Capítulo 4

17 4 0
                                    

La pandemia que años atrás había acabado con la vida de miles de omegas, dejó estragos en la sociedad, que aún son palpables en el presente.

Se crearon medicamentos que salvaron la vida de algunos omegas, sin embargo, los sobrevivientes eran insuficientes para la cantidad de alfas en busca de un compañero; se desataron guerras entre países por la posesión de los omegas, las tasas de natalidad bajaron, ya que los betas machos no podían embarazar a las alfas, ni a los omegas, solo a las betas hembras, la concepción de cachorros de un o una alfa con una beta, era casi imposible, las betas, no soportaban los ciclos de calor de los alfas, las que lograban quedar vivas y embarazarse, en su mayoría, morían antes del parto o durante este, entre alfas se repelían por sus feromonas, complicando la atracción entre ellos, el mundo se dio cuenta de la importancia de los frágiles omegas. Todo esto trajo un descontrol social y una puerta para el mercado negro, que comenzó a traficar como mercancía valiosa, sumamente costosa y delicada, a cuanto omega podían secuestrar, por lo que muchos omegas eran separados de sus familias y hasta de sus países. Ser omega en ese tiempo era triste y peligroso.

Se comenzaron a emplear supresores de aroma, para mitigar el olor de las feromonas de los alfas y así poder lograr la reproducción entre ellos, también el uso de afrodisíacos, estos, los hacía entrar en celo sin necesidad de usar sus feromonas, lo anterior ayudó en parte del problema, pero no lo solucionó por completo, las alfas, aunque aguantan perfectamente el rut de sus parejas del mismo rasgo secundario, tenían el pequeño inconveniente de no poder llevar a término todos los embarazos, o bien morían en el parto, ya que sus cuerpos no estaban preparados al cien por ciento para gestar, no así como los omegas, cuyos cuerpos, a pesar de su vulnerabilidad, estaban capacitados perfectamente para soportar el rut, el nudo y dar a luz a los cachorros de sus respectivos alfas.

Las alfas que lograban llevar a término el embarazo y sobrevivir, solo se atrevían a dar a luz una única vez, por lo que muchas parejas tenían una familia pequeña de solo un cachorro. Estos podían nacer siendo alfas puros, alfas no dominantes, betas y en casos muy reducidos nacía un omega. No era un secreto que la mayoría de padres deseaban tener un hijo o hija omega, que asegurara la descendencia familiar.

El mercado negro seguía traficando con omegas, pero en menor cantidad, se habían creado leyes de protección al omega y las fronteras de los países se encontraban reforzadas para evitar la salida ilegal de alguno de ellos, se debía presentar el certificado de prueba de rasgos secundarios, en donde el gobierno dictaminaba y aseguraba el rasgo secundario de cada quien ya fuera alfa, beta u omega, estos últimos recibían un trato especial en fronteras y transportes públicos para garantizar su seguridad, y este certificado era requerido sin excepción en aeropuertos, fronteras terrestres y marítimas, la misma sociedad se estaba proponiendo recuperar a la población de estos hermosísimos y valiosos seres.

_________________________________________________________

Nataniel se encontraba realizando la fila de abordaje, cuando de pronto sintió una extraña sensación de ser observado, una brisa fuerte y una sombra que le tapó la luz de pronto, sobresaltado y confundido, se volteó disimuladamente hacia atrás, y casi cae sentado de la impresión al ver detrás suyo a un enorme alfa, de un metro con noventa y cinco centímetros aproximadamente, cabello negro, bien peinado, ojos grices, mandíbula fuerte, y eso no era lo único que tenía fuerte, bajo su mirada al pecho y brazos del desconocido y se quedó boquiabierto no pudo evitar bajar un poco más la mirada y al contemplar un prominente bulto en los pantalones del enorme y serio alfa, se volteo hacia adelante totalmente sonrojado, y pensado para sí mismo, - Por la diosa Luna, este tipo es realmente enorme y no me refiero a su estatura- se sonrojó más, si eso era posible, al descubrirse teniendo esos pensamientos-

- Bienvenido, buenas noches- escuchó una voz que lo saludaba en inglés, que lo hizo salir de sus pensamientos. – muéstreme por favor su pasaporte, boleto y certificado de prueba de rasgos secundarios, por favor-

La mujer que le saludó a la entrada de la manga del avión le sonrió mientras le desea buen viaje y le devolvía sus documentos personales. Nataniel procedió a abordar y se olvidó por completo del enorme hombre que tenía a sus espaldas, concentrado en buscar el número de su asiento, por lo que no escucho con la euforia con la que fue recibido el sujeto por la mujer de la entrada.

Ya dentro del avión Nataniel acomodó su equipaje de mano, y se sentó. En esta ocasión le tocó un asiento del lado del pasillo, por lo que se entristeció al saber, que en el viaje más largo, no podría disfrutar de la vista como en el vuelo anterior.

A uno de los sobrecargos lo sorprendió sentir una mano pesada sobre su brazo, por lo que volteó rápido a ver de quien se trataba.

- Joven Kim, es un placer tenerlo hoy viajando junto a nosotros- dijo el sorprendido beta, al dueño de esa mano que lo asustó.

- Necesito un favor-

- Claro lo que usted necesite, se lo traeré con todo gusto- interrumpió el sobrecargo.

- Bien, ¿puedes ver al joven del asiento 17-F?

- Claro señor, aunque quisiera no podría dejar de verlo, es muy apuesto, si me permite el atrevimiento.

- Pues no te lo permito- contestó en todo molesto el hombre.

- Lo siento por mi atrevimiento joven Kim, dígame por favor, que puedo hacer por usted, con respecto al joven del asiento 17-F –

- Tráelo aquí, siéntalo en el asiento junto al mío del otro lado del pasillo, en el 1-G-

-Señor, pero usted está en el área exclusiva, y el joven tiene boleto en el área económica, creo que eso sería imp- el alfa lo interrumpió.

- No volveré a pedírtelo, así que haz lo que te ordené, discretamente, si sabes a lo que me refiero. –

- Sí joven Kim, de inmediato – dio una reverencia y se alejó rápidamente con dirección a Nataniel.

Mi Adorado OmegaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora