Freyja

Capítulo 29: Sombras.

"¿Sería lo mismo que antes, si te viera en el cielo?
Debo ser fuerte y seguir adelante, porque sé que no pertenezco aquí en el cielo.
¿Tomarías mi mano si nos encontramos en el cielo?
¿Me ayudarías a levantarme si te viera en el cielo?
Encontré mi camino a través de la noche y el día.
El tiempo puede derribarte, puede doblar tus rodillas. El tiempo puede romper tu corazón y tenerte implorando piedad.
Detrás de la puerta, hay paz, estoy segura y sé que no habrán más lagrimas en el cielo."

__________________🌗_________________

Jessica.

Siento los brazos de Frey alrededor de mi cuerpo.
Loki también se acuesta conmigo; yo le doy pequeñas caricias mientras ronronea. Con todo lo que pasó, no pudimos prestarle demasiada atención, pero Jane lo estuvo cuidando muy bien.

- ¿Con que... sobreviviste a los guardias?

- Ah, sí... solo unos rasguños, nada de que preocuparse...

- Veo que no tienes el parche... - Ella parece un poco avergonzada.

- Eh... sí, bueno, lo perdí... aunque debo de tener otro por ahí... me siento como desnuda sin el... - Me contesta, soltando una risa nerviosa.

- Yo creo que te ves mejor así... tu ojo es hermoso, me hipnotiza.

- Hipnotizante... puede ser... pero eso no es importante, ¿tu estás... bien? ¿Necesitas algo?

No le contesto, no tengo ganas de hablar. No tengo ganas de nada.

El recuerdo de Dean cayendo y... sangrando aparece en mi mente otra vez. Lágrimas amenazan por salir; decido controlarme y, en cambio, suelto un pequeño suspiro.

- Jess... todo estará bien, te entiendo.

- No. No hagas esto.

- ¿Qué cosa?

- Verme con lástima. Y no me digas que me entiendes o que sabes que me pasa, no me preguntes un porqué e intentes responderlo tú, no hagas nada de eso porque no tienes idea de cómo mierda me siento y... yo tampoco - Confieso, mientras lágrimas salen de mis ojos; Freyja me abraza y siento cómo mi mundo se viene abajo, otra vez.

- Cuando pierdes a un ser querido, una parte de ti se va con ellos. Se va la personalidad que solo tenías con esa persona... ¿Pero que pasa si toda mi personalidad, mi alma se va con él, Frey?- Le pregunto, con cada vez más lagrimas en mi rostro.

- Yo... no lo sé.

Más gotas salen de mí, como una gran cascada. Lloro cada vez más, tanto que mis ojos arden.

No puedo más, mi alma se partió en dos con su partida... una parte se fue con él y la otra... no se donde está. No sé si la encontraré, no sé si podré encontrar la luz para salir de este maldito agujero que me está consumiendo otra vez.

Que ingenua que soy. Pensé que este sentimiento de oscuridad se estaba yendo, pero volvió. Y volvió aún más grande que antes.

- Frey... no puedo parar. No puedo parar de llorar, todo se siente igual a la vez que perdí a mamá... no, no igual. Peor. - Grito, haciendo que mi garganta arda.

- Tranquila, tienes que soltarlo todo. No importa cuánto, si a penas un río o incluso un mar entero. Lárgalo todo, te hará sentir mejor... - Trata de tranquilizarme, abrazándome más fuerte.

- En... lo más profundo de mi corazón, yo suponía que mi mamá se iba a morir pronto, debido a su enfermedad.
Pero de... de él... nunca lo esperé. Siempre pensé que yo iba a morir primero...
Fue como un torbellino que me azotó, como... un hogar que amas tanto, que te hace sentir bien, que es de las pocas cosas que te mantiene viva... se queme. Se destruya. ¿Qué voy a hacer ahora? ¿Cómo hago para reconstruir esa casa que se quemó por segunda vez?