BUSCÁNDOTE [KOOKMIN - OMEGAVERSE]

[𝐂𝐀𝐏𝐈𝐓𝐔𝐋𝐎 𝟏𝟖]

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CAPÍTULO 18
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—J-jimin... J-jimin.

Bajos y lastimeros susurros salían de la boca del alfa quien se encontraba en una habitación de hospital con un suero conectado a su vena.

Soyeon sostenía la mano casi huesuda de su hermano mientras que su padre cancelaba todos sus planes del día solo para cuidar de su hijo.

La noche anterior después de todo lo ocurrido con Jihoon aka Jimin pensó que todo estaría más calmado y que no debería preocuparse por ninguna otra cosa más.

¡Pero se equivocó!

Después de dejar a Jimin dormido en su cama y sin ningún síntoma de enfermedad, la omega planeo esa noche descansar y volver a visitar al recién revivido el día siguiente pero cuando Seokjin y ella se encontraban de camino a casa su teléfono vibró un millón de veces por los mensajes, audios y llamadas de su familia.

—Trajimos a Jungkook al hospital. Lo encontraron inconsciente en el suelo de su oficina.

Las palabras preocupadas de su padre cavaron un agujero profundo lleno de preocupación en su pecho.

La omega exigió a Seokjin que la llevará al estación de trenes y fue ahí donde tomó el último de la noche que iba rumbo a Busan.
Estaba demás decir que no durmió nada en toda la noche pues no espero ver a Jungkook en ese estado tan deplorable.

Debajo de sus ojos las ojeras se marcaban de manera macabra y sus pómulos resaltaban aun más por la delgadez en sus mejillas.
Los huesos de sus clavícula resaltaba de sobre manera haciendo pensar en lo gravemente enfermo que se encontraba el alfa.

—Es su lobo... al tener problemas con la parte animal su cuerpo se adaptó a la condiciones en la que se encuentra su alfa.
—Al parecer el lobo está enfermo y deprimido, todo esto llevó a que utilizará una gran fuerza de voluntad o haya encontrado la situación necesaria para hacer notar su estado y manifestarse en todo el cuerpo del joven Jeon.

Fueron las explicaciones del doctor que estaba a cargo de su hermano.
Pero la culpa carcomía cada una de sus entrañas al escuchar los susurros que salían de la boca de su hermano.

—P-perdón... pero no es el momento. Solo espera un poco más. —
Soyeon le pidió entre pensamientos mientras apretaba suavemente la mano contraria.

Soyeon por más que quisiera ayudar, decirle y arrastrarlo hasta Jimin; simplemente no podía.
No podía acelerar el tiempo y llegar al momento en donde ambos se encuentren, no podía obligar a quienes estaban sufriendo por más que le gustase.

Jimin aún tenia muchas cosas por descubrir pero sabía muy bien que en esos planes aún no estaba el encontrarse con Jungkook.
Aunque sabía quién era, su memoria se encontraba confundida y llena de cosas por arreglar. Era mejor que todo fuera lento y preciso.

Al fin y al cabo, él volvió de la muerte.

A demás no sabía con exactitud cómo reaccionaría Jimin al saber que tiene un predestinado y que ese era su hermano; tampoco sabía que es lo que haría Jungkook si supiera qué Jimin se encontraba vivo y a unos kilómetros de él.

Aunque quisiera ayudar, entendía que no hacer nada y tener paciencia era la única ayuda que podía ofrecerles a ambos.

Sobre todo cuando escucho la petición de Jimin la noche anterior

—¿Puedo pedirles un favor? —Jimin dijo mirándolos de frente aunque sus manos temblaban por los nervios. Seokjin y Soyeon solo asintieron. — No le digan a nadie lo que pasó hoy.