Capítulo 2.

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Mantuvo la cabeza ladeada y observó que todo estuviera en orden, cada pared estaba pintada como el cliente lo dictó y las luces funcionaban adecuadamente.

Era hora de irse a casa y descansar después de tener una semana llena de ardúo trabajo.

Toji había ganado algo de dinero  durante ese periodo de trabajo pues quería terminar de alejarse de las apuestas, por eso optó a trabajos fáciles como; Pintor, jardinero y fontanero.

[Para él fué la mejor opción.]

Trabajar en casas grandes, lo hacía ganar dinero, pero...

Sacó su teléfono y observó que alguien había dejado un mensaje esa tarde. Ese día no estaba de humor para aceptar al ser llamado por una de sus clientes, su tarifa había subido y la mayoría se había retirado de buscar sus servicios. (Más que todo, chicas jóvenes).

—¿Hana? —observó que aquél número sólo le pidió información, no había foto de perfil y no sabía si responder o no, ya que lamentablemente había tenido malas experiencias en éste caso con hombres deseando de sus servicios— Uhm...

Toji decidió responder el mensaje, si la persona deseaba de sus servicios. Tendría que pagar lo que ahora cobraba.

"Elementos principales para tí;
•Si deseas reservar un día exacto, házmelo saber.
•El pago se hace a través de una transferencia que se te dará al momento de conocernos personalmente y ten en cuenta que una vez pagado de éste, no se te devolverá tu dinero si decides arrepentirte de no tomar mis servicios.
•Al ser tu caballero de compañía, no quiere decir que recibirás un trato especial a menos que seas una cliente de primer grado. (Ésto requiere cena en restaurantes de lujo y hotel de 5 estrellas).
•Si eres menor de edad, te pido que no me hagas perder el tiempo.
•El resto de información se te dará al momento de conocernos."

—No estoy con ganas de hacer ésto —susurró para él mismo sintiéndose cansado, el pelinegro deseaba tomar una ducha y dormir toda la noche. Esperaba que aquella chica no respondiera a su mensaje— Pasaré por casa la próxima semana, solo no le menciones nada a tu hermano.

Tsumiki había estado esperando a que su padre llegara a casa ese día, pero sabía lo ocupado que solía estar por su trabajo. Su hermano menor ya estaba acostumbrado a su ausencia, lo único que le importaba a esas alturas solo era tener a su hermana mayor cerca.

—Está bien, sólo cuídate mucho —Toji sonrió, aquella chica pese a no ser su hija de sangre, era de la única chica a quien podía aceptarle quejas y regaños— Te quiero.

—Yo también te quiero, niña. Solo cuida a Megumi.

Toji conducía en dirección a su departamento, el reloj marcaba casi las 5 de la tarde y su teléfono no había vuelto a sonar. Supuso que la chica quién había escrito no estaba interesada luego de leer los elementos que solía enviarle a las mujeres que deseaban de sus servicios.

—¿Uhm? —observó la pantalla y era el número de la susodicha llamada Hana, Toji suspiró, al parecer aquella mujer deseaba sus servicios.—

—"¿Está disponible ésta noche?"

—¿Qué si estoy disponible? —alzó su mirada y se dió cuenta que su departamento estaba en orden, no era una cliente de primer grado a menos que la viera en persona y él decidiera darle ese trato especial, el cuál solamente había recibido una mujer mucho más mayor que él. Aquella señora de 45 años, le había dado una propina extra de 1000 dorales estadounidenses y desde ese entonces, Toji no trataba con especialidad a una mujer dentro de sus servicios— "Kabukicho Distrito, edificio principal/departamento #56."

Caballero de compañía(Toji Fushiguro)(+20)#PGP2024Donde viven las historias. Descúbrelo ahora