❉TRES CUCHILLAS❉ Lord Shen x Wolf boss❉

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Toda la familia estaba en la mesa pero parecía que solo el más joven estaba comiendo con una notable incomodidad, miraba a sus padres sonreírle como si esperaran que hiciera o dijera algo. Trató de ignorarlos pero seguía sintiendo sus miradas inquietantes con esa gran sonrisa en la boca.

—...¿Van a decir algo seguirán sonriendo así?

—¿Sonriendo? ¿sonriendo cómo? — La mujer se tocó el cabello con nervios.

—Olvídenlo — Negó con la cabeza y siguió comiendo, sus padres se miraron entre sí.

—Shen, sabes que estamos orgullosos de ti.

—Sí, tu papá dice la verdad, sabes que te amamos ¿no?

—¿Por qué me están hablando así?

—Hijo, sabes qué puedes contarnos lo que tu quieras. Tu madre yo siempre tratamos de ayudarte con cualquier cosa que nos sea posible.

—...¿Está bien? gracias — Bajó la mirada tratando de evitar el contacto visual, comenzó a comer más rápido.

—Y bueno cariño, ¿has hecho algo interesante estos días?

—No

—Oh, bien — Miró a su esposo para que dijera algo.

El hombre carraspeó y tomó agua, como si estuviera juntando fuerzas para lo que iba a preguntar.

—Y... ¡Shen! ¿qué nos cuentas? ¿no has conocido alguna amiga o amigos por ahí?

El pavo real blanco tosió, ese cuestionamiento tan raro había hecho que se le fuera el agua.

—¡¿Qué carajos?! ¿Qué les sucede hoy? — Se levantó de la mesa, ya lo habían hecho molestarse — ¿Por qué conocería a alguien si estoy aquí dentro todo el día? — Vió a sus padres mirarse con algo de pánico, pero a su madre se le acabó la paciencia y soltó toda la sopa.

—¡Pues nos preocupa lo que estás haciendo en la noche! ¿te sales de la casa para ver a alguien? ¿o estás comenzando a consumir cosas raras?

—Mi papá toma — Hizo una mueca, esa situación era tan surreal que su molestia se convirtió en pena.

—¡Entonces sí es eso! que yo tome en ocasiones no significa que tú lo hagas todas las noches.

—¿Qué? ¡no! no estoy tomando nada ¿quieren saber qué me sucede? Me he dormido tarde porque estoy haciendo planes para...unos nuevos fuegos artificiales.

—¿Y por qué no lo haces en la mañana como todos los días?

Shen se quedó callado un instante, ese era un buen argumento pero si tardaba en responder no le iban a creer nada más.

—Pues...porque...en el día hay mucho ruido y en la noche me concentro más. Además ustedes me suelen interrumpir mucho, son muy molestos y es mejor esperar a que se duerman. Me ofende mucho que piensen que estoy saliendo por las noches, ni siquiera podría, ¿cómo esperan que salga? ¿volando? les recuerdo que no somos ni gansos ni grullas, somos ¡pavos! ¿no quieren intentar lanzarse desde el balcón de mi cuarto a ver si comienzan a volar? — Empujó la mesa hacia el frente y agarró su plato para comer en su habitación, a pesar de varias advertencias no hizo caso.

Al entrar dejó la comida en una pequeña mesa que tenía por ahí aunque se quedó inmóvil unos segundos por pensar en lo que le estaba saliendo mal, era demasiado evidente que algo pasaba y si conocía bien a sus padres no sería ninguna sorpresa que una noche se metieran a su habitación para confirmar lo que estaba haciendo. Suspiró tocando su pelo para tratar de pensar en algo, parecía ser que esa noche lo mejor sería no bajar al río, mientras contemplaba esa opción fue lento a un cajón donde guardó las dos cosas que le dio el lobo, la caja ya vacía de dulces y el anillo, sacó ambos, el anillo se lo puso y a la caja solo le pasó la yema de los dedos para sentir su grabado. Se estaba cuestionando si sería buena idea no ir y dejar al bandido esperando por él, lamentablemente no tenía ninguna forma de avisar sobre su ausencia. Y de repente en la cara de Shen se formó una mueca de horror a la que le siguió el guardar ambas cosas donde estaban como si alguien fuera a quitárselas.