17

144 13 1
                                    

ADELLA

Me lleva por todo el castillo tomándome de la mano y una sensación extraña me recorre cuando sus dedos se entrelazan con los míos, una sensación familiar que seguramente el también siente. Su sonrisa me dice todo

—Aqui - dice abriendo la puerta y mostrando en su interior una enorme biblioteca

Mi boca se abre de sorpresa y llevo una mano a mi boca mientras que camino hacia dentro de esta, mi corazón late a mil y mil emociones me recorren de pies a cabeza

—Te la regale en nuestro primer aniversario - informa

Demon no me hagas perder el tiempo

—¿Cuando tú esposo te hizo perder el tiempo?.

Mis ojos se comienzan a picar mientras que mi corazón late con fuerza y las mariposas adornan mi estómago formando una emoción extraña sobre mi, miro a los alrededores con una sonrisa

Feliz aniversario - dice y siento sus manos en mi cintura, abrazándome por detrás

Es hermosa Demon - digo sonriéndole con los ojos brillosos mientras que me volteo a besarlo

—¿Porque está sucia? - digo tocando la mesa llena de polvo

—No e dejado que nadie entre aquí después de ti - dice a mis espaldas mientras que tocó los libros en los estantes

—¿Que me quieres demostrar con esto? - digo volteando a mirarlo

En ese momento mi trasero choca contra la mesa al verlo cerca de mi, muy cerca de mi a tal punto de que respiramos el mismo aire, sus ojos están hipnotizados en los mios y me siento temerosa ante su mirada

—No hay nada que demostrar – susurra como para que yo solamente lo escuché—No cuando tú sabes lo que pasó

—Estoy harta de tantos misterios – digo alejándome de el para caminar por la biblioteca, mirando los estantes y los diseños de la habitación

El me mira desde lejos con los brazos cruzados, veo su cabello azul arder un poco ante mi comentario Pero se mantiene firme ante mis palabras, el sabe que no puede tocarme

—¿Que paso aquí? – digo viendo la mesa pegada a la pared, muy lejos del resto, estaba bien escondida como para quien entrara no la viera

Oigo una risa a mi espaldas y me erizo cuando siento sus manos en mi cintura —Aqui tu y yo nos divertíamos

Mi instinto dice que lo aleje Pero mi cabeza ruega que lo desafíe para ver hasta donde puede llegar, de cuánto placer o dolor puede causarme con unos toques

—¿Cómo? – susurro cuando siento su respiración en mi cuello

—Te mantenía así – dice y suelto un jadeo sorpresa cuando sus manos pegan mi cuerpo a la mesa y separan mis piernas por detrás, haciendo que mi culo quede en posición a su erección que se encarga de frotar haciéndome jadear —Y no paraba hasta que rogaras

Siento vibraciones allá abajo cuando dice eso y gimo cuando se sigue frotando contame mi sobre la ropa, sus movimientos son rudos, como si estuviera simulando el movimiento que hace al follar

—Yo no ruego – suelto como puedo y cierro los ojos tratando de resistirme al placer que recibo con unos toques simples de su parte

—Oh mi amor – dice y se acerca a mi oído con una voz ronca que me pondría de rodillas si no me tuviera agarrada —Conmigo rogabas que te hiciera un heredero solo para poder sentir como te llenaba

Sus manos se desprenden de mi cuerpo y en ese momento me pongo derecha buscando paz y calma en mi cuerpo pero solamente recibo unas bragas mojadas y el corazón latiendo a mil

Destinada a ser suyaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora