Príncipe Vampiro

Capítulo 67

VERONICA

Hoy es el día más esperado para todos.

Hoy me convierto en la esposa de Silas Tepes, finalmente después de mucha espera y preparativos el momento ha llegado.

Estoy bastante nerviosa siendo honesta.

La celebración se va a llevar acabo en el inmenso castillo de Bran, será una fiesta muy personal. Nada más la familia estará.

Me encuentro en una de las muchas habitaciones del palacio terminando de arreglarme para le gran día.

Escucho cómo la puerta se abre, doy vuelta y me encuentro cara a cara con el primo de los hermanos Tepes.

—Vaya... si que cambiaste, te ves decente.

—Que gracioso eres.

—Humana lo digo enserio, te ves bien.

—Pues gracias Caspian.

—De nada —me dice —. Yo... he venido a hablar contigo.

—¿Sobre qué?

—Yo quería ofrecerte una disculpa por todo lo que hice en tu contra y en la de Silas. Quiero que comencemos de nuevo los tres.

—Caspian eso es pasado ya, has arreglado las cosas al abrir los ojos a la verdad. Mejor ya no pienses en eso que no tengo absolutamente nada que perdonarte y estoy completamente segura de que Silas tampoco. Tú no eras el malo realmente, era tu madre. Ella únicamente te estaba usando.

—Gracias por entender Veronica.

—No hay de que, suelta el pasado. Y céntrate en el futuro, tal vez en mi mamá.

—¿Qué?

—Oh por favor... a simple vista se nota que aún te gusta mi mamá. La forma en la que la miras te delata, tal vez los dos deberían de comenzar de nuevo. Darse una segunda oportunidad para una relación.

—¿Y a ti no te molestaría eso?

—Mi madre tiene derecho a ser feliz, por años nada más se dedicó a mi. Quiero que ella sea feliz, que tenga una historia linda con alguien. Se lo merece después de todo y tú eres el indicado para eso —le digo al vampiro y esté muestra una sonrisa —. Solamente una cosa... no lastimes a mamá.

—Descuida, no lo haré.

—Bien.

—¿Hablando de mi? —mi madre entra en la habitación también, ella viste un hermoso vestido color rojo el cuál le hace lucir demasiado bien.

—No, únicamente estábamos arreglando asuntos pendientes —le respondo.

Caspian mira a mi mamá y ella le da una calida sonrisa. Ambos se siguen llamando, al igual que pasa entre Silas y yo. Ellos estaban destinados, si no fuera así no se hubieran vuelto a encontrar nunca más.

Merecen tener una segunda oportunidad.

Una en dónde Valeska ya no sea una molestia.

—Cariño, te ves muy linda —dice mamá.

—¿De verdad?

—Si...—se me acerca y toma mis manos —. Hoy te casas, hoy no puedo creer que mi pequeña ya sea una mujer hecha y derecha. Estoy realmente emocionada por ti...—sus ojos se llenan de lágrimas —Te quiero mucho Veronica, eres mi tesoro más grande.

—Muchas gracias mamá, también te quiero demasiado.

La abrazo y ella me corresponde.

Segundos después nos dejamos de abrazar y veo entrar también a la señora Katrina y a la Gran Anciana.