Su noche pudo ser perfecta si no fuera por aquellos pensamientos que habían invadido su mente, impidiéndole conciliar el sueño.
Siendo ya las tres de la madrugada, Jhonny sentía qué una tontería le había quitado el sueño por completo.
Debía de estar pensando únicamente en Kyle, en sus hermosos labios y la forma en la que lo había abrazado cuando se vieron. Su mente debía de recordarle lo perfecto que fue el momento del reencuentro, pero no... Su mente pensaba en una sola cosa: ¿Quién es ése ex amor de Simon Riley?.
Sí, estaban por “casarse”, pero éso no quería decir que él pudiese estar con cualquier otro, ¿o sí?.
Consideró que era incorrecto. Supuestamente le gustaba, así que, ¿por qué fijarse en un ex amor?. ¿O acaso él es una tapadera?. Imposible. No tendría sentido que lo obliguen a casarse con él si había otro hombre en su vida.
¿Quizás no era de familia importante?... Tampoco tenía sentido ya que él justamente no tenía éso, dinero.
Entonces, ¿por qué reunirse con un ex amor?.
Confundido ante sus preguntas sin sentido es que se sentó en donde estaba durmiendo, llevando su vista hacia la cama de Simon, quien dormía profundamente.
No comprendía por qué preguntarse tanto acerca de su vida privada. No le gustaba y tampoco le importaba. De hecho, tenía planeado huir con Kyle. Entonces, ¿por qué hacerse ésa clase de preguntas sin respuesta?.
— ¿Por qué me pasa ésto justo ahora?...
Susurró, sintiéndose algo molesto debido a las preguntas que se hacía a si mismo.
Suspirando pesadamente es que volvió a acostarse, cerrando una vez más sus ojos.
Mañana volvería a ver a Kyle e intentaría pasar con él el mayor tiempo posible.
Iría a la mansión de los establos para limpiar y de paso fijarse si habían muebles para-...
No. ¿Por qué hacer éso si se iba a ir con su verdadero amor?.
Solamente limpiaría la mansión y fingiría interés en la misma, nada más.
Para su suerte, pudo dormirse rápidamente al sentirse mentalmente agotado. Tenía demasiado en que pensar y demasiadas cosas para planear. No sería fácil irse el mismo día de la boda, pero contaba con la ayuda de la señora Riley...
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11 de la mañana
No era común en el despertar tarde, pero al haberse dormido en un horario no común es que se había decidido quedarse un rato más en la cama.
Apenas se despertó y tras dejar la pereza de lado es que se levantó, estirando aus brazos mientras bostezaba.
Rápidamente se acercó al ventanal, mirando hacia los establos para confirmar que evidentemente ahí estaba Kyle, junto a sus compañeros, camuflado.
Se vistió, peinó y perfumo, estando listo para ir a verlo, aun que claro, primero debía de desayunar con Simon y así no levantar sospechas.
Sorpresa fue la suya cuando el ama de llaves le avisó que en la mansión no se encontraban los Riley. Al parecer Henry se había ido al ministerio de la ciudad. Mary y Simon habían ido a otro lado, y habían dejado indicado que más adelante le explicarían...
Entonces... Estaba completamente solo en aquel lugar.
Pidió para desayunar un café y tostadas con miel, siendo rápido a la hora de terminar su desayuno.
— Lamentamos estar aquí tan temprano, Harold, pero necesito de tu ayuda con un asunto legal. — Habló Simon apenas se adentraron en aquella oficina junto a su madre.
