Clyde despertó sin Token a su lado ¿Había siquiera ido a dormir? No le dio importancia a pesar de que su corazón se apretó ante la idea de que ya le estaba sucediendo lo que le pasaba a Leopold.
-No seas idiota Clyde. -Negó con la cabeza, Token era todo menos infiel ¿verdad? Mejor se apresuró a cambiarse e irse de aquella casa.
Tuvo suerte al inicio al no encontrarse a nadie, sin embargo, antes de cruzar la puerta Steve Black, el padre de Token lo interrumpió. Entre todos los de esa familia, era el único que lo trataba como un ser humano.
-Hola Clyde ¿Cómo estás? -El castaño maldijo, aunque lo tratará con mas decencia, igualmente no lo quería en esa casa.
-Hola Sr. Black, estoy bien, me preparó para ir al trabajo. -Aseguro el chico deteniendo su huida y acercándose al comedor, donde solo estaban ellos dos.
Steve asintió mientras le ofrecía una manzana al chico y por cortesía el aceptó.
-Lo sé, trabajas todos los días porque es agobiante estar en un lugar donde no te parecían ¿verdad? -Clyde no contestó. -Yo se que mi esposa no es la mejor persona contigo, me disculpo por ella. Pero tienes que entender que lo único que queremos es que Token este bien y viva como nosotros lo hemos hecho... algo que no tu no podrías darle.
El hombre hablaba con voz tranquila y protectora, sin embargo, sus palabras le calaban a Clyde.
-Yo...
-No me digas nada Clyde, yo se que lo amas, pero piénsalo ¿Lo amas lo suficiente para dejarlo ser feliz a él? -Nuevamente Clyde solo agachó la mirada sin saber que decir. -Te lo dejó de tarea, ve a trabajar y suerte en tus cosas.
-Gracias Sr. Black, igualmente. -Clyde salió casi corriendo de ahí, cuando llego a la cafetería solo estaba Helen y Richard Tweak que, al verlo, ambos sintieron un nudo en el corazón.
Helen y Richard conocían la historia de Clyde, le habían dicho desde hace mucho que dejará esa casa y se fuera a vivir con ellos, que ellos lo amarían y cuidarían como un hijo más, que no fue su culpa, que estaban de su lado.
Pero Clyde no quería serle una carga a los únicos adultos que todavía confiaban en él, ya le había pasado con los padres de Craig que aunque le decían que era bienvenido, la verdad era que Thomas no se creía el cuento de que la muerte de su madre no era su culpa y eso lo derrumbó en su momento.
Tuvo suerte que los Black lo aceptarán y no iba a destruir a los Tweak, no quería ser una carga más de lo que ya era, merecía lo que tenía por lo que le hizo a su madre (o al menos, eso pensaba él).
Helen vio entrar a Clyde casi llorando y rápidamente fue a abrazarlo, diciéndole que no pasaba nada, que fuera fuerte, que ella lo quería. Rápidamente Clyde reaccionó y se aferro a la castaña llorando más, mientras Richard preparaba el desayuno del chico y lo veía con una cálida sonrisa, sabía que el día iba a ser difícil.
-Tranquilo hijo, cuéntanos que paso. -Le dijo con una sonrisa Helen buscando la mirada de Richard quien asintió...
Por otro lado, Butters también estaba pasando una mañana horrible.
Había llegado ayer en la noche con muy pocos ánimos, tuvo bastantes pesadillas y esa mañana no se sentía realmente bien, sin embargo, al bajar las escaleras se dio cuenta que las cosas efectivamente no estaban bien.
-No llegó a dormir, ¿verdad mami? -A Leo le dolían muchas cosas, pero nada como ver a su dulce madre con los ojos hinchados llorando por su padre.
Quien debía estar en un hotel con un hombre cualquiera en estos momentos, como siempre.
-Yo...es... una... persona...ocupada. -Su madre gimeaba, estaba totalmente destruida, era casi todos los viernes desde hace un par de meses lo mismo y su madre no mas seguía sufriendo igual. Yo... ¡Me esforzare! Hay que pintar la casa Butters, ayúdale a mami a pintar la casa hijo.
La mujer estallo en llanto y Leopold no aguantó más para abrir sus brazos y sentir como su madre se abalanzaba a llorar con su hijo, le dolía verla así, pero la entendía, entendía que su madre también estaba pasando lo que él pasaba, el creer que las cosas iban a cambiar y no ver para cuando.
Después de unos momentos se tranquilizó la mujer y la dejó más calmada.
-Iré a hacer el desayuno mami, quédate aquí. -La mujer asintió a las dulces palabras de su hijo y este se paró de la sala donde estaban y fue a la cocina a hacer unos huevos revueltos justo cuando le llegó un mensaje de Kenny.
"Hola guapo, ¿cómo amaneciste?" -Butters solo rodó los ojos y no contestó, llegándole un mensaje después. –"¿Quieres ir al cine hoy?"
- "Hola Kenny <3, no puedo al rato me reuniré con Kyle para hacer nuestro proyecto... Stan está libre." -Sugirió Butters con una media sonrisa, sin embargo, las palabras dichas por las chicas le retumbaban en su mente ¿Quién es Tams?
- "Okay, cuídate bebé... te amo <3" -Vil mentira pensó el rubio, sin embargo, solo contestó con un corazón y un emoji de besos y llevo la comida a su mamá que ya estaba sentada en la mesa viendo el florero con... ¿¡Flores amarillas!?
-De... ¿De dónde sacaste eso? -Butters casi se le rompe el corazón nuevamente.
-Me las encontré debajo de tu cama haciendo quehacer, aun pude salvar unas pocas... ¿Kenny te las volvió a regalar? -Butters asintió mientras dejaba la comida enfrente de ellos y las sacaba de su vista. - ¿Qué significan?
-Lo mismo que tus chocolates mamá. -Linda vio a su hijo a los ojos y suspiro, ahora siendo ella la que abriera sus brazos para abrazar a su hijo.
Stephen siempre le compraba chocolates a Linda de la nada, sin embargo, días después de esos chocolates el hombre no llegaba a dormir y ya sabían ambos porque... de todas formas, ahora Linda ya odiaba ese sabor.
-Lo siento mucho, mi niño...
-Yo también mami. -Hijo y madre se abrazaban con fuerza, ambos intentando sanar el corazón del otro.
Una vez acabado eso ambos se dispusieron a desayunar y después de eso fue Leopold quien se fue a casa de Kyle a empezar el proyecto mientras llevaba consigo algunas cosas que sabía le podían servir.
Mientras iba caminando se encontró a Stan, cosa que le asustó.
-Hola Butters. -El chico se veía enojado, eso era mala señal. - ¿Con quién están haciendo el proyecto de ciencias? Se qué estas con Kyle, pero me llegó un rumor algo...desagradable.
-Hola Stan. -Fue lo primero que dijo con su voz temblorosa. -Yo... bueno... ahm... ¿Por qué no le preguntas a Kyle?
Stan se quedó viendo al chico y sonrió maliciosamente.
-Dime el nombre y te digo quien es la puta con la que se está acostando Kenny. -La cara de Leopold paso de estar roja de los nervios a estar roja de la furia, maldito imbécil.
-Púdrete Stanley. -Dijo furioso. -Ve a preguntarle a tu novio y deja de joderme.
Stan no se esperaba esa reacción, por lo que el rubio aprovecho la reacción del chico para salir huyendo a la casa de Kyle.
Esto era nuevo para Butters, había algo claro de esa conversación y es que la nueva relación de Kenny estaba siendo mas enserio que las demás, lo cual no sabía bien como tomar.
Siempre ponen a Laura como alguien malo, en este fic LES JURO que terminarán amando a LAURA, lo prometo!!!!!!
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Problemas del corazón
Fanfic¿De verdad creían que con estar en relación con el hombre de su vida significaba el felices para siempre? ¡Qué ilusos! Si, fue difícil llegar hasta donde estaban, pero aún faltaban muchos retos que descubrir sobre si mismos y sobre su amor propio y...