Capítulo 6

98 15 6
                                    

Lituania
Actualidad

La mayoría quedo muerto y está claro que no quise ser uno de ellos. Los pocos que quedamos decidimos volver. Solo deje uno en la escena y sin que nadie lo viera. Al poco tiempo llegaron varios guardias a rodear la zona y alcanzó a escapar muy apenas.

Maldita sea, no predije que pasaría esto. Que esa mocosa esté con ese ángel cambia demasiado la ecuación. Si le brinda protección no podremos hacer absolutamente nada y tendremos que desatar una guerra para poder obtenerla.

Si tan solo la hubiese encontrado antes, si aquel año no se hubiese escapado de aquel pueblo infernal ahorita estaría aquí.

Mentiré si no digo que me fascina la idea de traerla aquí. Los rumores de su antiguo hogar decían que sus alas son la amas hermosas que hayan visto y enormes por no dejarlas de lado.

Entre ellos comentaron que eso es sinónimo de gran magia, un poder inigualable y lo quiero para todos nosotros.

Nuestra jefa ansia con esa gran magia. No nos detendremos, yo no lo dejaré de lado. Atrapare a esa mocosa.

Revise lo mejor que pude mi brazo, tardará en sanar pero lo hará. Por alguna razón al ser inmortal esa magia del ángel evita que pueda sanar con mayor facilidad. Una razón más para mantenernos alejados de ella.

Investigamos el tema hace años cundo apareció por primera vez. Hubo peleas entre varios y todos murieron a excepción de ella, sino honesto ya no se ni que pensar. Pero de algo estoy muy seguro.

Si magia nos puede servir demasiado. Tal vez los planes cambien un poco.

Camine por los pasillos de esa enorme construcción, medio mansión castillo.

—Llegue mi señora—me arrodillé. Observe como está sentada en su silla tomando una copa de probablemente vino rosa ya que se ve de ese color.

—Con las manos vacías otra vez— dijo molesta. Debo reconocerlo, es muy hermosa y cuando la conocí ya llevaba muchos años haciendo lo que hace. —estoy empezando a creer que debo hacer el trabajo yo misma.

—La teníamos, a ella y a los mocosos pero no conté con lo que me encontraría—Comencé a explicar y como ella dice. A dar excusas—estaba acompañada por una joven, con gran poder.

—¿Y no pudiste con dos niñas y dos bebés? — Pregunto irónica—dudo mucho de tu lealtad y determinación. No sé de qué otra forma comentarte que quiero a esa hada.

—Estaba con el ángel que apareció en Londres, no la vi venir, mato a la mayoría de mis hombres—me apresure a decir.

No dijo nada, simplemente se quedó viéndome.

—Entonces para la otra también tráela, tal vez si magia sirva de algo. Está es tu última oportunidad, tengas que matar a quien sea. Quiero a esa hada— se terminó su copa de vino.—Al igual que a su bastarda. No nos ha dejado ver qué tipo de magia tiene o alas pero cabe la posibilidad de que sea la misma. Las quiero y no hay excusas. ¿Entendido?

Asentí y me retire. ¿Cómo mierda voy a traerlas? Si ahora esas dos están juntas será muy difícil. Aparte de que esta serca de los límites de la manada. Todo el mundo sabe lo protegida que está. Maldición.

Scarlet

Jamás había dormido tan a gusto como en esta ocasión, moví los brazos estirándome un poco. Y a vez que toque al costado no sentí a Sunny
Abrí bien los ojos espantada, no está. ¿Y Malec?

Retire la cortinas y vi que es de día otra vez, ¿qué hora es? Dormí toda la noche.

Respire y trate de relajarme, no puedo sentir pánico. De seguro están bien. Camine al baño, closet y nada. Ok es momento de sentir pánico.

ScarletDonde viven las historias. Descúbrelo ahora