۰ ۪۪۫۫·ꨄ Otra oportunidad para amar ꨄ ۰ ۪۪۫۫·

CAPÍTULO 3

Pov's Enji

Izuku me dirigió una mirada, dándome a entender que empiece con lo que tenía planeado decir. lo comprendí rápidamente tomé algo aire para calmarme, antes de mirar a mis hijos a los ojos, quienes esperaban pacientemente a que hablara.

--Bueno, la razón por la que los reuní aquí es porque..--sentía los nervios recorrer mi cuerpo casi queriendo enmudecerme, pero pese a lo pesados que sentía mis hombros continué hablando--Quería pedirles disculpas por todos estos años de sufrimientos que les hice pasar debido a mi comportamiento de querer hacer que superen a All Might, se que puede que hayan pensado que soy la peor escoria del mundo y me lo merezco, no soy quien para exigir que me vean de una manera diferente cuando realmente lo fui, pero realmente quiero que sepan que quiero cambiar para ser la familia unida que debimos ser desde un inicio, quiero ser un verdadero padre para ustedes y obtener su perdón, aunque me tome años lo quiero lograr, porque aunque ahora no me crean son mis hijos, mi sangre y los amo con todo lo que tengo a pesar de no demostrarlo, espero me den esta oportunidad y les prometo que daré todo de mi para no fallarles de nuevo.--Mantuve mi mirada baja mientras esperaba en silencio alguna respuesta por parte de mis hijos, si ellos decidían no darme una oportunidad definitivamente dolería pero no me rendiría en conseguirlo quiero que mis hijos tenga una familia, de verdad, mis pensamientos se detuvieron al sentir unos brazos rodearme en un apretado abrazo y lagrimas mojar mi camiseta.

--No te perdonaré de nuevo si esto resulta ser una farsa y regresas a tu tonta actitud de antes papá-- dijo Fuyumi dificultosamente entre el llanto y los hipidos que provocaban este, al abrazo se le sumo Touya y Natsuo.

--Supongo que podemos darte otra oportunidad... papá, será algo diferente a lo que estamos acostumbrados pero podemos hacerlo, ¿Verdad, Natsuo?

--¡Si!, gracias por esto papá, pensé que solo vería esto en sueños.

--Daré mi mayor esfuerzo por ustedes... mis niños--dijo apretando el abrazo y recibiendo una queja de Touya en el proceso.

--No somos niños viejo, el único niño aquí es Shoto que tiene 12, yo tengo 15 no soy  -- fue callado por Fuyumi de un sape--De ti ni hablar Fuyumi, tienes 16 estas vieja- recibió otro sape.

--Cállate, arruinas la atmósfera--dí una risa nasal por la pequeña batalla de mis hijos para luego dirigir mi mirada a Shoto, quien solo miraba al suelo sin emitir ningún sonido.

--Shoto, hijo, Se que esto no es fácil para ti, fuiste a quien más presioné y atormente desde la infancia, es comprensible y aceptable que no me quieras dar una oportunidad, pero al menos dame una respuesta por favor.-- supliqué un poco, para ver como poco subía la mirada lentamente, pude ver sus ojitos rojos tratando de no soltar ninguna lagrima y sus labios fruncidos aguantando el llanto.

--¿Prometes...no volver...a lastimarnos...papá?--dijo entrecortadamente mientras conectamos miradas.

--Te lo prometo hijo, si lo hago puedes golpearme todo lo que quieras-- dije mientras le daba una gran sonrisa y abro un poco más mis brazos invitándolo a que se una al abrazo familiar, inmediatamente él se tira encima de nosotros recibiendo un quejido por parte de Natsuo en el proceso y me dedico a abrazarlos a todos sintiendo como toda la pesadez que tenia hace unos momentos se va dejando en su lugar un sensación liviana, cálida y reconfortante, permanecimos unos segundos más así, para luego separarnos poco a poco. Inmediatamente todos volteamos al escuchar unos sollozos, encontrándonos con Izuku que lloraba a moco suelto mientras se limpiaba las lagrimas con sus mangas tratando de calmarse.

--Lamento interrumpir el momento, es que me inundó la tristeza y luego me dieron ternura...y...y.. ¡lo siento!--terminó gritando para seguir llorando, no pude reaccionar para cuando Fuyumi jalo a Izuku del brazo para unirnos a todos en un gran abrazo, hasta el mismo Izuku se sorprendió pero el llanto pudo más y siguió llorando unos minutos más, hasta calmarse y recién nos separamos, todos volviendo a sus lugares correspondientes.