Las nubes se movían lentamente por el cielo azulado, la vista era hermosa y relajante, al voltear mi rostro pude encontrar a mi lado a un joven apuesto de cabellera roja que yacía sobre el césped observandome con su mirada profunda, me acerqué hacia él y nuestras narices quedaron tan cerca que podían rozarse, acerqué mi mano para tocar su rostro, sus mejillas eran tan hermosas y suaves, deslice mi dedo hacia sus labios rosados y carnosos, y en un impulso el pelirrojo se lanzó hacia los míos encontrándonos con un beso mágico, no había otra cosa que quisiera en ese momento, Youngjo se había convertido en mi todo...mi amor verdadero.
Lentamente abri los ojos y noté que a mi lado yacía un apuesto gatito de cabello rojo que estaba totalmente dormido, no quise despertarlo de su sueño así que me levante de la cama muy despacio para dirigirme hacia el baño. Estando allí me acerqué al espejo del lavamanos, noté que tenía algunas ojeras y una que otra espinilla en la parte de mi pecho, sin embargo repentinamente sentí punzadas en mi espalda, por lo que decidí fijarme y para mi sorpresa los moretones que había tratado desde aquella vez por alguna razón estaban volviendo a marcarse, con una de mis manos toque uno de estos y di un salto del dolor que me causó, pensé ¡¿Es enserio?!, literalmente me había recuperado pero otra vez volvieron a aparecer. Estaba tan disgustado que no noté que el pelirrojo había estado en la puerta observandome.
-¡Youngjo!-
-Buenos dias-sonrió.
-Buenos días...-traté de tapar mi espalda pero el chico se acercó y me tomó de la playera para revisarme-Oye-
-Parece que han vuelto...¿tienes idea del porqué?-
-No realmente, quizás es por estrés o no se-
-Tengo el presentimiento de que no es por eso-me miró fijamente.
-¿Qué?-lo mire confundido.
-Bueno...no sé, quizás sea erróneo pero-tragó saliva-Mientras teníamos sexo sentí que bajaste el ritmo, osea, creo que de alguna manera estar arriba te lesiono la espalda, lo que posiblemente haya causado que tus lesiones volvieran-
-Oh...no lo había pensado, quizás tengas razón-baje la mirada-Sentí algunas punzadas cuando ya sabes, pero pensé que era porque soy novato-
-Eso no tiene nada que ver, quizás duela pero no para que te den punzadas o se te creen moretones-
-Oh...pues, parece que si fue por eso-chasquie la lengua-¿Y ahora qué?...¿qué hacemos?-
-Bueno, en primera instancia tienes que volver a tratarte los moretones y segundo sera mejor que no tengamos intimidad hasta que te hayas recuperado-
-¿Enserio?...¿no tendremos nada de nada?-pregunté con ojos suplicantes.
-No, quiero que mi novio esté bien antes que nada-me tomó de los hombros-Pero si prometes tratarte y cuidarte, te recompensare con una noche inolvidable-guiñó un ojo.
-¿Solo una noche?-
-Todas las que quieras pues-
-Perfecto-lo abracé-Asi me gusta-
-Lo sé-me besó-Por cierto, ¿se lo dirás a tus padres?...o ¿les inventaras otra causa?-
-No sé...¿qué opinas tú?-
-No lo sé, sabes muy bien que por mi situación hay muchas cosas que no les digo a mis padres-
-Tienes razón...bueno, quizás pueda decirles que solo volvieron y ya, me creerían porque saben como es mi salud de delicada-
-Cierto, pues supongo que no hay de que preocuparse entonces-sonrió-¿Bajamos?-
-Si, pero antes lavemonos la cara-el chico afirmó y ambos nos lavamos. Al terminar bajamos hacia la cocina y para nuestra sorpresa mi padre aún no se había ido al trabajo.
-Buenos días muchachos-saludó.
-Buenos días padre-me acerqué para abrazarlo, el pelirrojo solo se limitó a darle un apretón de manos.
-¿Qué tal Youngjo?-
-Oh, todo bien señor-pude notar un ligero nerviosismo en su voz que sabía disimular bastante bien-¿Y usted?-
-Bien, aunque a esta edad no puedo ser exigente-dejaron escapar unas pequeñas carcajadas-Pero en fin, se me hace tarde así que nos vemos familia-besó a mi madre y luego me abrazó-Cuidense y nos vemos después, ¿estarás para la cena?-preguntó al pelirrojo.
-Oh...no lo se-
-Bueno, de igual manera me despedire-el chico estaba por extender su mano cuando mi padre sin pensarlo se acercó para abrazarlo, el pelirrojo se quedó inmóvil ante tan repentina acción, pero le correspondió-Nos vemos Youngjo-
-Nos vemos, señor-se despidió y finalmente se retiró hacia su trabajo.
-Eso no me lo esperaba-afirmé-¿Qué se siente que tu suegro te abrace?-
-Pues, bastante bien, creo que ya me aceptó-sonrió.
-Claro que sí, él te quiere mucho-afirmó mi madre-Ahora vengan a comer-insistio señalando hacia el comedor, nos acercamos y nos dispusimos a desayunar.
ESTÁS LEYENDO
𝘾𝙖𝙩 𝙡𝙤𝙫𝙚
RomanceHwanwoong es un adolescente que tras perder a sus padres en un accidente es adoptado por una dulce pareja que decide irse a vivir a New York durante un tiempo y luego tras cumplir la edad para entrar a preparatoria deciden volver a Corea donde su vi...