Sí, otra vez el autor chupándosela a Liu Kang

91 9 0
                                    

Los campeones de Earthrealm fueron invitados por Sindel a Edenia para celebrar la liberación del reino de la opresión de Shao Kahn. A su llegada, fueron recibidos con una ovación estruendosa por parte de los edenianos, que vitoreaban y aplaudían a Liu Kang, el héroe que había liderado la lucha por su libertad.

Liu Kang se encontraba en el centro de la atención, rodeado de admiradores que buscaban darle las gracias y expresar su gratitud por su valentía y sacrificio. Los edenianos se abalanzaban sobre él, haciendo imposible que los demás campeones de la Tierra se acercaran.

Johnny y Sonya, observando la escena desde la distancia, comentaban sobre la abrumadora popularidad de Liu Kang.

—Se siente raro que no sea yo la celebridad esta vez —murmuró Johnny, con una sonrisa irónica.

Sonya asintió, con una expresión de admiración en su rostro.

—¿Qué puedo decirte? Liu Kang se lo merece, realmente —respondió Sonya, reconociendo el mérito del monje por su valentía y determinación.

Mientras tanto, Kung Lao y Jax se abrían paso a través de la multitud, intentando unirse a Liu Kang en el centro de la conmoción.

—Parece que Liu Kang es más famoso de lo que pensábamos —comentó Kung Lao, saludando amablemente a los edenianos que pasaban.

Jax, sorprendido por la situación, se volvió hacia Kung Lao con una ceja alzada.

—¿Tú no estabas muerto? —preguntó, recordando los eventos tumultuosos que habían ocurrido durante la invasión a Earthrealm.

Kung Lao sonrió con complicidad, revelando la verdad detrás de su aparente desaparición.

—Me teletransporté en el último minuto —confesó, encogiéndose de hombros con una expresión despreocupada.

Mientras tanto, el bullicio de la multitud continuaba, llenando el aire con la emoción y la alegría de los edenianos que celebraban la victoria y la libertad que Liu Kang había traído a su reino.

En ese momento, la reina Sindel apareció junto con su hija Kitana y su leal escudera, Jade. Al ver a Liu Kang en el centro de la atención, Sindel no pudo contener su alegría y orgullo, y se acercó a él con una sonrisa radiante.

—Liu Kang, héroe de Edenia, te damos la bienvenida con gratitud y alegría —dijo Sindel, con una reverencia respetuosa hacia el campeón de Earthrealm.

Liu Kang, humilde ante las palabras de la reina, devolvió la sonrisa con cortesía.

—Gracias, reina Sindel. Es un honor estar aquí y celebrar la liberación de Edenia junto a su pueblo —respondió Liu Kang, expresando su gratitud por la cálida bienvenida.

Jade se unió al grupo, agradeciendo al campeón de Earthrealm.

—Liu Kang, gracias por traer la paz a nuestro reino. Tu coraje y sacrificio nunca serán olvidados por el pueblo de Edenia —dijo Jade, con una sonrisa sincera.

El camino hacia el palacio estaba adornado con flores y banderas con el grabado del Kamidogu perteneciente a Edenia, creando un ambiente festivo y lleno de júbilo. El pueblo edeniano continuaba alabando a Liu Kang, llamándolo su salvador y aclamando su nombre con fervor. Los gritos de "¡Liu Kang, el libertador de Edenia!" resonaban en el aire mientras el carruaje avanzaba lentamente entre la multitud.

Dentro del carruaje, Liu Kang y Kitana no dejaban de mirarse con amor el uno al otro. Sus ojos se encontraban y compartían miradas llenas de afecto y sentimentalismo, pero ambos eran conscientes de que no podían expresar su amor abiertamente debido a que Sindel aún no lo sabía. Jade, sentada cerca de ellos, intentaba guardar el secreto, observando con una mezcla de diversión y preocupación.

One Shots random de Mortal KombatDonde viven las historias. Descúbrelo ahora