Capítulo XXII: El fin de todo (I)

195 27 5
                                    

Clyde estaba acabado, lo sabía no tenía forma de hablarle a nadie porque ni siquiera tenia celular, de igual manera sus manos estaban atadas y si gritaba nadie lo escucharía por lo profundo que era el sótano, lo conocía había ido una vez con Token abajo por unas cosas cuando se quedaba a pijamadas, antes de todo.

¿Dónde estaba la linda mujer que siempre los trato bien cuando eran niños? No podía creer como es que se había vuelto un maldito monstruo psicópata que solo pensaba destruirlos, era tan surreal para su cabeza...

Pero ¿qué no era surreal en su mundo? Digo hasta el mismo demonio Satanás había ido un par de veces y su hijo... ¡SU HIJO!, ¡Damien y Pip!, ¡UN PORTAL!

Empezó, aun llorando por el dolor, a frotar rápidamente sus manos con la soga, ocasionando que mas sangre cayera y, por la forma que estaba tirada en el suelo una de sus manos si tenía contacto con el mismo que le sirvió para empezar a ser el pentagrama.

Dolió mucho, no sabía si lo estaba haciendo bien, lo había hecho una vez con Tweek y Kyle, pero los jeroglíficos eran específicos y difíciles de hacer.

Casi a punto del desmayo sintió la sangre hervir, bueno esa era buena señal, eso significaba que había llamado algo... espero que fueran sus amigos pues cayó inconsciente apenas se abrió el portal.

Pip y Damien estaban en su recamará, después de aquella plática Pip por fin podría disfrutar de la tranquilidad después del sexo, de ser abrazado al acabar y hubiera sido perfecto unos minutos más si no es que un portal empieza a figurarse encima de ellos.

-Me lleva la... -Damien estaba harto de ser llamado por los humanos para estupideces, sin embargo, las reglas eran las reglas y debía partir a ver que querían ahora los humanos como para invocarlo. -Aguanta aquí Pip.

-Si. -El chico contestó feliz mientras el rey del infierno se ponía su ropa y con pesar cruzaba el portal.

Era un sótano, típico, siempre eran sótanos y azoteas a obscuras. Ni siquiera pensó mucho y salió del infierno con la frase de siempre.

- ¿Quién osa llamar a...? -Cuando abrió los ojos se dio cuenta que algo estaba mal, no había velas ni un pentagrama grande, si no que era uno muy pequeño y el chico estaba atado a la silla inconsciente... - ¿Clyde?

Damien se percató de si era el chico y se asustó más cuando vio las heridas tan pronunciadas que tenía ¿Qué demonios le había pasado? Volteo a ver el pentagrama y se dio cuenta que se había equivocado en algunos símbolos y que, como no invocaba un dios exacto por eso lo mandaron a llamar a él, pero lo más seguro es que buscaba a Pip.

-Mierda. -Desato sus manos y lo coloco mejor en le piso para examinarlo, estaba muy mal.

No lo pensó mucho y decidió abrir de nuevo el portal justo con Pip, el cual también se había vestido, pero para ir a comer algo y se sorprendió de la cara que su pareja tenía.

- ¿Pasa algo?

-Phillip quiero que te tomes con calma lo que va pasar a continuación. -Damien no era tonto había escuchado pasos arriba de la casa y suponía que estaba en peligro Clyde y no podía llevárselo al infierno en esas condiciones, moriría y condenaría su alma. -Ven conmigo y no vayas a gritar al verlo.

- ¿A ver a quién? -Pip no entendió bien, pero una vez que cruzo tuvo que taparse la boca rápidamente para no gritar al ver a su amigo Clyde en esa condición, mientras las lágrimas empezaban a acumularse en sus ojos. - ¿Quién le hizo esto?

-Apuesto que la persona que esta arriba, pero no puedo hacer nada para sacarlo, necesitaremos ayuda... llama a tus amigos y yo le aviso a los demás. -Pip no dudo en obedecer a Clyde empezando a mandar mensajes y la ubicación de donde estaban, mientras se acercaba a ver a Clyde y tocarlo con sumo cuidado.

-Tranquilo mi estimado amigo, te prometo que te vamos a ayudar...

Cuando Kyle recibió el mensaje de que Clyde había sido severamente golpeado y la ubicación para ayudarlos, ni siquiera lo pensó dos veces y cogió su número en busca de una persona.

-Estoy ocupado, rata. -Eric Cartman era la mejor persona para solucionar un problema de este tamaño, ya que siempre estaba listo a matar a quien fuera y salirse con la suya.

-Secuestraron a Clyde y lo golpearon brutalmente. -Leyó tal cual el mensaje que había puesto Pip en el chat. -Necesito que vayas a esta dirección conmigo para salvarlo, por favor.

Unos minutos de silencio se escucharon del otro lado antes de un suspiro de Cartman.

-Corre, te alcanzó allá... ya vamos Heidi y yo.

Por otro lado, Butters quien estaba acostado aun en la cama de Mitchel desnudo no procesaba su mente completamente que acaba de hacer, empezando a sentir la culpa a todo lo que daba en su corazón, sabiendo que la había cagado, que no había ya vuelta atrás después de esto, que era igual que él...

El mensaje de texto lo alerto, agarrándolo con pesar, pero al leer lo que había mandado Pip, se incorporó rápidamente de la cama en un salto y se empezó a vestir como desquiciado.

- ¿Qué pasa Leo? -El salto asustó a Mitchel al igual que ver la cara blanca de Leopold.

-Algo le paso a Clyde, debo llegar a la dirección de mi celular ya. -Aseguro Butters haciendo que Mitchel agarrará el celular de su ahora amante y viera el sitio.

-Yo te llevo. -Butters al inicio quería negarse, sin embargo, sabía que el chico tenía una moto y quería llegar lo más pronto posible. -Te juro que me voy en cuanto te deje, no quiero que te pase nada por ir corriendo.

-S-sí, está bien. -Leo agradeció con una sonrisa, por mas que quisiera sentirse mal por haberse acostado con él, no podía.

Y en el caso de Tweek, este estaba dormido abrazado a Craig, ambos habían tenido malas noches por culpa de su malentendido y, cuando llego el mensaje de Pip Craig fue el que agarró el celular de su novio hasta que leyó lo que decía.

- ¡Puta madre! -El grito y el salto de Craig asusto a Tweek que solo se levanto de un brinco mientras gritaba como loco, asustando no solo a Craig, si no a los padres de Tweek que acababan de llegar.

- ¡Hijo! ¿Qué su...? ¡Craig! -Helen y Richard subieron rápido al cuarto de su hijo y al ver a Craig sintieron un enorme alivio, pero la cara del chico era de espanto y eso los asustaba.

- Es Clyde, dice tu amigo de la boina que esta mal herido y debemos ir para allá. -Avisó Craig cosa que alertó a los Tweak, siendo Richard el primero en bajar a prender el auto para ir por el chico, mientras Tweek veía la dirección y palidecía.

-Craig. -Tucker volteó a ver su novio que tenía cara de asombro. -Esta dirección es la casa de Token...




Problemas del corazónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora