Tus ojos siempre fueron únicos.
Un color realmente especial.
Podían ser de un café intenso que te quitaran el sueño.
O un color miel que te transportaran a otro universo.
Tus ojos me hipnotizaban y yo apenas te podía decir nada.
Tus ojos eran un juego tentador que estaba dispuesta a jugar.
Una batalla interna que era imposible de ganar.
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Secuelas de un corazón roto.
PoetryAl final comprendes muchas cosas: que no todo fue amor, que esa amistad no era tan verdadera y que lleven tu sangre no significa que te cuiden. Se puede simplificar en una frase muy sencilla: amar no implica ser amado. Te pueden romper el corazón de...