– ¿Qué planean ahora? – susurró Lantana en sus adentros – perfecto, tengo a ambas juntas, será más fácil acabar con las dos al mismo tiempo, no se me pueden escapar, es perfecto.
Agatha tragó grueso y Merry no le quitaba la mirada a Lantana, ambas tenían los nervios a punta, no sabían si funcionaria y, a decir verdad, ambas estaban sumamente cansadas para seguir luchando si es que su plan fracasaba.
– ¿Y bien? – Lantana se recompuso – ¿No vendrán a atacarme?
No recibió respuesta de ninguna de las dos. Ambas se mantenían calladas y firmes esperando el siguiente movimiento de Lantana. Esta misma se había adelantado a la situación. Una sonrisa se asomó a su rostro al notar la estrategia de sus compañeras y así mismo, dedujo lo que podía hacer para acabar con sus dos nuevas enemigas.
Lantana suspiró leve, hizo su brazo derecho hacia atrás y lanzó con todas sus fuerzas una de sus hoces. Esta recorrió varios metros hasta llegar a donde las chicas se encontraban y dando vueltas en si mismo se impactó contra las espadas de Merry que tenía Agatha, desviándola y haciendo que esta regresara a su lugar original con su portadora.
La castaña la recibió y a pesar de aun estar adolorida y con su brazo verdaderamente lastimado lanzó sus dos hoces en contra de aquellas. De nueva cuenta Agatha tuvo que frenar aquellas armas para que tanto ella como Merry no se vieran afectadas.
– ¡¿Estas bien?! – gritó Merry después de Agatha lograra desviar de nueva cuenta aquellas hoces.
– Si – susurró – Concéntrate.
Lantana se lanzó de nuevo hacia aquellas dos, esta vez empuñando sus hoces. Cuando estuvo suficientemente cerca de las dos alzó la hoz izquierda dispuesta a acertar aquel golpe. Lastimosamente en aquel momento Merry dio la vuelta de forma fugaz para encontrarse nuevamente a Lantana con la lanza que Agatha le había prestado.
Ambas chicas tensaron sus quijadas al verse forcejeadas unas contra otras. La mejilla de Lantana se había visto afectada por la navaja de la lanza, la cicatriz que tenia en aquel lugar se había vuelto a abrir, causándole un dolor horrible y una sensación de muerte inmediata.
– Maldición – murmuró cerca de los oídos de Merry, esta gimió por lo bajo y no dejó que la fuerza de Lantana le ganara.
Lantana lanzó un golpe hacia el estómago de Merry, la hizo doblar de dolor, pero sus brazos seguían manteniéndose fuertes, de su boca empezó a escurrir un pequeño hilo de sangre que hizo preocupar a Agatha, seguramente le había dañado algún órgano.
Agatha trató de atacar con las espadas que en ese momento tenia en las manos. Lantana logró esquivarlos y otro golpe más hizo doblar a Merry de agonía.
– Ja, entre más intentes lastimarme más lastimada saldrá tu amiga – dijo Lantana.
Ambas corrían un riesgo enorme; por ende, ninguna de las dos podía separarse. Lantana era extremadamente fuerte respecto al ataque cercano, pero con sus hoces era capaz de atacar a ambas de forma lejana.
– No te preocupes Agatha – dijo Merry adolorida y con una leve sonrisa – sigue atacando.
Agatha tragó saliva, no sabia si era lo mejor seguir con aquel plan si su compañera estaba siendo atacada de aquella manera. Tampoco podía perder más tiempo, en la posición donde se encontraba Merry poco le faltaba para que esta se desvaneciera.
Merry siguió batallando con Lantana a pesar de sus heridas, esta era constante y obstinada con los ataques de sus hoces sobre la lanza de Agatha, Merry se defendía con la fuerza que le quedaba para darle un poco de tiempo a su compañera, los quejidos y alaridos de parte de la azabache llenaban aquel lugar.
ESTÁS LEYENDO
Merry y los elementos "Saga Blanco y Negro"
FantasyCuando el mal aparece ella también, la tierra temblará, junto con toda la galaxia ¿te atreves a vivirlo? Merry es una estudiante de secundaria en San Francisco con un secreto tan grande que hasta ella misma desconoce, su vida dará la vuelta de 180 g...