La Promesa de Aria || Sonaria ||

20

El taxi me deja justo en la puerta de la casa de Trixie. Desde fuera ya puedo escuchar la música. No me esperaba encontrar tanta gente al entrar pero parece que cuando Trixie me dijo esta mañana que había invitado a toda la clase lo decía en serio... Incluso los niños de papá están aquí... Espero no arrepentirme de haber venido.

—¡Pero mira quién ha llegado! —exclama Trixie abrazándome por la espalda.

Le doy un codazo para que me suelte.

—Ya te advertí que no me volvieses a abrazar sin mi permiso —le digo frunciendo el ceño mientras ella se ríe.

—¿Y mi regalo de cumpleaños?

—No te parece suficiente regalo que haya decidido venir —le respondo.

Trixie se ríe y asiente dándome la razón.

—Voy a seguir saludando a la gente, en la cocina está la bebida, coge lo que quieras (Pero no personas) —me dice antes de dejarme sola. 

Tengo que reconocer que Trixie se lo ha currado, ha puesto luces de discoteca tanto en el salón como en la cocina, incluso ha puesto a Pedro de DJ.

Me acerco a las bebidas para tener algo con lo que entretenerme, mientras pienso en qué mierda estoy haciendo aquí... La mitad de la gente que hay aquí no me interesa o no me caen bien.

—¿Me pasas la botella de ron? —me pregunta y no tengo que mirarla para saber que es Alex.

Agarro la botella de Ron que está a mi lado y se la paso.

—¿Qué haces aquí? —le pregunto frunciendo el ceño.

—Me han invitado... —me responde encogiéndose de hombros.

—¿Ah, sí? ¿Y desde cuándo conoces a Trixie? —continúo preguntándole.

—¿A quién? —me responde con una sonrisa socarrona.

Rodeo los ojos y decido dejarla sola pero justo llegan Starlight y Sonata, cortándome el paso.

—Hola —me saludan.

Ambas me sonríen. Por la manera en que me sonríe Starlight apostaría lo que fuera que Sonata le ha contado que le pedí perdón.

—Hola —les saludo de vuelta.

—¿Qué queréis de beber, chicas? ¿Ron, ginebra...? —les pregunta Alex acercándose más a Sonata.

—Ron —responde Starlight y Alex le pasa la botella.

—Yo no suelo beber alcohol... —responde Sonata.

— ¿Cómo qué no? —Exclama Alex alzando sus cejas — Eso no puede ser... Anda ven que te eche algo... —dice agarrando un vaso vacío con hielo y la botella de ron que acaba de soltar Starlight.

Sonata la mira pero no dice nada.

—Te ha dicho que no bebe alcohol, ¿qué no entiendes de esa frase? —le pregunto, molesta.

—Está bien, porque me beba uno no pasa nada —la defiende Sonata sosteniendo la bebida a medio preparar.

Alex me mira triunfante mientras continúa preparando la bebida de Sonata y siento como me comienza a hervir la sangre. Starlight agarra mi mano y me saca de allí. Una vez en el salón, Starlight me suelta y me mira fijamente.

—¿Qué acaba de pasar ahí? —me pregunta entrecerrando los ojos.

—Nada —respondo relajada.

—Pues no lo parecía... Parecía más bien que estabas bastante molesta —me informa, como si yo no lo supiera...