Bajo la luz de la Luna I: Ascensión

Capitulo 23 - Héroes Caídos

Pasaron algunos días desde aquel incidente.
Aún estamos reparando los daños, fueron quemadas varias casas durante la pelea, afortunadamente nadie salió herido.
Cuando llegaron los demás realmente quedaron sorprendidos por el caos.
Recuerdo que les dije "Solo fué un pequeño inconveniente", aún así todos se veían muy cansados, se esforzaron mucho para proteger a los demás y darme apoyo ¿Acaso existen vasallos mejores que ellos?
Quizás pareció una pelea fácil, pero en realidad habría preferido enfrentar 200 lizardmens otra vez.
Una vez que el cuerpo de aquel monstruos calló al suelo se puso rígido como piedra.
Solo fue un toque y se desmoronó como si fuera polvo.
De su interior salió este...

“¿Cómo está el niño? ¿Aún no despierta?”

Eso dijo Aria al entrar en la tienda.
Ella ha estado realmente preocupada por él en estos días... O eso creo.

“No, es increíble que halla dormido por tres días ya me empieza a preocupar que no despierte.”

“Bueno, usted durmió por cinco días.”

En eso tiene razón, pero yo no lo llamaría dormir más bien recuperación de energía mágica pos-evolución.
En cualquier caso espero que él despierte pronto.

“Amo ¿Qué hará si él nos vuelve a atacar?”

“Si eso pasa tomaré toda la responsabilidad, haré lo que sea necesario.”

Dudo que nos ataque de nuevo.
Desde que perdió aquella forma ya no tiene esa maldición y su energía mágica se volvió más pura y limpia.
Mis ojos ya pueden ver claramente sus estadísticas.
Resultó ser un niño humano, pero es un niño maldito, así se llama su especie.
No se mucho sobre los niños malditos, el ojo tampoco y ni siquiera Susek sabe algo de ellos.
Siento que estoy junto a una de las criaturas más raras del mundo.

“Y... Si me permite ¿Por qué prefirió salvarlo? Era más fácil matarlo, nos habría ahorrado daños.”

“Simplemente fue un capricho.”

“Entiendo.”

A veces creo que solo me dicen lo que quiero oír.
Me gustaría que fueran más como Susek y Gobeg, ellos me cuestionan y hasta me regañan algunas veces.
No es que me guste que me cuestionen o regañen, pero cuando solo te dan la razón no hay oportunidad para reflexionar.

“En realidad, sería algo más complicado.
Seguro recuerdas a aquel niño humano que encontramos cuando íbamos hacia Bano-Ren, por mi estúpido error el murió... no fue la primera vez.”

“¿A qué se refiere?”

“Es difícil hablar de esto. Cuando aún estaba vivo tenía un hermano menor. Él nunca dejaba de sonreír por muy triste que estuviera, él nunca dejaba de sonreír.
A su lado yo me veía como un demonio y él era un pequeño angelito que iluminaba a todos a su alrededor. Apenas tenía seis años y todos lo amaban.
Era mi responsabilidad protegerlo, pero... un día deje de verlo por un segundo, él desapareció, lo intente buscar en todas partes pedí ayuda a la policía, puse cárteles, incluso lo puse en internet... no lo encontré y... Tres días después lo encontraron muerto, fue un asesinato. Murió por mi culpa.
Era mi deber protegerlo, yo era su hermano mayor, y fallé, ni siquiera pude vengar su muerte.
Aquel niño era como mi hermano, nunca dejó de sonreír y tampoco lo pude proteger. Solo quería salvarlo para sentirme bien conmigo mismo, sé que suena egoísta, pero ya eso no importa ese asunto está resultó.
Este niño me pidió ayuda, pude sentir que sufría y tenía que intentar salvarlo...
Incluso esta forma que tengo ahora, creo que es mi penitencia, el cuerpo de un niño en la forma de un fantasma, me resulta imposible pensar otra cosa.”

Ella se lanzó para abrazarme.
¿Por qué se siente tan cálido?

“No fue su culpa, hizo todo lo posible, su hermano debe estar muy agradecido.”