Eyes don't lie ✔

01

Respiro profundo, cada ve me siento más tonta al estar leyendo sin entender nada, llevo un cuarto de libro leído y no soy capaz de comprender ni una sola frase.

Me paso las manos por el cabello, apoyando mis codos en la mesa.

Dejo de leer, apoyando mi espalda en la silla y dejando el libro abierto en la mesa, agarro mi teléfono viendo el mensaje que me ha dejado Blas, mi mejor amigo. Le respondo que no puedo ir a cenar por estar estudiando y él se me burla, diciendo que es una pena pues, los chicos se habían unido al plan.

Suspirando, dejo el móvil en mi bolsillo, levantándome de la silla para ir a la gran estantería de libros. Empiezo a buscar uno que me dijo mi profesora, según ella si el que tenía mo me ayudaba esté si lo haría.

Paso mis dedos por los libros, buscando el título del mencionado, desde el primer estante hasta el sexto, el cual ya no llego a tocar por la altura. Bueno, el que busco se encuentra en el noveno estante.

Es domingo debería estar con Blas y los chicos...

Bufo, enfadandome conmigo misma, esto me pasa por no estudiar antes y dejar todo para el último día.

Intento alcanzar el libro, estirándome, no llego. Empiezo a saltar pero parece una jodida misión imposible, ¿qué es esto? ¿La mierda biblioteca de La Bella y la Bestia? ¿Por qué harían muebles tan alto si no van a poner una jodida escalera al lado?

Seguro que se están yendo a comer un McDonald's...

Intento dejar mis pensamientos a un lado y miro a mis lados, no hay nadie a la que pueda pedir ayuda porque, claro, ¿quien jodidas estaría en una maldita biblioteca un domingo por la tarde? La única boluda soy yo, claramente.

Observo el libro desde mi sitio, tan cerca y tan lejos a la vez... ¿Esto es mi señal para irme a cenar con mis amigos?

Estoy a punto de darme por vencida cuando siento a alguien detrás de mí, su pecho choca con mi espalda y puedo sentir el golpe de su respiración caliente en mi costado, veo como agarra el libro así que, me giro sobre mis pies, encarando a la persona.

Nos quedemos mirando por unos segundos el uno al otro, era un tipo rubio con el cabello mal peinado, sus ojos marrones me observan con una chispa brillante, tiene pecas por el rostro y una barba mal distribuida, y labios finos y rosados.

Una tensión comienza a formarse poco a poco, en donde siento mi piel calentarse al igual que el ambiente, trago saliva.

¿Es normal que sienta un calor creciente en mi estómago bajo?

Claro que no, estúpida.

Él mueve su mano, la cual sujeta el libro:— ¿Es el que querías? —cuestiona, su voz siendo casi un murmuro, asiento con la cabeza, parpadeando un par de veces.

Parezco una pelotuda.

—Ese es, sí. —afirmo, por si no ha quedado claro, me lo entrega y yo lo agarro entre mis manos— Gracias. —agradezco y me da una sonrisa que me hace sentir cosas.

¿El ambiente se siente muy pesado o solo soy yo?

—No es nada, bonita. —responde.

Doy por terminada la conversación, así que le doy una sonrisa y huyo de ahí, me siento en la silla que estaba antes, dejando el libro en la mesa y sintiendo mi respiración más rápido de lo normal.

¿Eso era jodida tensión sexual?

Lo veo venir hacía la mesa, lleva un libro en mano y lo va mirando mientras se acerca, se sienta en la misma mesa sólo que más a la derecha.

Lo observo unos segundos sintiéndome con ganas de algo que ni yo me atrevo a decir. Pongo mi atención en el libro, dejando de mirar al desconocido que me hecho sentir cositas.

Me recojo el cabello mientras empiezo a leer, aún que siga sin enterarme de lo que leo pues, mi atención está en el tipo extraño a mi derecha. Cuando termino de hacerme la coleta decido mirarlo de vuelta, a sabiendas que él ya me estaba mirando primero. Mi corazón bombea con fuerza al hacer contacto visual con él, y siento mi entrepierna mojarse con tan sólo su mirada.

Pierdo la batalla, apartando mi mirada de la suya. Agarro mi teléfono, entrando al chat de Blas y le empiezo a escribir.

Hay un pibe aquí que me acaba de calentar con nada.

Se lo envío y me alivio al ver que al segundo me empieza a escribir.

Pipe leyó tu mensaje, dice que sos una calenturienta.

Ruedo los ojos con diversión, Pipe siempre está mirando los chats de metiche.

Pero bueno, ¿tensión sexual con un boludo en una biblioteca? Yo también quiero.

No puedo evitar dar una pequeña mirada al tipo. Parece mayor.

Creo que tiene más de veinticinco años.

¿Qué jodidas hago? No puedo concentrarme y ni modo que me lleve el libro.

Chapatelo

Mis mejillas se calientan al instante en el que leo el mensaje, siento mi cara arder y no me atrevo a levantar la mirada.

Atrevido.

Eres tú la que está cachonda por un tipo que no conoce, pelotuda.

¿Querés que le diga a tu mamá que fumas?

¿Qué tiene que ver eso, Bella?

No me jodas... Bueno, supongo que no pasará nada si me lío con un desconocido en una biblioteca.

Disfrútalo.

Guardo mi teléfono sin seguir con la conversación de Blas, y mi vista se va hacía el tipo que lee un libro, cuando siente mi mirada y me mira le doy una pequeña sonrisa.

Son cinco minutos los que pasan antes de que los dos entremos en el lavabo de la biblioteca.

Hoola!!

Os cuento que a partir de este capítulo traeré uno nuevo cada día.

Espero que os haya gustado,

Love, M 🧡