Capítulo 09

832 89 6
                                        

Tuvo que correr al baño para mojar su cara con agua helada.

No entendía nada. ¿Qué estaba pasando?

¿Cómo era que él no había terminado casado con Donghyuck? ¿Cómo era que Donghyuck lo había dejado por un hombre que estaba en ese momento casándose con el amor de su vida?

O al menos así lo declaró Mark ante todos cuando brindó por él.

Jaemin. El amor de su vida.

No pudo evitar notar que el corazón de Hyuck se desmoronó por completo.

Nada tenía sentido.

– ¿Una toalla? – ofreció un hombre junto a él.

Jeno la aceptó, pero antes de secar su rostro, lo miró perplejo, sintiendo de nuevo la piel de su nuca endurecerse.

Vestido como mesero, el monstruo que lo había llevado ahí le sonreía con cinismo.

– Con que aquí estás, bastardo mentiroso –

Taeyong abrió la boca, ofendido.

– ¿Perdón? –

– ¡Tú hiciste esto! – señaló alrededor – ¡esto no era parte del plan! ¡Yo debería estar casado con Donghyuck ahora! –

– El "plan" era darte la oportunidad de empezar de nuevo – se encogió de hombros – lo que pasó después fue la consecuencia de tus actos –

– ¡Pura mierda! – negó – ¿cómo es que Donghyuck dejándome por alguien que no lo ama es la consecuencia de mis actos? –

Taeyong se atrevió a burlarse en su cara.

– Sí que eres tonto – negó divertido – tú regresaste a cambiar el pasado. Y lo hiciste. Pero eso de ninguna manera garantizaba que él fuera a amarte – lo tomó de los hombros, girándolo al espejo.

De un momento a otro, su reflejo ya no estaba, y en su lugar se proyectaba la imagen de su amado mirando con anhelo a la pareja interactuar con todos sus invitados.

– Él intentó amarte, Jeno. De verdad lo intentó. Pero nunca pudo sacarse de la cabeza a Mark – suspiró – él era el verdadero amor de su vida. Y sabía que no podía hacerte perder el tiempo con él si no tenía planeado corresponder en ningún momento. Por eso te dejó – la imagen se desvaneció y su reflejo regresó, mostrando Taeyong sonriendo detrás de él – cuidó tu corazón. No era tu culpa que él no pudiera amarte como tú lo amas a él –

– No – susurró devastado – no puede ser cierto. Él... no es cierto –

– Anímate – lo golpeó amistosamente – la verdad es que eres muy feliz con Renjun –

Jeno lo miró con sorpresa.

– ¿Lo soy? –

– Lo eres – asintió – son la pareja perfecta. Claro, es un poco mandón, pero hay amor real entre ustedes –

El azabache no podía decir nada.

Pero... era verdad.

Todo lo que había sentido ese día, habían sido descargas de cariño hacia quien era su esposo ahora.

¿Qué tal que el verdadero amor de su vida nunca fue Donghyuck, sino Renjun?

¡Sí! ¡Tenía que ser eso!

De otra manera, ¿cómo era que había terminado con él en lugar de cualquier otro?

– Supongo que tienes razón – terminó por decir.

Back to youDonde viven las historias. Descúbrelo ahora