Capítulo 14

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Entrelazó sus dedos en la cabellera del rubio y siguió el beso. Naruto lo tomaba fuertemente de la cintura, lo apegaba a el lo más que podía, lo apretaba como si no hubiera un mañana. Sasuke por su parte, estaba volviéndose loco, probar sus labios nuevamente hizo explotar tu cerebro y corazón. No podían dejar de besarse, simplemente no podían, ni querían.

El Uzumaki, después de toda una noche aguantando ponerse duro al ver semejante hombre, se dejó llevar y frotaba jadeante su miembro contra el de Sasuke, este soltó un pequeño gemido y eso para el rubio, fue tan caliente escucharlo que pensó que se iba a venir en ese mismo momento. Pero no. No podía hacer eso.

El Uchiha abrazaba su cuello mientras Naruto se encargaba de besar sus hombros, sus clavículas, sus orejas, todo. Había fantaseado con esto mucho tiempo y por fin se estaba haciendo real. Tenia tanta ganas de tocarlo, de verlo, besarlo...

— N-Naruto... basta... — trató de hablar, pero al Uzumaki poco le importó, lentamente caminaban hacia atrás hasta llegar al sofá y caer sobre el.

— Eres tan exquisito... — susurró en el oído del azabache y este se retorció por dentro. — Te extrañé tanto...

— Yo t-también. — soltó un gemido al sentir como Naruto daba una estocada aun con ropa, se mordía sus labios y trataba de no hacer ruido, pero le era imposible. — Ngh- me tienes hecho un desastre Naruto Uzumaki, por favor no pares.

Llamada entrante.
AMOR.

mierda.

— No contestes. — suplicaba mientras lo agarraba de su camisa. — por favor, Naruto, te necesito aquí. Te necesito dentro.

El Uzumaki tenía los ojos negros de lujuria, ver a Sasuke así... ver como le suplicaba, se lo había imaginado muchísimas veces, pero esto era extremadamente mejor que imaginarlo. Pero, la realidad cayó sobre este y tuvo que separarse.

— Naruto... — mordía su labio inferior y apretaba sus piernas con fuerza mientras hacía presión con su mano en su propia erección. — n-no me dejes así.

El celular no paraba de sonar, el rubio no sabía qué hacer. Quería follarse a Sasuke en ese preciso momento, pero el tenía una vida. Tenía a alguien, alguien que lo amaba con todo su corazón, y le estaba fallando. Sakura estaba contenta e hizo todo para que estuvieran juntos a solas y así es como se lo pagaba. Se sentía lleno de vergüenza y culpa.

— Lo siento, Sasuke, debo irme. — agachó su cabeza, siendo incapaz de poder encarar al azabache, tomó sus cosas y salió del lugar.

...

Sasuke se quedó acostado en el sofá, con su cara ardiendo de la vergüenza al haber sido tan vulnerable con Naruto, pero no lo podía controlar y mientras más lo pensaba, su erección no podía bajar.

— Maldito idiota, lo odio. — bufó mientras se tocaba a si mismo por encima de la ropa.

Se masturbó y se vino en poco tiempo, su miembro imploraba ser liberado.

Suspiró y se quedó allí, tratando de procesar todo lo que había pasado... ¿todo fue real? como es posible... solo se habían visto menos de un puto día y casi follan.

¿Significa algo?

Puede sonar estúpido preguntarse eso, pero Sasuke no confiaba en él, desde la ultima vez que se vieron, le rompió el corazón de la manera más horrible, e incluso ahora sabiendo que realmente no sabía, no podía creerle. Y ya no sabía qué hacer, ¿ignorarlo? ¿bloquearlo? ¡¿cambiarse de ciudad?! aagh, nada se sentía satisfecho, no quería entrometerse en su vida, estaba casado, por dios.

— Pero el vino a mi, yo en ningún momento lo busqué... — se tapó el rostro con sus manos, lleno de frustración, no sabía qué hacer, pero, por primera vez en su vida, no iba a controlar la situación. Simplemente iba a dejar que pasara lo que inevitablemente tiene que pasar, quería saber que le deparaba el destino.

Recuerdo, 11 años atrás.

— ¿Qué pasa si algún día no nos vemos más? — preguntó Naruto de la nada.

Estaban acostados en el pasto del río que pasaba por el pequeño pueblo donde vivían, el cual se encontraba a pasos de la casa de Sasuke. Se había convertido en el lugar favorito para estar juntos y conversar.

— No creo que eso sea posible... — miró el rostro del chico que amaba. — ¿por qué preguntas? ¿acaso me vas a correr de tu vida? — se cruzó de brazos y frunció el ceño.

— Claro que no, teme. — desordenó el cabello del azabache y soltó una pequeña risa. — no podría separarme de ti. — miró directamente los ojos de su amigo, cada que lo hacía, sentía una extraña sensación, pero la verdad, nunca lo tomó en cuenta.

— Yo tampoco... — susurró Sasuke con sus ojos perdidos en esa linda mirada azul.

— Bueno pero, si llegara a pasar, siempre estaré aquí cuando quieras buscarme. — le sonrió ampliamente.

ninguno de los dos sabían en ese entonces todo lo que podría pasar.

fin del recuerdo.

...

karaoke   -𝘯𝘢𝘳𝘶𝘴𝘢𝘴𝘶ᡣ𐭩 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora