[30]Cada día se vuelve más confuso.

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Leo

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Leo.

Estar con Aisha (mi hermana) es super divertido, ella es una niña muy inteligente y para su edad está muy avanzada. Si ella de verdad fuera más de mi sangre seguramente sería más inteligente, ahora se la lleva muy bien con mi madre y pues yo sigo intentado adaptarme al cambio en la casa.

Mi padre ahora está como que más serio, después de lo ocurrido siente miedo a que salga con la niña y eso no le afecta en nada, la niña esta a salvo conmigo yo puedo defenderla de cualquier cosa.

Mi madre hoy si fue a trabajar por esa razón quería ir con ella para ver a Aisha pero no, ella no quiso que fuera aunque si ella no me dejaba ir yo igual iría.

De todas formas tenía que decirle a Aisha si me dejaba ir a verla, ahora tengo que esperar a que ella salga.

Mi padre digamos está distante conmigo desde lo de anoche, pareciera como si yo fuera hecho algo malo. El está sentado en el comedor mientras que yo me sirvo una taza de café.

—¡Papá!—Lo llame—¿Que tienes conmigo ahora?.

Me voltee y este frunció el ceño como si no entendiera a lo que me refiero.

El toma su taza de café y me responde.

—No nada hijo..., ¿Por qué la pregunta?.

Suspire y camine hasta sentarme al frente de él.

—Te lo digo porque estás serio y no me dejas pasar mucho tiempo con Aisha—Le dije tomando un sorbo de café.

El hizo lo mismo que yo y chasqueo la lengua.

—No, no es nada contigo al contrario.., te veo y pienso que deberíamos tener más tiempo juntos tu y yo.

Fruncí el ceño y deje de mirarlo.

¿Pasar tiempo con él? Ni de coña, sería el peor día de mi vida estar con el, sus gustos son horriblemente diferentes a los míos. A él le gusta la música de viejos a mi me gusta la música que medio mundo odia.

—Perdoname papá pero estoy muy ocupado y no puedo hoy..., si me disculpas tengo que salir—Me levanté de la mesa y este no dijo nada.

—¿Vas a ir en la moto?.

Lo mire confundido.

—Si ¿Algún problema?.

—No pero quisiera que te fueras en la Jeep...., así estaria mas tranquilo.

—¿Te preocupa que salga con mi moto? Papá yo sé cuidarme solo ya tengo varios años manejandola no corro ningún riesgo—Me enoje.

—Hijo no es que no quiera que tengas tu moto solo quiero que estés seguro.

—No papá yo estoy bien con mi moto asi que no me llevaré la Jeep por más que me obliges no lo voy a hacer—Me di la vuelta y camine hasta la sala.

No tendría a donde ir pero necesitaba salir un rato, así que salí de la casa. Camine hasta la moto observé todo el lugar respire hondo y me decido en montarme en la moto, la encendí y arranque.

Sali directo a la universidad de Aisha no me importaba si ella estuviera en clases o no, solo voy a allá porque mis manos decidieron ir allá.

Las manos en el manubrio, los pies en los pedales y mi mente en las nubes.

¿Que estoy haciendo? Siento que estoy haciendo algo mal pero no sé que es, mi mente tiene esa sensación de que estás haciendo algo incorrecto pero por más que busque y analice todo lo que haga no se que es.

¿Es por qué volví a hablar con Aisha? ¿Es por qué la perdone? ¿Es por qué no me siento seguro de mis sentimientos hacia ella?.

Nunca me dí cuenta que ya estaba en el estacionamiento de la universidad, me quedé mirando por un rato el grande campo que tiene al frente súper espacioso. El viento me golpeaba la cara a cada rato pero no me percate de que alguien me miraba, me voltee para encontrarme con alguien que ahorita no me está callendo bien del todo.

—¿¡Leo!?—Dice una voz femenina.

—Hola Marlyn...., ¿No deberías estar en clases con Aisha?.

Ella bufa—Sabes Aisha y yo no todo el tiempo estamos juntas..., ella tiene clases mientras que yo ando aburrida porque mi profesor le dió la gana de no venir—Me explica como si me importará.

Rodee los ojos—Bueno..., y....

Me interrumpe—¿Que haces aquí?.

Me quedé en silencio.

¿Que le digo? ¿Que vine solo por qué mis manos no tenían control?.

—Aaam bueno solo pasaba por aquí y quise...

Me vuelve a interrumpir—¿Viniste a ver a Aisha?.., ¿Que no se iban a ver en su casa?.

Hhhm...

—Mira no le vallas a decir a ella pero no se si pueda ir a su casa—Miento y es horrible—. Por favor no le digas nada se que soy un idiota al decirte esto pero no quiero que ella se ponga triste.

—Sabes que igual se pondrá triste—Baja la cabeza y suelta una risita—Sabes que si le vuelvo a ver una sola lágrima a Ai en sus hermosos ojos iré por ti Leo y no seré yo sola.

¿Me tengo que sentir amenazado?.

Creo que si.

—¿Tu y quién más?—Pregunte un poco incómodo.

—Aisha, Gabriel y yo.., si estuviera Alma ya estuvieras quemado desde el principio.

Me quedé callado pero fui salvado por el sonido de una llamada en mi teléfono, le hice un seña a Marlyn para que me diera un minuto.

Tome mi teléfono y contesté.

—¡Alo!.

—Leo soy tu padre quería que guardarás mi número..., y Aisha quiere que vuelvas dice que quiere pasar el día contigo.

—Dile que ya voy y que haga palomitas..., y no voy a guardar tu número ni loco lo haría.

—No te voy a obligar pero es para que cuando tengas problemas me llames a mi directamente.

—Aja ya me tengo que ir Adiós.

Colgué, no espere respuesta de él, mire a Marlyn quien estaba con el ceño fruncido.

—Veo que no aprendiste la lección de no usar tu moto—Dice pateando una roca en el suelo.

—¿Cuál lección? Eso fue un accidente y ya.

—Aja..., bueno Leo ya sabes—Ella se da la vuelta y camina hasta las escaleras de la universidad.

Yo solo arrugue las cejas y encendí la moto para ir a la casa de nuevo.

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