Las lágrimas de tu familia y el dolor de tu madre, se volvió mi dolor, Llore tanto por ti, que mis lágrimas se convirtieron en tu carne, tu sangre y tu alma, fue entonces cuándo abriste los ojos"
La historia se encuentra situada después de las pelíc...
Aviso: el capitulo es bastante largo, traigan un cafecito.
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28 Miedo cegador
En camino hacia la inmensa jaula de acero y concreto, uno a uno los últimos destellos anaranjados del atardecer parecían extinguirse bajo sus pisadas, dejando la noche en su lugar. Dudosa, se detuvo un poco antes, parada al borde de la entrada vio pensariva el interior del edificio, mientras dos hombres le apuntaban con las armas. Atravesados en cuestión de segundos por Neytiri y Neteyam. Una hazaña realmente impresionante ya que ambos se encontraban a la lejanía.
Neteyam mando a sus dos mejores guerreras a cubrir a Rey'eng, su madre e Ikeyni. El paso hacia el sótano fue tan sencillo que las expectativas sobre las habilidades de combate de la gente del cielo se vieron rebajadas.
—No subestimen al enemigo nunca—pidió Rey'eng.
Era fácil seguir el rastro de cadáveres a su paso, en poco tiempo llegaron al piso de las Tsahik, al llegar al lugar parecía abandonado lo que las dejó un poco preocupadas. Se separaron para hacer busqueda y se encontraron con que aquel piso se encontraba realmente vacio, algo que fue bastante raro y ninguna tenia buen presentimiento.
—Ma jake—dijo Neytiri por su comunicador—esta vacío no hay nadie.
A Jake esa sola explicación fue suficiente para advertirles que seguramente estaban en peligro y que debían salir rápido de ahí. Jake ansioso se acercó a Neteyam que había casi terminado de apaciguar la enorme barrera de fuego, que había hecho la gente del cielo.
Al avisarle a Neteyam decidió volver hacia Rey'eng pero ir hacia ella se volvió una tarea titánica debido que el y Äzan eran el blanco de todo ataque.
Misiles, balazos, le estaban tirando todo el arsenal a Neteyam intentando derribarlo de el Kimeratan, pero ademas de un molesto ruido en sus oidos y luces molestamente destellantes no habia mas problema, pero incluso un insecto podria ser difícil de manejar en colmena.
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—Hay que encontrarlas pronto...—pidió Rey'eng ansiosa.
Pero por fin, en lo más profundo de ese piso, en una pequeña sala, las encontro. Sentadas en el piso unas sobre otras por el poco espacio y completamente asustadas y agotadas, las Tsahik voltearon a ver a Rey'eng mientras ella intentaba romper la puerta sin mucho éxito.
El agudo llamado de Rey'eng alertó a Neytiri e Ikeyni que llegaron rápidamente para ayudar con el cristal pero era muy difícil de romper incluso fya'onrr que al verlas, intento ayudar embistiendo contra el vidrio con su caparazón duro y puntiagudo; no pudo penetrarlo. Neytiri les dijo que buscarán algo para romperlo, pero cuando planeaban empezar a buscar pasos humanos se oyeron acercarse corriendo. Ikeyni reaccionó mas rápido que el resto y ya había lanzado una flecha a donde aparecería el humano; pero la persona que las había seguido era la Dra. Tanaka.
