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𝒂𝒄𝒄𝒆𝒑𝒕 𝒊𝒕

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Vivianne Roseau.

—¿Estás segura?

—Tenemos que terminar la mejor carroza que ha visto el pueblo, así que por supuesto.— aunque Caroline no recordaba que había pasado me preocupaba sinceramente por lo que pudiera ocurrir si nos regresabamos a la escuela haciendo una actividad con papeles de colores.

—No lo sé, Care.— la miró dubitativa.

—Por favor Anne, se que estas nerviosa porque Marjorie no estaba en casa.— me mordí el labio con nerviosismo, ocultar el motivo por el cual me preocupa, resulto díficil.— Pero, solo deja que mi cabeza realice el plan "d", el "b" está siendo ejecutado, haré un par de llamadas y el "c" es llorar un rato.

Reí un poco escuchando a mi mejor amiga, debía ser obvio que esos serían los planes. Con el pasar de los años Caroline había estado en todas las actividades posibles, en algunas ocasiones la acompañamos, siendo sincera realmente disfrutaba más de verla, más que ser parte de ella, sin embargo haría lo que fuera por su felicidad y en este caso conocía la importancia del desfile para Care.

Suspire un poco. —Bien, pero déjame compensar lo de los vestidos ¿Si?

—No fue tu culpa, Anne. No me molesta de todas formas, sería una tarea que tacharia de mi lista.— Caroline tomó su cuaderno rosa y con un bolígrafo brillante realizó una línea sobre las palabras. Antes de que pudiera notar que en realidad era mi bolígrafo corrió hacia la carroza. La vi algo divertida.

—¡Hey!, Stefan me contó lo de Isobel, ¿Estás bien?— La voz de Elena apareció entre el silencio que la partida de Care dejó en mi mente.

—Lena, me asustaste un poco, estoy bien. La excusa del cambio de vestimenta siempre funciona.— mire el abrigo de cuello alto que cubría las marcas rojas en mi piel.

—Lo lamento tanto, en serio.— me miró apenada.

—No te preocupes, estoy bien.— repetí.

Mire a Jeremy quien se veía algo preocupado mientras caminaba hacia nosotras. Elena miró distraída en todas las direcciones, seguramente buscando a Stefan.

—Los dejaré solos, será mejor para ambos.— pronuncié cuando Jeremy se acercó en su totalidad.

Me senté cerca de los chicos, con una libreta en mano y las telas de Caroline empecé a ver las alternativas que tenía para encontrar (o en casos desesperados, hacer) los vestidos en menos de 24 horas.

—¡Ah!, ¡Ah!—levante rápidamente la vista escuchando los gritos de Matt, con desesperación deje las cosas a un lado y fui en su dirección.

—¡Levanten este trailer! ¡Vamos chicos, ayudenme!— intenté apartar a los adolescentes que lo rodeaban, viendo como Matt se quejaba entre los intentos de los chicos de levantar la pesada estructura del remolque. Cuando por fin logre llegar al frente Stefan ayudó, liberando a Matt.

—Caroline, llama a una ambulancia.— Stefan gritó.

—La ambulancia dice en 15-20 minutos.— le respondió ella imitando lo dicho por el celular.

Intenté acercarme a ellos antes de ser detenida por Bonnie quien sujetó mi brazo. —Él estará bien, tiene a Tyler y a Caroline. —Ven, te necesitamos.

Con algo de fuerza al ver que no me movía, nos guió hasta el salón donde Alaric daba clases.
—¿Dónde está el dispositivo?— dijo ella al llegar.

𝑳𝒆𝒕𝒕𝒆𝒓𝒔 𝒇𝒐𝒓 𝒉𝒊𝒎 | damon salvatoreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora