Aisha.
Otra vez en el hospital, Dios si te digo que arregles mis problemas es que quiero que sean de buena manera, no de que luego de haberlos arreglado pase algo malo para que si de verdad lo quiero.
Los pasillos lleno de doctores caminando de un lado a otro, detrás de mi estaba Gabriel pues como les dije antes el me sigue a todos lados.
—¡Ai! creo que es aquí—Me dice Gabriel parado enfrente de una habitación.
Mi pecho se imprimió al solo estar a unos cuantos pasos de la puerta, me da miedo abrir y verlo a él todo lastimado.
Abrí y dejé mis pensamientos a un lado.
Allí estaba el, con golpes en su hermoso rostro. Me acerque a el y lo tome con cuidado por el mentón.
—¿Quien te hizo esto?—Pregunte sin dejar de mirarle los ojos.
—No pasa nada tranquila..., me querían robar la moto no pasa nada.
—¿No pasa nada? Leo y tu cara que..., mira lo que te han hecho ¿Por que no dejaste que se llevarán la moto?.
—¿Y perder el regalo de mi madre a los 18 años? No gracias prefiero quedarme con moretones que se van curando con el tiempo que perder la moto que tanto le costo a mi madre comprar para mí.
Me encogí de hombros y no soporte mirarlo un minuto más, me dolía incluso creo que me dolía más que a él.
Suspire y aparte la mirada, me quedé mirando el suelo mientras que Leo no decía nada solo podía escuchar su respiración.
—¿Por que nunca me contaste el mensaje?—Me pregunto y yo desprevenida como siempre.
Lo mire confundida y este se dió cuenta.
—El mensaje que te envié ayer estando en la cafetería nunca lo contestaste—Me explica.
—Aaah se me olvidó leerlo ¿Que decía?.
—Lo lees cuando quieras o cuando te acuerdes de mi..., después me escribes y hablamos.
Fruncí el ceño y lo mire más confundida que antes
—Esta bien si tú lo dices—
Me levanté de la cama y solo lo observe.
—Espero te mejores y no busques peleas por favor—Dije implorando-le.
—¿Te preocupo?.
Lo deje de mirar mientras buscaba la forma de esquivar su pregunta.
—Aisha por favor respóndeme ¿Te preocupa que me meta en líos?—Lo mire y entendió que si. Solto una risita y me miró—Ai ¿Desconfías de mi?.
—Puedes dejar de hacerme preguntas me incómoda..., y no, no desconfío de ti solo que cualquier cosa te hace enojar y pues reaccionas de una manera un poco...
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Paison Love
RomansaElla cometió un error el cual ya no puede reparar, el cometió un error el cual logra aceptar y no cambiar. Quieren recuperar el tiempo perdido llegando a la conclusión de no seguir más e ir por caminos separados. ¿Cuál es el error?