La vida de Gang Ryu-jin da un giro inesperado cuando su hermana Nam-soon desaparece. Obligada a asumir responsabilidades, Ryu-jin enfrenta desafíos para mantener la estabilidad en la vida de Nam-soon.
Sin embargo, su corazón se ve dividido cuando s...
Entraba tomada de la mano de Shi-oh a la empresa. Él sostenía una tableta con la otra mano, ambos observando la noticia narrada por el sujeto del noticiero de su madre. La gente les abría el paso e incluso murmuraban discretamente de sus manos unidas, las reverencias se proyectaban en todas partes hasta que se detuvieron. El tipo del noticiero había expuesto por completo la droga.
Ryu-jin apretó los dientes mientras fruncia la boca, preocupada por la pronta reacción que su futuro marido estaba por tener.
El secretario Yoon llegó corriendo hacia ellos, y por alguna razón, Shi-oh puso la mirada sobre ella, era como si esperara una solución de su parte.
¿La estaba probando a pesar de todo? ¿quería que le demostrara lealtad? ¿que es lo que Shi-oh buscaba realmente?
—Reúne al equipo legal, hay que planificar una respuesta y hay que transformarlo en una noticia falsa, algo sensacionalista ¡Absurda! y busca en los medios información sobre Doogo.
—Yo me encargo —respondió seguro el secretario para luego irse rápidamente.
Shi-oh la miraba con una sonrisa y ojos candentes.
—¿Qué?
—Lo hiciste muy bien.
Las mejillas de Ryu-jin enrojecieron por el cumplido y por la forma en que él había pasado el brazo por sus hombros para seguir caminando a la oficina. Las cosas habían dado un giro impresionante, casi la asesina y ahora son una feliz pareja.
Ryu-jin entró en la oficina junto a Shi-oh, observando el espacio mientras se dirigían hacia el escritorio principal. Shi-oh se sumergió de inmediato en sus cosas de jefe mafioso. Ella decidió acercarse al sofá, invitando a Kyle (que estaba parado junto al escritorio) a sentarse frente a ella.
—Ryu-jin, lamento mucho haberte ignorado la última vez. No fue mi intención —habló en ruso por lo que ella rápidamente sacó su teléfono para poner el traductor y que él repitiera lo anterior.
Ryu-jin asintió comprensivamente, apreciando la sinceridad en las palabras de Kyle: —Está bien, Kyle. No te preocupes por eso.
—Me alegra verte de nuevo. Honestamente, estaba un poco preocupado por ti después de lo que sucedió la última vez.
Ryu-jin frunció el ceño, recordando la situación tensa: —¿Te refieres a cuando Shi-oh me encerró en esa habitación?
Kyle asintió: —Sí, eso mismo. Pensé que Shi-oh iba a... bueno, ya sabes.
Ryu-jin se estremeció ligeramente al recordar lo cerca que estuvo de perder la vida ese día, pero son cosas que pasan: —Afortunadamente, Shi-oh no me hizo nada.
—Me alegro de escuchar eso. La verdad es que eres una de las pocas personas que ha logrado ganarse su confianza.
—Gracias —se meció sonriente de un lado a otro.
—Puedo escucharlos. Dejen de hablar de mi —el mafioso los miraba serio, pero Ryu-jin puso un dedo sobre su propia boca indicándole que no interrumpiera su conversación.
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