09

271 24 4
                                    

Heeseung estaba en frente del departamento de Kim Sunoo, tal vez esa noche lo podía tener.

Lo podía poseer, probar y castigar por todo lo que lo a hecho esperar.

Tocó la puerta, estaba desesperado, recibiendo un "voy" por parte de Sunoo, que abrió la puerta segundos después.

Sunoo estaba desconcertado del por que estaban tocando tan desesperadamente, así que fue rápido. Cuando abrió la puerta, se quedó congelado, viendo quien era.

— ¿Lee Heeseung — Sunoo suspiró — ¿Que haces aquí?

Heeseung lo empujó hacia adentro, y se quitó la chaqueta que traía, para dejarla en una mesita que estaba cercas.

— Vine a que me digas en mi cara, lo que hiciste perra — Heeseung se acercaba poco a poco — Por tu culpa me transfirieron a Busan.

— No te acerques Heeseung — Sunoo puso sus manos en señal de que no se acercara — Pero, ¿Como sabes mi dirección?

— Eso no te importa.

— Que te acostaste con una persona de Recursos Humanos y le sacaste la sopa.

— Si — Heeseung afirmó — A una mujer con buenos senos, que me da lo que tú no.

— Si no te doy lo que quieres, deja de seguirme rogando, agradece que no le llame a la policía, pero esto, ya supero los límites, si no quieres que te meta a la cárcel, mas vale que te vayas de mi casa.

Esa amenaza no funcionó, Heeseung se acercó y empezó a forcejear con Sunoo, le tomó las manos. Heeseung logro controlar a Sunoo, y empezó a besarlo, Sunoo batallaba para deshacerse del beso, sentía que no había escapatoria, era un beso muy forzado, solo Heeseung actuaba.

Heeseung dejó de besarlo, viendo la expresión de miedo y enojo por parte de Sunoo.

— Vamos a tu habitación bebé — Heeseung le sonrió perversamente.

— No iremos a ningún lado Lee Heeseung — Sunoo luchaba para deshacerse de él — Por favor, déjame en paz.

— No me importa, esta noche serás mío.

Heeseung otra vez se acercó, y Sunoo no podía defenderse, cerraba los ojos y sentía los labios de ese hombre junto con los suyos.

Heeseung bajo al cuello, succionaba y chupaba todo el cuello de ese lindo cuello.

— Por favor Heeseung, dejame idiota — Sunoo gritó.

Heeseung se acercó a su oído y empezó a lamer esa área, haciendo que Sunoo, se estremecería, de una manera extraña. Heeseung sonría perversamente, al poder tocar a Sunoo.

— Serás mío, Kim Sunoo — Heeseung le susurró — Vámonos juntos a Busan, no creo que seas solo una aventura, la verdad me obsesionas, quieras o no, serás mío.

— Heeseung dejame por favor — Sunoo dijo de una manera tranquila.

— ¿Dejarte? — Heeseung río — Eso jamás.

Empezó otra vez a lamer su cuello, y a succionar, Sunoo empezó a sentir excitación, no podía negar que Heeseung era bueno en lo que estaba haciendo, pero sentia culpa y asco, ¿Que era ese sentimiento?

— Lee Heeseung, Heeseung, no puedo — Sunoo empezó a gemir.

— Claro que puedes, a tu recámara.

— Heeseung, ya, por fa...

Heeseung no termino dejar de hablar a Sunoo, lo empezó a besar apasionadamente, era un besó forzado, pero de pronto Sunoo empezó a ceder poco a poco, empezó a hacer un beso más mutuo, los dos se besaban. Sunoo no pensaba, y rodeó sus brazos en los hombros de Heeseung, y este sonreía, ya consiguiendo lo que quería.

LUJURIA (HEESUN) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora