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Capítulo 12

El rubio se quedó estático, ¿esto era real?

Dios... todos esos pensamientos y sentimientos que había bloqueado por completo, explotaron en menos de un segundo.

Sus ojos se reencontraron y conectaron como siempre lo habían hecho.

— Sasuke... — tragó pesado y le costaba un poco respirar.

Su amigo de la infancia estaba bastante cambiado, se lo había imaginado de muchas formas, pero verlo en vivo y en directo superó todas sus expectativas.

Simplemente era la persona más hermosa que jamás vió antes.

— ¿Sasuke? ¿el Sasuke que me contaste? — la pelirosada abrió su boca de impresión y luego sonrió. — Es un gusto conocerte, que hermosa coincidencia. — dijo con emoción. Recordaba lo mal que estuvo su esposo un tiempo por no saber nada de su amigo, entonces se puso honestamente feliz. — ESTOY TAN FELIZ. — sonreía ampliamemte y se abalanzó sobre Sasuke para abrazarlo. — he escuchado mucho de ti, gracias por hacer feliz a mi esposo por tanto tiempo. —

— ¿Esposo? — fue lo único que pudo salir de su boca, los dos seguían paralizados sin poder dejar de mirarse y de pronto se dió cuenta, Suigetsu, el los había visto meses atrás, ella era la señorita de pelo rosado... "¿destino? no. no. no Sasuke. basta" se decía a si mismo.

— Pues sí. — mostró su sortija de compromiso. — debes estar muy feliz, ustedes fueron mejores amigos. — su efusividad lentamente se calmó al ver como los dos hombres no hablaban. — ¿están bien...? esto se está tornado incomodo...

— Sí, amor. Y-yo... ahm... mierda. — carraspeo y trató de actuar lo más normal que pudo. Pero de tan solo verlo, su sistema nervioso se descontroló e intentaba arduamente en no tener una erección al ver como Sasuke se veía tan extremadamente bien.

...

Los tres se encontraban cenando en el restaurante favorito de Sakura, hizo lo que pudo para convencerlos de tener una pequeña reunión, ya saben, para actualizarse, conversar, etc...

Después de todo, eran mejores amigos, ¿verdad?

— Entonces, Sasuke, ¿en qué trabajas? — preguntaba mientras se echaba un bocado de su cena a la boca, expectante por la respuesta del mejor amigo de su prometido.

— Soy doctor. — sonrió sin ganas agarrando su vaso de vino y tragando sin siquiera sentirlo de los nervios que tenía. Se reprendía a si mismo por haber aceptado, qué mierda hacía ahí.

— Vaaaaamos, ¿por qué tan callados? si yo fuera uno de ustedes, estaría saltando de la emoción, Naruto me cuenta cosas muy lindas de ustedes dos.

Bufó y sonrió incrédulo. — entonces no te ha contado todo. —

Naruto pudo ver el rostro de confusión de su novia y para pasar desapercibido, rió y contó una estúpida historia de las veces que "peleaban"

El teléfono de la pelirosada comenzó a sonar, revisó quien era y se disculpó un momento para salir a hablar, era sobre el trabajo.

Sasuke y Naruto se quedaron solos, por primera vez en nueve años. Ninguno emitía alguna palabra.

Naruto tuvo que romper el hielo.

— Te ves... tan... distinto. — dijo con su voz temblorosa a causa de los nervios.

— Tú te vez igual. — mintió haciéndose el desinteresado, claramente no podía decir que su actual cuerpo le había sacado uno de los mejores orgasmos de su vida.

Sonrió con ternura.— tu no cambias ¿eh? siempre tan serio. — lo miró de arriba a abajo. — tal vez yo estoy igual, pero... tú, tú te ves hermoso.

Sasuke abrió sus ojos y sus mejillas no tardaron en ponerse rojas, no supo qué decir pero para su salvación Sakura ya había llegado.

— ¿Sasuke? ¿ya estás borracho? — soltó una carcajada al ver su rostro sonrosado. — no tienes nada de aguante eh.

Soltó una risa en tono bajo. — sí, la verdad ya estoy muy borracho, no estoy acostumbrado al alcohol. — se encogió de brazos. — así que... ya me voy. — sonrió y empezó a arreglar sus cosas.

— ¿Cómo? pero si llegamos hace menos de una hora. — preguntó apenada la esposa del Uzumaki.

— Lo siento, mañana debo trabajar temprano. — hizo una cínica mueca de "no me quiero ir pero..." solo para pasar desapercibido.

— Oh... — asintió. — está bien, ¿amor? por qué no lo vas a dejar? — miró a su esposo con ojos alentadores, ella realmente quería que fueran mejores amigos de nuevo.

— No es necesario. — negaba agitando las manos pero el Uzumaki habló.

— Vamos juntos a dejarlo. — acarició la mano de la pelirosada por debajo de la mesa.

— Nop, mhmh. — negó con su cabeza. — vayan los dos, necesitan tiempo a solas, sino esto siempre será incómodo. — rió suavemente. — necesitan ponerse al día los dos solos.

— Tranquila, Sakura, me voy solo. — tomó sus cosas y se despidió con una de sus manos.

— Anda.

— ¿Eh? — respondió su esposo.

— Vamoooos, anda. — lo echaba con un movimiento de manos.

Suspiró y con los nervios de punta comenzó a caminar tras Sasuke.

— ¿Por qué me evitas? — preguntó Naruto haciendo sobresaltar al azabache, no se percató de que venía tras el.

— Déjame solo. — rodó sus ojos y comenzó a caminar un poco más rápido.

Trató zafarse de la situación, pero el Uzumaki no le hizo caso ninguna vez.

Así, comenzaron a caminar en silencio.

...