Capítulo 5.

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Pequeños suspiros se escaparon de entre sus labios, su cuerpo se sintió muy pesado y removerse sobre su cama no ayudó a que su cuerpo reaccionara correctamente.

[Hana sintió que algo la estaba sujetando por la cintura.]

Frunció el entrecejo entre lloriqueos y la persona que se encontraba a su lado, abrió lentamente los ojos.

Toji observó en silencio en como aquella chica se acariciaba la espalda baja, ella llevaba una pijama bastante cómoda y haber estado metido debajo de las sabanas junto a ella...

[Lo hizo sentir como si hubiera dormido sobre un enorme malvavisco.]

—D,Duele...

Una pequeña queja se escuchó por su parte, acaso el haber teniendo sexo en el baño y ésta vez siendo un poco más brusco, ¿La había dejado bastante adolorida del cuerpo?

Era bastante obvio que así fué.

—¡¡AAH!!

Él se quedó quieto, ligeramente una sonrisa había aparecido en su rostro y sus ganas de burlarse completamente de ella estaban bastante presentes en aquél instante.

Hana se había sobresaltado hasta al punto de caer de la cama y él solo se quedó quieto mientras se cruzaba de brazos, ella se miraba agotada y aunque se hayan dormido casi a las 4 de la madrugada, sabía que no debió de haberla agitado demasiado.

—Buenos días, Hana —respondió a su grito en una ronca y ociosa voz, Hana no dejaba de verlo de aquella forma tan aterrorizada, ¿Quién era él? ¿Acaso lo que había pasado no había sido un sueño?. Volteó en dirección al reloj ignorándolo por completo y ésta volvió a quejarse mientras se levantaba del suelo de manera bastante torpe, (¿Y ahora qué le pasaba?)Pensó el de cabellos negros.—

—Llego tarde, ¡mierda!

Toji alzó una ceja mientras se acomodaba mejor en aquella cama, admitió que era jodidamente cómoda y le sorprendía que fuera incluso más suave que la suya.

Hana había corrido al baño, cepilló sus dientes, lavó e hidrató su rostro y se metió a tomar una ducha rápida y si no se apresuraba...

[¡Llegaría tarde a la universidad!]

—Perdóname, lo lamento mucho...—se disculpó luego de haber terminado de alistarse para esa mañana, tenía 30 minutos para llegar y la universidad no quedaba tan cerca de su departamento. Hana literalmente tenía que convertirse en una conductora profesional si no quería escuchar a sus profesores maldiciendola por tercera vez en ese mes— Pero si falto un día más a la universidad, terminaré sancionada y no quiero escuchar a Nanami hacerme reproches por las quejas de mis maestros...—la vió trepar sobre él y se apoyó nuevamente en su pecho, Toji no dijo nada, ¿Quién era Nanami? Fué la única duda que resonó en su cabeza— Al regresar te llevaré de vuelta a tu departamento.

—Estaré bien, no me hará nada mal quedarme en éste asombroso lugar un rato más —Hana sonrió, él dejó un beso sobre sus labios y ésta simplemente suspiró encantada en respuesta— Ten un gran día hoy, nos vemos más tarde.

—¡Adióóós! —cantó mientras corría fuera de su habitación luego de haberse apartado de él de manera rápida, el pelinegro sonrió. Ella era demasiado energética y esperaba que no llegara tan tarde a sus labores más importantes.—

Caballero de compañía(Toji Fushiguro)(+20)#PGP2024Donde viven las historias. Descúbrelo ahora