Sueños y Dragones II
helen's perspective
Sangre. Dragones. Verde. Negro. Y muertes, sobretodo eso, lo veía constantemente en mis 'sueños' aunque no muchos lo definirían así si vieran lo que veía. Hace años que esta habilidad me acechaba sobre el futuro de mi casa, mi familia y todos aquellos que yo amaba. Mi esposo y mellizo, el príncipe Aegon Targaryen muy a menudo protagonizaba estos sueños proféticos como me gustaba llamarlos. Él era el centro de todo, y yo estaba a su lado. O eso era lo que deducía yo de estos efímeros pero duraderos sueños.
Yo sabía que era una de las pocas personas dentro de la Casa Targaryen que eran soñadores, gracias a una de mis visitas a Invernalia y que me pasé todo el invierno ahí en el Norte. Disfrutando de todas sus maravillas y placeres que ofrecían. Conocí en uno de los pueblos cercanos a Invernalia—residencia de la Casa Stark.—a una bruja, llamada Alarra Snow. Solamente por el apellido se sabía que era una bastarda de la Casa Stark, pero por su nombre, podría quizás intuir que era de uno de los miembros de la Casa Targaryen. Y sus ojos púrpuras combinados con su largo y negro castaño pelo que tenía, confirmaba mis sospechas. Era una bastarda de la Casa Targaryen y Stark, me pregunto quiénes serán sus padres. Ya que nunca me puse a preguntar.
Yo era curiosa, pero no con las cosas que ya sabía la respuesta de. Tenía mis sospechas pero decirlas en alto las convertía en realidad, así que las limite a mi mente y dejé que el tiempo de habla con esa tal bruja fuera el juez de todo.
Igualmente, cuando me desperté a altas horas de la madrugada debido a la pesadilla o sueño, como quisieras llamarlo. Todo el resto del mundo aún descansaba y dormía pacíficamente en sus camas, también lo hacía así Aegon la mayoría de las noches a mi lado en la cama que compartíamos pero nunca usamos debidamente. Él poseía un lado cariñoso y compasivo cuando estaba conmigo, reconocía que no era así con nadie más.
Pero me gustaba tener algo de él solamente para mí, era solo mío y nadie más.Como no iba salir de mis aposentos—en realidad no deseaba despertar para nada a Ser Criston por una tontería.—decidí ir al balcón medianamente grande que había en nuestra habitación. Pues era lo suficiente para que me pudiera tumbar en el suelo frío de piedra.
—Oh, Caníbal, Kostilus issa jorrāelagon zaldrīzes gaomagon daor cry, Caníbal, gaomagon daor cry issa byka zaldrīzes...—me puse a cantar en un tono de voz bajo en Alto Valyrio, era una canción de cuna para mi dragón aunque este quizás fuera hasta más mayor o fuerte que Vhagar. Pero sus fuerzas eran muy comparadas.
Yo era la jinete del temible Caníbal, dragón come dragones que se alimentaba incluso de los huevos que ponían otros dragones salvajes. Se dice que llegó aquí a la isla incluso antes de la Casa Targaryen, otros decían que no. Aunque su considerable tamaño, temible coraza, actitud furiosa y ojos verdosos maliciosos, sumando el distintivo color verde que emanaba de su fuego. Como si fuera uno tóxico, malo. Este era muy discutido como uno de los dragones más feroces y peligrosos que habían existido, no había ninguno como él por su fuego o gustos peculiares en cuanto a su dieta. Muchos murieron antes de que tuviera a su primer jinete, es decir yo. Lo reclamé uno de los días en los que mis padres hicieron visita a Rocadragón antes de Marcaderiva. Me había enfadado con mi madre y me escapé de la Fortaleza, caminé por horas sin rumbo y no sabía como debía de volver. Y me topé con la cueva de Caníbal por pura casualidad, ya que no entre con intención de reclamarlo pero él vino hacia mí. Me hizo señales que lo montara y lo hice. Así regresé a la Fortaleza de Rocadragón, a lomos del dragón más peligroso del momento.

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𝐇𝐄𝐋𝐄𝐍 𝐎𝐅 𝐓𝐑𝐎𝐘
Fanfiction𝐇𝐄𝐋𝐄𝐍 𝐎𝐅 𝐓𝐑𝐎𝐘 ||| ʜᴏᴛᴅ ғᴀɴғɪᴄᴛɪᴏɴ ❝ ¿Y si la historia de la razón por la que comenzó la Danza de Dragones no fuera por una ambición al Trono de Hierro, sino, por una mujer? ¿Y si la historia de Helena de Troya se repitiera en este mundo...