Capítulo 46

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CASPIAN

Te tengo noticias —veo a madre de pié con una de sus rosas negras en la mano derecha.

—¿Así? —me mira —.¿Qué noticias hijo?

—Conocí a la novia de Silas, a esa humana.

—¿Enserio? ¿Y qué tal?

—De cerca esa chica es como una diosa, ahora veo por que a mí amadicimo primo le gusta.

—Por favor Sila, no vayas a decirme qué te quedaste enamorado de ella también —se pone enfrente mío -. Esto mi vida, no es Crepúsculo o una de esas tontas series que los humanos han creado sobre vampiros para qué tú también te enamores de la misma humana y se desate un drama romántico.

—Por dios, ¿Cómo puedes decir eso? Yo no tengo sentimientos ¿Lo olvidas?

—Eso espero.

—Cuándo miré a la chica pude notar en sus ojos que sabía de mí ya que me miraba  seria.

—Entonces Silas ya le dijo sobre nosotros.

—Puede sospechar.

—Bueno en tal caso no importa no nos es inclusive.

—¿Qué haces con esa rosa negra?

—Planeo usarla naturalmente.

—¿Para?

—Para el celebrará el festival de la luna de sangre ¿Has olvidado qué tus primos nunca se pierden el evento? Y como yo he estado muy aburrida últimamente, planeo divertirme dándole a los humanos un festival que nunca olvidarán claro en lo que la verdadera diversión empieza. Mandaré unos de mis vampiros mejorados para allá.

—Muy bien.

—Pobres hermanos Tepes —ella observa la rosa negra —.No saben lo que les espera en ese festival, en ves de festival de la luna de sangre será el festival de la muerte.

La veo sonreír.

Me mira.

—El vampiro provocará demasiado caos, tanto que llegara a oídos del consejo de Transilvania. En cuánto se enteren de que su tan amada familia real no pudo controlar la situación pensaran que se han vuelto unos completos inútiles. Así cómo Silas —ella vuelve a poner su atención en la rosa negra —. Silas...—se queda pensando unos segundos —¿Sabes hijo? Se me acaba de ocurrir una magnífica idea, una que sin duda golpeara a Silas fuertemente para luego darle el golpe de gracia.

—¿Oh si? ¿Y de qué se trata?

—En primer lugar olvídate de lo que te dije hace un momento sobre el drama amoroso.

—¿Qué? —la miro confundido.

—Tienes una nueva misión y quiero que la cumplas sin importar absolutamente nada.

—Sabes que lo haré madre ¿De qué se trata?

—Quiero que aproveches tus múltiples encantos...—se me acerca —. Y enamores perdidamente a esa humana —se coloca delante de mi —No te será difícil hacerlo.

¿De verdad dijo qué yo enamorara a la humana?

¿Qué diablos está pasando por su cabeza?

—¿E-enamorar a la humana?

—Tal cómo lo oyes, me imagino que en estos Silas es sumamente feliz por ella. Entonces quiero quitarle esa felicidad.

—Madre ya te lo dije, no confía en mi.

—Entonces harás que confíe, hazle creer que todo lo que los hermanos Tepes le dijeron muy seguramente de nosotros no es más que una vil mentira —me dice —. Esa chica caerá completamente ante ti fácilmente, eres guapo, inteligente y superior a Silas. Se enamorara de ti enseguida, tan solo gana la confianza de la humana.

—¿Crees qué será fácil?

—Con mi ayuda claro que si.

—Madre...

—Quiero que lo hagas Caspian, sin errores —suena seria —.¿Has entendido bien hijo?

Enamorar a la humana, demonios.

¿Qué parte de qué no tengo sentimientos no ha quedado completamente claro?

Yo no soy para el amor, yo no nací para ello.

Mi naturaleza es malvada, no romántica.

Yo no quiero ser igual al tonto de Silas.

—¿Te ha quedado claro hijo? —madre cruza sus brazos.

—Si...—digo —. A quedado muy claro madre.

—Bien...—sonríe de nuevo.

—¿Y Silas? Él no dejará que eso pase.

—La coronación del príncipe heredero es pasado mañana, él no tendrá tiempo para su humana después de que sea el rey. Entonces vamos a aprovechar ese tiempo para realizar acabo el enamoramiento. Y si por alguna razón el futuro rey estorba en esto... lo sacaré del juego.

—¿Cómo piensas hacer eso? ¿Vas a matarlo?

—Ay cariño... hay mejores formas que la muerte para destruir a los enemigos. Toda la familia real de vampiros de Transilvania tiene sus secretos pero... ¿Has olvidado cuál es el de Silas?

—No... no lo he olvidado.

Mamá mira la rosa negra.

—Y está pequeña... nos ayudará con eso.

Definitivamente es mala, me gusta.

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