dijo Calisto tras salir de su forma de zorro- Levántate...
Kayla se levantó, debido a las dosis que el le había echado ella no podía decir que no a la mayoría de ordenes, se levantó a regañadientes y observó el cuerpo sin vida de su madre.
- La voy a matar- dijo en bajito mientras subía al autobús- Hasta que no la mate con mis propias manos no estaré en paz, hasta que no la haga ver lo que ha hecho no estaré a gusto...
- Jefa Wiile...- Abby estaba detrás suya, la pobre estaba casi llorando- ¿Qué está pasando aquí? Tengo miedo, no entiendo nada...
Calisto se acercó a la pequeña y la tocó la frente, la niña se alejó mirando con miedo a Calisto, estaba asustada.
-Abby...- Calisto soltó una lagrima- Siento lo que voy a hacer, es por tu bien...
Tocó de nuevo su frente y la niña se durmió profundamente, Calisto la puso en unos asientos y dirigió la mirada a los chicos:
- Si me vais a preguntar: no, no es la primera vez que hago eso. La he borrado la memoria, no quiero que sepa quien soy ni lo que hago. Solo he quitado los recuerdos de la última hora- dijo Calisto yendo al asiento del conductor- Despertará en unas horas, lo que tardaremos en llegar a el instituto. Así que si me vais a preguntar algo, que sea ahora.
- ¿La conocías?- dijo Kayla enfadada- ¿¡Conocías a la desgraciada que ha matado a mi madre?!
- Por desgracia sí- dijo en un tono calmado- Pero matarla no va a ayudar, sino yo viviría tranquilo, con la conciencia limpia...
- No te pongas de ejemplo- dijo enfadada- ¡Que a ti no te afectara lo de tu madre no significa que a otros no les pueda afectar!
- Calisto se quedó callado.
- ¿Crees que no me afectó?
- No muestras ningún signo de que sí- confrontó Kayla
- Otra pregunta por favor- dijo cambiando el tema para no discutir
-¿Porque los tres os podíais convertir en animales?- preguntó Jake
- Buena pregunta- Calisto arrancó el autobús- Me da para rato, ahora os explico:
Entre la gente con habilidades existe un pequeño grupo de cambia formas. Son seres humanos con la capacidad de convertirse en animales. Son un grupo bastante pequeño, ya que sus habilidades son muy difíciles de usar y requieren mucho entrenamiento.
Tienen la capacidad de transformarse en varios animales, pero al principio solo pueden transformarse en uno, suele ser el que mejor se adapta a ellos...
Yo soy un cambia formas, Maia también, hay una chica en la Space3...
Al oír el nombre de la asesina de su madre Kayla miró a otro lado, no quería oír mas de ella. Miró por la ventana y estaban en una carretera que pasaba por un bosque.
Kayla divisó unos fuegos, probablemente de unas hogueras, pero no era posible ya que estaba lloviendo mucho.
- Para el bus- dijo levantándose- Quedaos aquí, voy a salir.
- Kayla no...- Jake la intentó parar- Es peligroso...
Kayla no le hizo caso y salió corriendo hacia el fuego:
- Simón, no hagas ruido- Escuchó la voz de una chica, le sonaba mucho
- ¡Yo!- una voz de un chico sonó- Es Stella, que me está intentando quitar la comida...
- Es que nunca he probado la comida de fuera, está mas rica que la de las instalaciones- Una voz muy aguda se defendió
- Callaos- La voz de lavender se escuchó- He oído un vehículo, si hay alguien de la Space3 mejor que estemos callados...
Kayla se iba a acercar, pero una mano la tocó el hombro haciendo que se sobresaltara: Calisto
- No entres- dijo- Vamos al bus, déjales aquí.
- Pero- Kayla miró a lavender- Vale...
Volvieron al autobús, Jake preguntó que si había algo interesante, Kayla miró a Calisto y este negó.
- No- dijo Kayla- Había un gato blanco, nada mas...
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Hasta aquí este capitulo
Espero que os haya gustado y que esperéis mas capítulos
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Sayonara
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Diario de un apocalipsis
Ciencia FicciónKayla es una chica de 13 años, un día tranquilo en su instituto empieza a llover fuera, pero no es lo que parece.
