Capítulo XV: Valor.

205 23 10
                                    

Cuando Kyle llego a la escuela, venía platicando muy animadamente con Wendy sobre su aventura con el gordo anoche.

-Vaya, me dio mucha risa como chillaba Cartman por las agujas. -Decía entre bromas la pelinegra. -Quien lo diría.

-Eric es un hijo de puta. -Respondió entre risas Kyle. -Pero a veces solo hace lo que hace para darse a respetar y que no vean lo débil que es.

- ¿Lo aprecias?

-Creo que mucho más que a ya sabes quién. -Le susurró lo último mientras le guiñaba el ojo y esta le devolvía el gesto en una sonrisa cómplice. -Nos vemos para el proyecto.

-Claro. -Y es que el proyecto era en 3 días por lo que todo el mundo estaba trabajando en eso.

Kyle camino hasta su casillero sin ningún problema, hasta que se topo con Stan quien lo veía con una ceja alzada.

- ¿Llegaste con Wendy? -Aunque era una pregunta, la verdad es que su voz sonaba tan enojada que parecía una afirmación. - ¿Qué no teníamos un trato?

-Le rompí una costilla a Eric por tu culpa, es increíble que ese maldito culo gordo tuviera mejor empatía que tú ¿no crees? -Contratacó Kyle con una sonrisa burlona y hastiada. -Con un maldito narcisista tengo ya.

- ¿Qué estas tratando de decir? -Stan no entendía ahora nada. - ¿Qué?, ¿Terminas conmigo?

Kyle se quedo viendo a Stan, no estaba decidido a lo que iba a hacer, pero ya no podía más, alguno de ellos debía dar el ejemplo, alguien debía hacer ver que uno era más importante que la persona que tenía a su lado, el amor propio es lo más importante y lo estaba perdiendo con Marsh.

-Te amo. -Fue lo primero que pronunciaron sus palabras y quedo un silencio casi sepulcral por algunos segundos. -Tú no me amas ¿verdad?

Marsh solo bajo sus brazos y agacho la cabeza, esa actitud prepotente y mamona empezó a desaparecer con esas palabras que le dieron un golpe de realidad, uno que evitaba a toda costa.

-Sería mentira decir que te amo, pero al mismo tiempo no puedo negar que siento algo por ti. -Fue la mejor contestación que se le ocurrió. -Me gusta estar a tu lado, eres la parte racional de mi cerebro, pero no sabría si te amo.

-Nunca te diste la oportunidad Stan. -Eso si lo pudo asegurar el judío. -Tú no sabes estar solo, tú no tienes idea del concepto del amor y tu no sabes cuidar el corazón de las personas.

- ¿Fue lo que ella te dijo?

-Fue lo que tu me demostraste. -Kyle solo suspiró mientras veía fijamente esos hermosos ojos azules que tanto le gustaban, pero que no debía seguir ahí, por su propio bien... - Yo... yo no quiero ser más tu novio, termino contigo.

La cara de Stan fue un poema, incluso Kenny que iba pasando por ahí se detuvo a ver la situación de sus amigos, los cuales solo se veían con diferentes emociones en el pecho.

- ¿H-hablas en serio? -Claro que el pelinegro no se iba a quedar asi nada más, sus ojos en forma de cachorro le hicieron sentir un fuerte dolor en el pecho a Kyle, pero no iba a ceder, no iba a volver a caer y, como Cartman le dijo, debía pensar en él. -Se que no soy la mejor pareja, pero...

-No hay pero que valga... yo... joder yo... -Las Lagrimas caían y las palabras se atoraban en los pensamientos del pelirrojo. -No es justo estar en una relación donde no te aman, no es justo para ti estar en una relación que no quieres. Stan siempre fuimos mejores amigos, no debimos cambiar eso...

Kyle recordaba cuando se confesó y suspiro, también había sido su culpa.

-Cuando Wendy te dejo y estuviste con los góticos, yo en vez de actuar como mejor amigo, actúe como el chico enamorado que veía por fin su oportunidad. Nunca quisiste estar conmigo, yo solo me metí y quería que me amarás como lo hacías en mis sueños, pero... esos eran mis sueños, no los tuyos.

Todo el mundo que veía la escena se quedo en silencio, Kenny iba a hablar, pero la mirada de Kyle le hizo ver que se callará y prefirió salir a buscar a su propia pareja.

Por otro lado, en la enfermería donde estaba Pip cuidando a Butters de su desmayo, Clyde llegó corriendo a ver al chico pues mando un mensaje el rubio de boina al grupo que tenían que Leopold se había puesto mal.

- ¿¡Cómo está!? -Grito el chico llegando sin falta de aire y respirando pesadamente ante la mirada de Pip y Damien. -oh, H-hola Da...Damien.

No era secreto que la mayoría de los alumnos del temían al nuevo rey del infierno y Clyde claro que no era una excepción.

-Donovan. -Respondió secamente cosa que no se le hizo nada nuevo al castaño. -Viendo que ya están acompañados mutuamente, me retiro...

-S-sí, claro... yo los cuidaré bien.

-Dudable. -Thorn dio un visto al chico y solo rodó los ojos, pero se volteo a ver a su prometido quien ya sin la adrenalina solo esperaba no morir de formas horribles hoy. -Phillip, debo hablar contigo en la noche, haz lo que quieras, pero a las 10 te veo en el infierno.

Dicho lo anterior, Damien desapareció en una cortina de humo dejando a todos impactados, de verdad eso era nuevo en aquel chico y Clyde no dudo en voltear a ver a su rubio amigo consciente que solo suspiraba pesadamente.

-Vaya, eso es nuevo ¿Paso algo?

-Le dijo como me sentía por primera vez. -Contesto muy apenado Pip. -No he de saber, mi estimado amigo, si fue la mejor decisión que pude tomar, pero debo de admitir muy a mi pesar que me quito en su momento un insostenible peso de encima.

-Yo creo que tuviste mucho valor ¡felicidades Pip! -Clyde se abalanzó a abrazar a su amigo orgulloso de él, cuando en la camilla Leopold empezó a abrir los ojos.

- ¿Clyde? -Le costo un poco enfocar su vista hasta ver a sus dos amigos enfrente de él. - ¿Dónde estoy?

-Que bueno que estes despierto, estimado amigo. -Hablo Pip aliviado mientras le agarraba la mano al otro rubio. -Caíste de una forma muy precipitosa, si no es por la rapidez y gracias del amigo Michell pudiste haber sufrido un daño mayor.

- ¿Mitchell? -Clyde no estaba al tanto de la situación, el también lidiaba con sus propios demonios. - ¿Quién es Mitchell?

-En estos momentos, mi apoyo emocional más fuerte. -Leo no iba a ocultar que, en tan pocos días, Mitchell se estaba volviendo alguien indispensable para él. -Me ayudado a saber quién es Tammy.

- ¿Y quién es ella? -El castaño se sentía en las mismas.

-La supuesta nueva novia de mi novio. -Esa afirmación dejo a los dos amigos helado, mas por el frio de las palabras de Butters que sonaban como si hablará de una bestia. -La cual debo conocer.

- ¿Cómo harás eso?

-Espero que Mitchell me ayude también en esto. -Butters se paro de la camilla recordando como los brazos del gótico lo sostenían, además de darle tanto alivio y valor para lo que estaba a punto de hacer. - ¿Quieren venir?

Pip y Clyde se voltearon no muy convencidos, pero decidieron seguir a Butters, sin antes Clyde mandándole otro mensaje a Tweek... ¿Todo estará bien?






¿El fin del Style? No lo sé bro, chance si, chance no XD 



Problemas del corazónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora