𝐂ᴴᴬᴾᵀᴱᴿ ᵀᵂᴼ

218 26 19
                                    

— ¿Seguro que ese sí es Min Zael?

— ¿Es que no le estás viendo el culo?

— Yo sí.

Tanto Koa como JungHyung voltearon a ver a uno de sus hombres, el mismo que había estado soltando baba por Min Zael, porque tener la oportunidad de verlo tan de cerca debería ser catalogado como un reverendo honor. Esa fierita podía tener un carácter de mierda, podía ser todo un caprichoso y un consentido, pero nadie podía negar que era una tremenda obra de arte y aunque no lo dijeran en voz alta para evitar morir, tenía un buen culo y unas piernas de infarto.

— Ya veo por qué tiene tan loco al jefe.

— El mismo jefe que te cortará la verga si sigues viendo a ese tipo.

Koa le dio in golpe con la punta de la pistola, después lo empujó para que se quitara del maldito camino, porque estando todo el grupo apelotonado harían que Min Zael se diera cuenta de que lo estaban siguiendo, aunque era muy extraño de que no se haya dado cuenta todavía. Ese no era el caso, el caso era que estaba entrando a una calle no tan transitada, pero ninguno ahí tenía el tiempo de preguntarse eso cuando debían raptarlo para llevárselo al jefe.

— Bueno, debemos admitir que Gang tiene buenos gustos, desde mujeres hermosas hasta hombres calientes.

JungHyung asintió, más tarde le hizo una seña a Koa para que se pusiera en su puesto ahora que se estaban acercando a Min Zael. Entonces el resto de hombres tomaron las indicaciones que se les fueron dadas y habían sido los primeros en ir detrás de ese tipo para ver si sería difícil y complicado de agarrarlo, así como las veinte veces atrás de esa semana.

— Pero qué... ¿de dónde sacó las armas?

Koa puso el brazo sobre el abdomen de JungHyung, indicándole así que dejara de caminar y evitaran acercarse cuando Min Zael sacó un par de armas, tal vez del abrigo, y comenzaba a disparar a lo desgraciado, a cada hombre que había intentado agarrarlo cual ratón. Por el bien de los dos tomaron la buena decisión de retroceder mientras veían cómo sus hombres ahora estaban siendo el saco de boxeo de esa fiera, porque es que él sabía defenderse muy bien y por eso se estaba agarrando, por el momento, con tres al mismo tiempo.

— Es muy agresivo... con razón le encanta a YajaTzael-Hyung.

— Es que dijo que por fin encontró a alguien que logre dominarlo.

— ¿Qué hacemos ahora? Huir siempre es una buena opción.

JungHyung, en efecto, se dio la vuelta con toda la sana intención de retirarse para salir vivo de esa masacre, pero Koa lo agarró de la camisa y sin decir nada lo jaló para que se quedara nuevamente en su sitio. No podían irse de ahí si no era con Min Zael, ya que habían fallado muchas veces y hacerlo una vez más era despertar a la bestia interna que Gang tenía.

— Gang quiere a esa fiera y a esa fiera le vamos a llevar, así que agárrate los huevos y vamos por ese tipo — Koa exigió — Un fallo más y tanto tú como yo vamos a comer tierra cuando Gang nos entierre vivo. ¿Me entendiste, Lee?

— Entendido.

— Bien.

Los dos habían estado hablando entre ellos, murmurando juntitos para que nadie escuchara nada, olvidándose por completo que Zael estaba haciendo añicos a todos sus hombres, tomándolos como muñecos de trapos o cartón de práctica de balas. Cuando entonces tomaron la decisión de acercarse a esa fiera para llevársela por las malas, esa misma fiera ya estaba frente a los dos, apuntándolos con un par de armas y viéndolos con una mirada seria, enojada, furiosa.

Ambos dos entonces no tuvieron más opción que alzar las manos cual criminal frente a policía y ver de fondo cómo sus hombres estaban bajo un charco de sangre, absolutamente todos sus hombres. Ahora se preguntaban en silencio cómo ese tipo podía siquiera matar a tanta gente en menos de cinco minutos, pero por alguna extraña razón, no querían saber la respuesta.

𝐈ᴺᴴᵁᴹᴬᴺ. (ᴛʀɪʟʟɪᴢᴏs ᴘᴀʀᴋ x ʏᴏᴏɴɢɪ)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora