Capitulo 11

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Harry caminaba con tranquilidad hacía la habitación donde se encontraba su tía y padrino, el había sido el principal encargado de cuidar que todo estuviera bien especialmente por qué todo lo que tuviese que ver con sus títulos y apellidos fue arreglado cuando aún ellos estaban en el futuro y lejos de ver inversiones o revisar cartas (tampoco es que hubiera pasado mucho en 2 días) no tenía la necesidad de salir de aquella mansión la cual se volvió su segundo hogar.

Al dar la vuelta en un pasillo una puerta que siempre se mantenía cerrada se abrió.

Con curiosidad volteo su mirada y cuerpo hacia la puerta, no tenía nada especial, nada la diferenciaba del resto solo el hecho de que estaba sellada con magia y ni Draco ya siendo el Lord y dueño del lugar pudo abrir pero ahora se abrió al lado de él como si nada.

Se acercó un poco y al mismo tiempo cauteloso.

¿Hola? -se ánimo a saludar por lo poco que le dejaba ver la puerta-

Tomo aire mientras giraba el pomo y la abría con cuidado, adentro había una oficina siguiendo un patrón de verde y plateado pero que si en algún momento combinaba con el exterior ahora ya no lo hacía debido a las remodelaciones que su tía Cissy había hecho hace algunos años estaba llena de polvo detonado que no había sido usada en años y hasta podía apostar que décadas, el libro sobre el escritorio llamo poderosamente su atención y su curiosidad debía ser llenada, con delicadeza puso su varita sobre el libro susurro un hechizo que le enseño Draco para detectar cualquier maleficio para la persona que quiera tocarlo y entre otros más, una vez estuvo seguro que no se moriría en 7 días por haberlo tocado comenzó a leerlo desde el principio.

"Propiedad de Orión Black" fue lo que decía en la primera hoja hasta la parte superior izquierda.

Sintió un deja vu y recordó a su yo de 12 años hablando con Tom Riddle, con curiosidad y temor escribió en el cuaderno un "hola" pero al no recibir respuesta suspiró aliviado y continuo su lectura.

Pero aquel libro en realidad era un diario o eso parecía ya que solo tenía fechas y entradas algo extrañas, ya que parecía que las había escrito alguien que parecía analfabetado y que apenas estaba empezando a aprender, solo había palabras juntos a otras y tenía que pensar mucho para darles algo de sentido.

Continuo tratando de descifrar que decían ya que "estacion escuela malo heredero miedo sorpresa" no le decía nada, por suerte había una ventana a su espalda por dónde parecía entrar una luz natural agradable aunque no podía ver hacia afuera lo retribullo a algún hechizo mágico, también ya había limpiado el polvo con un rápido hechizo y se había sentado en la silla principal detrás de aquel escritorio.

La habitación de repente comenzó a oler a mar y manzanas verdes, no le molestó eran olores que le relajaban y le recordaban a las 2 personas más importantes de su vida.

¿Cómo lo hiciste? -pudo ver al rubio dueño del lugar en el umbral de la puerta-

No lo sé, solo estaba caminando y se abrió -le dijo con una leve sonrisa que le dedicaba solo a él-

La habitación te acepta como propietario y a mi padre y a mí no nos dejaba ni tocarla, no se cómo sentirme -se quejó-

Harry río ante aquello, fue una risa que encanto más al contrario.

Tal vez tenga algo que ver con mi abuelo -dijo mientras le entregaba aquel cuaderno ya que Draco ya se encontraba a su lado-

¿Cuál de los 2? -tomo el cuaderno que le era extendido haciéndole raro el tener un cuaderno y no un pergamino si se trataba de un sangre pura de la anterior anterior generación-

Black -dijo mientras sentía un nudo en su pecho por alguna razón-

Parece una bitácora -dijo el otro viendo las fechas y entradas relativamente cortas-

Las Cartas De Sirius Black Donde viven las historias. Descúbrelo ahora