[1]Esto es una locura

96 12 0
                                    

Aisha

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Aisha.

Todo comenzó cuando estaba en el penúltimo año de la universidad de leyes, estaba tan concentrada en las clases porque sabía lo que quería ser y quería disfrutar cada momento pero todo se fue cuando un chico fue a la universidad para ver a su madre quien era mi profesora, el chico se veía de la misma edad que yo. Solo pude ver que tenía el cabello liso color marrón claro, sus ojos eran marrón con una mezcla de verdes y el cuerpo bien definido a primera vista es muy bello.

Pero no duró mucho estando allí, porque solo iba a decirle algo a su madre y se retiraba. Cuando salí de la universidad intenté buscarlo pero lo único que hice fue perder el tiempo...

Unas semanas más tardes después de tanto buscarlo lo ví en una librería leyendo un libro,decidí entrar para verlo de cerca. Si parecía acosadora pero quién no haría eso para ver a la persona que te gusta mucho.

Estando adentro busque un libro que siempre quería tener, me senté en un mueble de la librería en donde el se encontraba, me coloque a leer y cada vez que cambia de capitulo miraba a dónde estaba él sentado.

Normalmente una persona miraría para los lados pero yo miraba a cada rato y solo era para verlo. Estaba tan loca que después de ese día volvía a la misma librería a verlo, pero él no aparecía por allí, fui una semana y en esa semana me termine el libro por segunda vez.

Regrese a la librería la semana después, los primeros días él no aparecía pero cuando llegó el miércoles lo ví, me puse tan contenta que no me importo que viera que estaba leyendo un libro muy grosero o por decir más dieciocho.

Después de salir de allí me fui a una cafetería que cuando estaba tomándome un café y estudiando para una evaluación pude ver que él estaba tomando un té en la mismo lugar.

Como estaba sentada en la mesa de la ventana, miraba hacia el ventanal a mi mado, sin dejar de estudiar hasta que se me acabo el pastel y el café.

Unos minutos después me levanté de la mesa, recogí mis cosas y me fui de la cafetería. De camino a casa pensaba en cómo sería la personalidad del chico, como se expresa con otras personas porque por lo visto fue un poco extraño conmigo, lo digo viendo de mi perspectiva que soy una completa extraña para él. Ya en mi casa donde mi madre y mi padre me esperan con ansias de buenas noticia, tenía mucha hambre porque ese pastel que era diminuto no quita para nada el hambre, mi madre ya tenía la comida lista lo único que hice fue, poner mis cosas en el mueble de la sala y sentarme a comer mientras que mis padres me miraban con cara de alegría.

—Hija y ¿Como te va? ya casi vas a salir de la universidad ¿Como te sientes?.

Mi madre es una mujer muy compasiva que si tú le pides algo ella busca la forma de dártelo, ella me entiende perfectamente pero a veces está en mi contra sin entender a lo que me refiero o lo que quiero, sin entender mis sentimientos.

En cambio mi padre es una persona muy seria y muy poco es que hablamos, no me entiende mucho como mi madre por eso es que somos distantes el uno con el otro.

—Mamá yo salgo el otro año, así que no puedo decirte si estoy feliz o triste o cualquier emoción que exista—Le dije cogiendo un poco de comida para llevármela a la boca.

—¿Y para cuando el novio?.

Al escuchar a mi madre decir eso me atragante haciendome toser, tome el vaso de agua y la bebi para responderle a mi madre.

—M.., mamá—Tosi un poco—Mamá todavía no quiero nada si. Estoy esperando a que yo vea quien es la persona correcta, viendo que tengo que cuidarme de no salir herida.

—A pero nunca me has dicho si te gusta alguien—Toma agua—ya tienes edad para tener un novio.

—Bueno eso ya es otra cosa de que si me gusta alguien pero yo no quiera decirlo porque no sé si mi sentimientos son de atracción, de gustarme o enamorarme, y esas tres son muy diferentes—Tome un sorbo de agua.

Me vio como si no quisiera que estubiera sola toda la vida, mi padre ni pendiente de la conversación que teníamos mi madre y yo. Ciertamente a él no le importa si tengo novio o no, lo que quiere es que yo sea feliz y tenga una carrera buena que me dé un buen seguro.

Me levanté de la mesa cuando ya había terminado de comer, deje los platos en el lavadero y me fui a mi habitación para poder ducharme y descansar, después de salir de la ducha me cambié y me coloque la pijama, busque entre mis libros el cuaderno en dónde tengo lo que me aprendí en la cafetería, ya me se las leyes que tenía que aprenderme solo pensaba repasar un pequeño momento antes de dormir.

Deje el cuaderno en la mochila y busque mi teléfono, le escribí a mi mejor amiga Marlyn, no me respondió al momento asi que decido llamarla.

—Alo, Marlyn ¿Que estás haciendo que no me respondes los mensajes?.

—Estaba estudiando. ¿Que paso? cuéntame se que te llamo la atención el chico ese.

—¿Pero que comes que adivinas?. Bueno digamos que un día me lo conseguí en una librería..., entre en la tienda pero no hable con el.

—¿Aisha, eres estúpida? ¡Como no vas a hablarle! en que sea búscale un tema de conversación.

—No, me da pena.

—Cuando una chica lo vea y le hable hay si te va a dar pena verme a la cara por no hacerme caso.

—¿Por que dices eso? como si esas cosas pasarán yo nunca tendría pena al ver tu cara.

—Bueno pero Ai espero que si me hagas caso y le hables.

—Bueno está bien. Nos vemos mañana ya tengo sueño chao.

—Chao bebe, duerme bien.

Colgué la llamada y puse el teléfono en la mesa de noche al lado de mi cama, apague la lámpara, me acomode para dormir tranquila sin pensamientos de nada, cerré mis ojos hasta que lo único que viera era negro.

Paison Love Donde viven las historias. Descúbrelo ahora