Mommy Issues [Ran, Rindou. H]

Capitulo 3

El momento llego...

›Rindou‹

Eran cerca de las una de la mañana, no podía dormir, nuestros padres no estaban y seguramente Ran dormía plenamente en su habitación.

El insomnio fue demasiado que me levanté para ir al cuarto de Ran, pero al abrir la puerta lo encontré sentado en su cama con el teléfono a mano y su lámpara prendida, al voltear ví que tenía los ojos bien abiertos y la cara pálida.

— hermano ¿Que sucedió?

Me acerque mientras el cortaba el llamado, estaba tan pálido que no pude evitar tocar su rostro el cual si bien no está frío estaba bastante bajo de lo que debería ser tibio.

— Shinichiro murió...

— ¿Q-qué dices?

— un niño le pegó con una llave y murió al instante...

— ¿Un niño?

— si...

— hay que ir a ver a Yuka, la pobre no debe estar bien, recuerda que está embarazada!

No espere respuesta y fui rápidamente a mi habitación para colocarme ropa cómoda y abrigadora para salir de la casa e ir por mi motocicleta. Sabía perfectamente dónde quedaba la tienda de motos de Shinichiro, varias veces fuimos a acompañar a Yuka hasta ese lugar y ahí mismo pedí una leve reparación que el mismo Shinichiro Sano hizo.

Llegando al lugar aún habían varias personas, mientras tanto a lo lejos se escuchaba como los autos de patrullas se alejaban.

Me acerque a la poca multitud y ví como Yuka estaba parada viendo como una ambulancia se alejaba del lugar.

Me encaminé dónde se encontraba Yuka, la llame, pero estaba completamente ida acariciando su abdomen y varias lágrimas caían por sus pálidas mejillas.

— R-rindou...

Apenas sus ojos castaños voltearon a verme su cuerpo reaccionó a abrazarme y llorar más fuerte, me di cuenta que solo traía un vestido y un chaleco de lana que sus leves orificios dejaban ver su piel. Me quite la chaqueta y se la coloqué mientras trataba de calmarla.

— Yuka, trata de calmarte y no llorar tan fuerte por favor

— como quieres que me calme!

Me habló fuerte mirándome fijamente mientras sus orbes castaños seguían llorando.

— ¿Qué haré? ¿Cómo voy a seguir viviendo? Ya no tengo razón para vivir Rindou... Mi única familia murió!

— ey, ey, ey... Yuka

Tome sus mejillas delicadamente y quite las lágrimas que iban cayendo, aunque eso no significará que iba a parar de llorar lo intente, bese su frente y la mire.

— aún tienes familia, tu razón para seguir viviendo es esa cosita que está en tu vientre, esa bebé aún tiene a su abuelo y sus tres tíos

Baje una mano a su abdomen y lo acaricie suavemente sintiendo una pequeña patada.

— nos tienes a nosotros, a Ran... A mí... Estando nosotros no te faltará nada a ti ni a tu bebé

— ay Rin...

Volví a abrazarla, al poco rato llego Ran quien también se sumó al abrazo y me dió otra chaqueta, al igual que yo Ran trato de calmarla un poco, él pensó mejor las cosas y llegó en auto para llevar a Yuka.

Pedimos permiso al abuelo Sano de quedarnos con Yuka en su casa, dándole nuestro sentido pésame tanto al señor ya adulto mayor como a ambos niños.

Mire unos segundos a la niña llamada Emma, era muy bonita, pero de inmediato note como Ran me miraba de mala forma.

Esperamos fuera de la habitación que compartía con Shinichiro para que se cambie de ropa y tratara de descansar.
Entramos a la habitación la cuál era de buen tamaño, habían un mural lleno de fotos, imágenes de las ecografias de la bebé, citas que ellos solían tener, otra dónde salían ellos junto a un chico moreno de ojos violetas y cabello albino.

— no entiendo cómo pudo pasar esto...

— la muerte siempre llegará, tarde o muy temprano...

Hablo Ran posando la cabeza de Yuka en su pecho, mientras yo sostenía de su mano y miraba las fotografías.

— teníamos tantos planes y todo se fue a la mierda en segundos...

— ¿Qué pasará con la tienda, las motos y todo eso?

Pregunté acariciando su abdomen que no dejaba de patear y se notaba en el rostro de Yuka que le dolía.

— no lo sé... Quedará abandonado, Shin y yo no estábamos casados, tampoco tenía algún seguro o herencia, lo que ganaba de la tienda irá directo al dojo...

— ¿Te duele mucho? Desde hace un buen rato no deja de patear

Le pregunté preocupado por el rostro que ponía con cada patada. Ran al notar lo mismo también acerco su mano.

— un poco, solía ponerse bien inquieta cuando sentía al niño que mató a su padre...s

Suspiro y volvio a soltar una que otra lágrima.rv

— Shin solía tranquilizarla cuando estaba así...

No pude quitar la mirada triste del vientre de Yuka, está niña había quedado huérfana de un padre, pero al menos tiene una hermosa y gran madre.

Cuando era pequeño solía ver a Yuka como mi madre al igual que Ran quien veía como un padre, al ser niño me hubiera gustado que Ran y Yuka sean pareja y así podía ver a ambos como una gran familia, pero esa mentalidad desapareció al tomar los años en dónde Yuka empezó a atraerme y dejé de verla como una madre.