Mi Querido Dulce Amor (EN PROCESO)

Día del plan

capitulo dieciocho

Marcos

Han pasado ya dos días desde navidad, y la verdad es que las cosas a como las imaginaba dieron un giro bastante apresurado, y no estoy diciendo que eso sea malo o que de algún modo me arrepiento de ciertas cosas porque no es así, pero, ¿Por qué lo digo? Bueno pues la verdad es que, dentro de mis planes no estaba que Astrid se enamorara de mí o que cambiara su manera de ser, al menos no tan rápido. Hay muchas cosas de las cuales no puedo hablar en este momento con nadie más que con Sofía...que justo ahora, no está muy feliz conmigo que digamos por aquella confusión de navidad.

-Si yo fuera tú, estaría temblando de nervios.

-Pero no eres yo, aparte falta bastante tiempo para que sea la obra, no sé de qué tanto te preocupas.

Estaba platicando con Mateo a cerca de algunas cosas, no sé en que momento se le ocurrió meter el tema de la obra, que después de lo sucedido en aquel día ya mencionado, no sé qué tan buena idea sea aparecer en la obra y poner mis aviones en marcha.

-No me preocupa nada, es solo que no creí que te vería representando a un personaje en las obras de Michelle, menos siendo el protagonista.

-Estás siendo dramático y eso que tú no tienes nada de artista.

-Mentiroso, soy más artístico de lo que tú puedes llegar a ser en cualquier día de tu vida aburrida.

Las charlas con mateo nunca son aburridas, incluso si hablamos de bichos extraños no será para nada aburrido o abrumador, porque él sabe cómo hablar de cualquier cosa y hacerlo divertido para cualquier tipo de persona con la que este teniendo la plática.

-Sé que quizás dije que me quedaría por más tiempo, pero Astrid dijo que debía verla en su casa así que me marcho de acá -Mateo se levanta de donde estábamos sentados y sin dejarme responderle, toma sus cosas y se marcha.

Tomo mi teléfono y le mando un mensaje a romea, sé que no hay de qué preocuparme con que Mateo vaya a su casa, pero, ella no me ha hablado en todo el día ya él le pide que la vaya a ver, entonces sí, Creo que no es nada justa esta situación.

-Mensaje de "PRECIOSA"-

-No es nada, solo me ayudarás con un par de cosas, relájate un poco anciano.

- ¡NO ME HABLES ASI SEÑORITA!

-Estaré ocupada en cuanto Mateo llegue a casa, así que te hablo después ¿vale?

- ¿No me has hablado en todo el día, y ya me dejaras plantado por chat?

-Markus, gurda tu dramatismo para al rato

-No seas grosera.

-Ha sido bastante dramático, porque ha dicho que no te he hablado en todo el día y apenas son las dos de la tarde.

-Eso ya habla mucho de cuanto aprecio me tienes.

Astrid cree que es la dueña del mundo, porque después de eso solo me ha dejado el mensaje en visto, y sé que cuando quiere que deje de molestarla solo me deja en visto hasta que le vuelvo a mandar mensaje tiempo después o me manda un corto mensaje que dice: Deja de ser tan callado y háblame. Es que de verdad no hay quien pueda entender el cerebro de esta chica, chica que por cierto me gusta mucho...y bueno, si lo digo en mi mente ¿Quién se estera?

Dejo mi teléfono en el sofá de mi habitación y salgo directamente para la cocina, no tengo hambre ni nada que se le parezca, pero echar un ojo en las compras que hace doña Lucí siempre me mantiene ocupada.